OVERDUE FINES ARE 25¢ PER DAY PER ITEM Return to book drop to remove this checkout from your record. 0mm}. m © 1979 LOURDES CARRASCO DE FELIX ALLRIGHTS RESERVED LA FUNCION DEL MITO EN LA NARRATIVA DE ROSARIO CASTELLANOS By Lourdes Carrasco de Felix A DISSERTATION Submitted to Michigan State University in partial fulfillment of the requirements for the degree of DOCTOR OF PHILOSOPHY Department of Romance and Classical Languages 1979 ABSTRACT LA FUNCION DEL MITO EN LA NARRATIVA DE ROSARIO CASTELLANOS BY Lourdes Carrasco de Félix Este trabajo, que analiza las estructuras miticas en la narrativa de Rosario Castellanos, pr0pone que el mundo mitico es el eje fundamental de su obra, asi como el hecho de que esta narrativa refleja un mundo cultural profundamente tenido por el mito. Todos los libros narrativos de Rosario Castellanos son, en alguna medida, autobiobraficos y documentan el propio contorno histdrico- geogréfico de su pais. Pero detenerse en estos niveles de significado sin relacionarlos con otros --e1 plan mitico y el legendario-- es desestimar una obra que la critica ha considerado menos compleja de lo que evidentemente es. Lo que le confiere singularidad y valor a su narrativa es la configuracidn estética que en ella asumen afirmaciones psicolOgicas y cosmoldgicas, asi como la profundizacidn del sistema mitico- simbOlico empleado, que se conecta intimamente con los estratos culturales vigentes afin en la conciencia y en la vida del mexicano. Para llegar a una definicidn coherente y especifica del mito, a fin de poder aplicarla a lo anteriormente expuesto, en el primer capitulo de este trabajo se expone c6mo se produce y cudl es su funcion. Para ello se tienen presentes las obras de Mircea Eliade, Ernst Cassirer, Carl G. Jung, G. S. Kirk y Luis Cencillo, a cuyas conclusiones y conceptos del mismo se Lourdes Carrasco de Félix atiene el criterio que se aplicara después. En el segundo capitulo se interpreta la funcidn del mito en EELQE 92232: donde se ve un mundo mitico reconstruido a través de simbolos, de una formalizacion intuitiva de una cosmologia, de la interpretacion subjetiva de los mitos y leyendas de los antiguos mayas, y de la capacidad de la autora de revelar la realidad en todos sus sentidos. E1 tercer capitulo, "Dimensiones miticas: lo sagrado y lo profano en Oficio d3 tinieblas", tiene por tema la segunda novela de Rosario Castellanos. En 61 se muestra cémo multiples planos de lo mitico se integran en la novela para recrear un mundo en el cual e1 mito es el axis de toda accion. En el capitulo cuarto se identifica lo mitico en Ciudad Real y en Los convidados fig agosto a través de historias, de ceremonias, de creencias y de ritos antiguos, muchos de los cuales, como se vera, estén afin en vigencia. En el quinto capitulo, titulado "Los mitos contemporéneos en Alggm'gg familia y §l_eterno femenino", se estudia 1a forma en que Rosario Castellanos presenta en estas obras los distintos aspectos de los mitos relacionados con la vida, costumbres y actividades de la mujer de Mexico. En la conclusion se expone que esta aproximacién analitica a la novelistica de Castellanos ha sido realizada para confirmar que su obra va mAS alla del aspecto indigenista y de que trasciende la mera critica social. Finalmente, alli se sostiene que el mito y sus estructuras confieren los aspectos mes importantes y profundos en la narrativa de Rosario Castellanos. AGRADECIMIENTO Al profesor Donald A. Yates, quien con su asesoramiento hizo posible 1a culminacion de este trabajo. También, a Fermando, mi esposo, por su constante aliento y estimulo. Y a todas las personas que de una u otra manera contribuyeron a1 desarrollo de este estudio. INTRODUCCION I II III IV CONCUSION BIBLIOGRAFIA INDICE EL MITO Y SU PAPEL EN LA TEMATICA DE ROSARIO CASTELLANOS LA FUNCION DEL MITO EN BALUN CANAN DIMENSIONES MITICAS: LO SAGRADO Y LO PROFANO EN OFICIO D§_TINIEBLAS MITO Y REALIDAD EN CIUDAD REAL Y LOS CONVIDADOS 2§_AGOSTO LOS MITOS CONTEMPORANEOS: ALBUM 2E FAMILIA Y §L_ETERNO FEMENINO PAGINA 1 ll 45 73 109 128 150 159 INTRODUCCION Rosario Castellanos nacio en Mexico D. F., el 25 de mayo de 1925. Su familia, de origen chiapaneco, la llevo a radicar a Comitén, Chiapas, inmediatamente después de su nacimiento. Comitan es un pequeho pueblo fronterizo con Guatemala, donde gran porcentaje de la poblacién es indigena y no habla mAS que sus dialectos derivados del maya y donde el regimen de la propiedad y las costumbres son casi las mismas que implantaron los espafioles a raiz de la conquista. FUe alli donde trans- currio su infancia y sus primeros anos de adolescencia. La nifia fue educada por una nana indigena, la "cargadora", quien 1e enseho su propia cultura, su lengua, las leyendas, las tradiciones, las supersticiones y las creencias vigentes en los nucleos indigenas. Rosario Castellanos no se avergonzo jamAs de su herencia indigena ni de su tradicidn. Fue su temprano contacto con los indios tzetzales y tzotziles lo que le aportaron su vision mAgica del mundo, ese mundo en donde no hay relacidn de causa y efecto, en donde todo se inventa y se transforma. Heredo de estos indigenas el sentido mAgico de ver e interpretar la realidad. Crecio, en fin, en un ambiente de mito. Esta parte de su educaciOn formativa ha dejado huellas muy importantes en su novelistica. En 1940, cuando Rosario Castellanos contaba 15 afios, su familia se vio obligada a abandonar sus posesiones y a emigrar a Mexico debido a las consecuencias de la ley de la Reforma Agraria decretada por el presidente Lezaro CArdenas. Una vez en la capital, Rosario se refugia en la vida intelectual para la que estaba bien dotada. La vocacién -2- literaria se habia manifestado muy tempranamente, aunque no debido a una voluntad propia, sino a tristes circunstancias que no le dejaron otra alternativa. De estos tiempos Castellanos dice: "Yo recuerdo que tenia veintidOs afios cuando murio mi mama, yo no sabia prender un cerillo a esa edad. Nunca me habian dejado hacer nada. 'No, te va a dar catarro'; 'No, 10 vas a quebrar'; No, no, no. aQué puede hacer una mujer que esta sentada asi? ...escribir... ano?"1 Una vez en la Universidad Auténoma de Mexico, se inscribe en la Facultad de Leyes, pero, como recuerda la misma autora: "Al cabo de quince dias habia cometido ya un cfimulo tan imponente de errores que se considero acertado que me cambiara a cualquier otra parte."2 Ya inscrita en la Facultad de Filosofia y Letras, descubre que existia un género llamado novela que no forzosamente se dedicaba a la propagacidn de la fe religiosa y en la que los protagonistas podian ser mAS que abnegados misioneros en tierras barbaras o mArtires a punto de ser devorados per una fiera. En esta facultad termino su carrera. En 1948 coincidieron varias circunstancias para fraguar su primer libro: la muerte de sus padres; el fin de un primer tratamiento psico- analitico y la adquisicidn de un libro, Muerte sin fin de José Gorostiza.3 Con tales ingredientes elaboro Trayectoria depolvo4 un libro de poesias en el que sumaba a su concepcidn del mundo su autobiografia. Este primer libro fue bien recibido por sus compafieros de generacion (Emilio Carballido, Sergio Magaha, Luisa Josefina Hernéndez, Jaime Sabines, Ernesto Cérdenas, Sergio Galindo y Dolores Castro).5 Pero no lo fue tanto su segundo libro de poesias, Apuntes para una declaracién gg'fig,6 que si fue calificado muy desfavorablemente. Por esta razdn hizo incursiones en el teatro, en -3- e1 relato, pero volvia a su centro de gravedad: 1a poesia. En 1950 publica 22 la vigilia estéril,7 y en 1952 aparecen como productos de un proceso creativo muy depurado Dos poemas,8 El rescate del mundo,9 y Presentacion §1_templo.10 Viajes, enfermedades, trabajos, completaron e1 resto de una experiencia vital que cuajé en varios poemas draméticos de los cuales conocemos finicamente dos: Salomé (1959)11 y Judith (1959).12 Su necesidad de contar historias la llevo a la novela. La autora cuenta que: ...en 1955, y como resultado de una glatica con Emilio Carballido, comencé a escribir Balfin Canan,1 que estuvo terminada en diez meses. A medida que avanzaba iba cobrando conciencia de cual habia sido 1a situacidn en que transcurrio mi infancia, de cual era la clase a la que hasta entonces habia permanecido y de que el problema indigena, en el que jamés me detuve a pensar, demandaba ahora no 3610 mi atencidn intelectual, sino una actitud moral y determinada. Me decidi entonces a volver a Chiapas y ver de que manera podia ser fitil a1 Instituto Nacional Indigenista, que habia e tablecido un Centro Coordinador en San Cristobal, Chiapas. Habia encontrado en la prosa un vehiculo excelente de comunicacidn. Pero no por eso abandono la poesia. En 1959 publica también Al_pie g2 la letra,15 y en 1960 Livida Luz.16 La editorial mexicana Fondo de Cultura Econdmica publico su obra poética de 1948 a 1971 con el titulo de Poesia $213259” Después de fialfin Canan aparecio un libro de cuentos que bien pudo ser su complemento, Ciudad Real,18 un tomo de estampas chiapanecas. Esta historia, que cuenta de la vida de los indios tzotziles y su conflictiva relacidn con los blancos, se repite en Oficio d3 tinieblas (1962),19 y Los convidados dg’agosto (1964),20 novela y coleccidn de -4- cuentos respectivamente en donde la autora agota su interés por la provincia. A Balfin Canén, Oficio g2 tinieblas, Ciudad Real y Los convidados g2 agosto, se 1e han denominado como el "Ciclo de Chiapas" de Rosario Castellanos.21 En Album d3 familia (1971)22 pasa de los personajes indigenas a las protagonistas urbanas. Esta compuesto por cuatro relatos: "Leccidn de cocina", "Domingo", "Cabecita blanca", y Album de familia", que tratan sobre el papel y el lugar de la mujer en la sociedad mexicana contemporénea. Rosario Castellanos sobresalio también como ensayista y critica literaria. En Juicios Sumarios (1966),23.nggg.gg§_§§b§.1§£;9 (1973)24 y El mg£_y_sus pescaditos (1975)25 cultivo e1 ensayo literario con objetividad, profundidad y amenidad. Sus ensayos, a pesar de estar debidamente documentados, no caen en la pedanteria del investigador profesional y su lectura es facil. Como periodista tuvo también gran éxito. Convencida de que no se debe confundir e1 rigor con la inflexibilidad y la rigidez, Rosario Castellanos aporto a1 periodismo humor e ironia, tonos que por 10 general 105 columnistas no saben darle. Gran parte de su trabajo periodistico fue destinado a Excelsior, diario mexicano de gran popu- laridad. Este periddico publico una seleccidn de sus columnas edito- riales publicadas desde 1963 hasta su muerte en 1974, en el libro titulado, §_1_ use 513 g palabra (1974).26 Su obra pOStuma, El eterno femenino (1975)27 fue el finico represen- tante de un nuevo género literario: e1 teatro en prosa que la autora ini- ciara y que la muerte truncara. Este libro versa sobre los juegos en que -5- la burguesia mexicana participa. La autora apunta contra la hipécrita complicidad de hombres y mujeres que se arellanan en un status quo del que ambos sexos pretenden obtener ventajas y provechos. 1a.mujer, victima y cdmplice, aparece atrapada en un molde tradicional y confor- mista. Y, aunque intenta rechazar dramaticamente todo comportamiento acartonado y convencional, aqui aparece como una marioneta tratando de zafarse de los hilos asfixiantes que la sociedad presiona cada vez mes para impedir que llegue a hallar un modo de ser mas humano y libre. Rosario Castellanos fue Maestra en Filosofia y Letras en la Universidad AutOnoma de Mexico. Se dedico durante afios a1 ministerio de la catedra, tanto en instituciones de ensefianza media, de la capital y de provincia, como en la prOpia Facultad de donde habia egresado y en otros organismos de alto nivel de Mexico y del extranjero. En todos los oficios y menesteres mostré siempre una fina sensibilidad, un talento muy lficido, y una completa integridad intelectual. Mujer de ideas, Castellanos se distinguio por la firmeza de sus convicciones y por su gran capacidad moral y humana. Fue en 1952 promotora de cultura en el Instituto de Ciencias y Artes de Chiapas, eficaz colaboradora del Centro Indigenista de San Cristobal las Casas en ese mismo estado, redactora de textos escolares en el Instituto Nacional Indigenista, Jefa de Informacidn y Prensa en la Universidad de Mexico y siempre mentora del que llegara con una inquietud ante ella. Reviso las tesis profesionales de muchos estudiantes de Mexico, Estados Unidos e Israel. Es decir, educo en el mes amplio sentido del término. Y acabo su vida (7de agosto de 1974) en Israel en el servicio a su pais en la representacidn oficial de gobierno a gobierno. Sus obras fueron traducidas a varios idiomas. Su novela Oficio d3 tinieblas, considerada entre sus mejores trabajos, merecio que en menos de diez ahos se la reeditara en inglés, portugués, francés, ale- man y hebreo. Recibio los siguientes premios literarios y honores: Premio Chiapas, Premio Xavier Villarrutia, Premio Sor Juana Inés de la Cruz, Premio Carlos Truyet, Premio Elias Sourasky, y el filtimo, el honor de que su cuerpo fuera inhumado en la Rotonda de los Hombres Ilustres en la Ciudad de Mexico. E1 prOpOSito del presente trabajo es ver como Castellanos presenta una visibn mitica de la realidad mexicana. En "Rosario Castellanos O Rescate Dos Mitos Eternos", Bella Josef escribe: 0 ato de escrever situa-se, para Rosario, ao nivel do instinto. A importfincia concedida a intuicao, para um conhecimento profundo, configura uma consciencia mitica, na medida em que corresponde ao pleno exercicio da imaginacao, Orgao de conscifincia criadora e de reconhecimento do dominio humano. A facultade intuitiva permite o conhecimento dos estratos nao sensiveis nem logicamente explicaveis da realidade, uma intuicao criadora em seus diversos niveis, de cuja existencia so pode dar fe o exercicio daquela. A apreensao do mundo de Rosario Castellanos, apreensao nunca passiva mas sempre mediada pela espontaneidade enformadora de sua mente, organizase, assim, na base de certas intuicbes funda- mentais, configurando uma forma de pensamento genuino. Essa conscifincia mitica, eixo das significacbes culturais, fundamenta sua obra, através dos simbolos e mitos que afirmam a presenca de um plano inespacial e intemporal diante do qua§ se projeta a vida concreta a que aquel serve de refeféncia. 8 Es evidente, pues, que el mundo mitico es el eje fundamental en la narrativa de Castellanos y que esta narrativa refleja un mundo cultural tehido por el mito. En el capitulo I se define e1 mito e introduce su funcidn en Balfin Candn, Oficio g2 tinieblas, Ciudad Real, Los convidados 93 -7- agosto, Album dg_familia y g; eterno femenino. A1 tratar de definir e1 mito, se ha seguido muy de cerca las ideas de Mircea Eliade, quien se preocupa de estudiar e1 mito en si mismo y establecer que su funciOn es revelar la realidad total que resultaria inacesible por otros medios de conocimiento. Otros destacados pensadores que han estudiado e1 mito desde diversos puntos de vista y en cuyas teorias se ha basado este estudio son: Ernst Cassirer, para quien e1 sustrato real del mito no es un sustrato de pensamiento sino de sentimiento; Carl Jung, quien estudia e1 mito a través del Inconsciente Colectivo, en el que preexisten a1 individuo los Arquetipos o imAgenes que dirigen e1 proceso de armonizacidn de la psiquis; y Luis Cencillo quien lo ve como un producto espontaneo de la formalizaciOn cultural del mundo humano, como lo es el arte, 1a ciencia o 103 usos sociales. En el capitulo II se interpreta 1a funciOn del mito en Balfin Candn. En esta novela 1a concepcidn del mundo podria decirse que es mAgica, porque las personas que estén contemplando ese mundo son 0 indigenas que pertenecen a una civilizacidn o a una forma de cultura en la que la razén no tiene funciones importantes o nihos que tampoco han llegado a la edad de la razdn. E1 mundo mitico esta también reconstruido a través de leyendas basadas en la cosmologia maya-tzotzil. E1 capitulo III, "Dimensiones miticas: lo sagrado y lo profano en Oficio gg_tinieblas" presenta e1 mito como eje estructural, como motor significativo que nos traslada a un presente en el cual operan fuerzas que pertenecen a1 pasado. Aqui e1 mito es una fuerza social que impulsa a1 hombre a vivir en un tiempo y en una conciencia mitica a través del rito y del sacrificio. -8- En el capitulo IV se identifica lo mitico en Ciudad Real a través de las leyendas y de las costumbres de los indios tzotziles. Los diez cuentos que componen esta coleccidn son un resumen del mundo nitico y deprimente del indio chiapaneco que habita en los alrededores de Ciudad Real, antiguo nombre de San Cristobal las Casas. En Log convidados d2 agosto se encuentran ya atisbos de lo que sera el tema de las siguientes obras: e1 mito de la mujer. En "LOS‘mitOS contemporaneos: Album dg_familia y El eterno femenino," filtimo capitulo del trabajo, aparecen los mitos burgueses de la clase media mexicana. En estas dos obras se vera cdmo los ‘mexicanos de la capital mitifican y desmitifican experiencias vitales, costumbres y estilos de vida que se condensan en personajes-simbolos. Aqui 1a autora rompe mAScaras y combate los mitos femeninos que no son ni eternos ni intrinsicamente femeninos. CITAS 1 Samuel Gordon, "Rosario Castellanos: cuando e1 pasado maneja 1a pluma con ira," Cuadernos d3 Jerusalén, 2-3 (nov. de 1975), Jerusalén, p. 40. 2 Los narradores ante 21.2fib1ico (Mexico, 1966) p. 93. 3 Ibid., p. 95. "La orfandad signified, ante todo, 1a brusca ruptura de un nudo de afectos y relaciones patoldgicas en las que me agotaba en remordimientos estériles, infitiles, pro- mesas de enmienda y rebeldias que se desarrollaban dentro de una campana reumética. Libre, asumi 1a responsabilidad de manejarme sola y de administrar las propiedades heredadas. Libre, podia dedicarme ya de modo profesional a la literatura. La publicacidn del primer libro era, mas que nada, un compromise que me obligaba a mantener para el resto de mi vida." 4 Rosario Castellanos, Trayectoria dg'polvo (Mexico, 1948). 5 Emmanuel Carballo, "Rosario Castellanos: La historia de sus libros contada por ella misma," La cultura gg_Mexico, No. 44 (19 dic., 1962) p. 3. 6 Rosario Castellanos, Apuntes para una declaracidn dg_£g (Mexico, 1948). 7 , Qg_1g_vigilia estéril (Mexico, 1950). 8 , Dos poemas (Mexico, 1950). 9 , §1_rescate del mundo (Mexico, 1952). 10 , Presentacidn gl_t§mplo (Mexico, 1952). 11 , Salome (México, 1959). -10- 12 Rosario Castellanos, Judith (Mexico, 1959). 13 , Balfin Canan (Mexico, 1957). 14 Los narradores ante 21 publico, pp. 96-97. 15 Rosario Castellanos, Al_pie gg_lé_1etra (Xalapa, 1959). 16 17 18 19 9 9 3 3 Livida Luz (Mexico, 1960). Poesia 22 eres 5g (Mexico, 1972). Ciudad Real (Mexico, 1960). Oficio dg tinieblas (Mexico, 1962). 20 Clara Passafari, Los cambios y estructura gg_1§ narrativa mexicana desde 1947 (Rosario, 1968) p. 228. 21 Rosario Castellanos, Los convidados g2 agosto (México, 1964). 22 23 24 25 26 27 5 3 Album g2 familia (Mexico, 1971). Juicios Sumarios (Xalapa, 1966). 3 , Mujer que sabe latin (Mexico, 1973). §l_mar y sus pescaditos (Mexico, 1975). El eterno femenino (México, 1975). 28 Bella Josef, "0 Resgate Dos Mitos Eternos" Cuadernos d2 Jerusalén 2-3 (Jerusalén, 1975) p. 42. CAPITULO I EL MITO El mito, en su sentido mes amplio, puede definirse como un recurso de la mente humana que utiliza para comprender y explicarse los misterios fundamentales de nuestro mundo: la vida, la muerte, e1 origen de las cosas y del hombre. Es la respuesta a los proble- mas inmediatos, y se refiere a las enfermedades, a los ritos del sexo, a1 culto de algfin antepasado, a la seleccidn de elementos bené- ficos o desfavorables de la naturaleza, y también da un sentido profundo a1 comportamiento y actuacién humana. E1 mito es una manera de concebir 1a realidad, la vida y, a la vez, como una forma de descubrirla, de interpretarla en la litera- tura. En este sentido, han sido muy valiosas las aportaciones de 1 y del psicdlogo Carl Jung.2 Para ambos, lo mitico Mircea Eliade se opone en esencia a lo histdrico, a1 acontecer lineal, irreversible; lo mitico viene a ser asi una salida de la historia, un retorno a hechos y realidades primordiales, una manera de descubrir las estructuras mas profundas y permanentes de la vida y del ser. En el mito se originan las asociaciones de imAgenes, a veces absurdas e incomprensibles que expresan nuestras angustias y deseos, nuestros temores y esperanzas. E1 mito no se constituye por las fantasias inconscientes del individuo. En éstas se produce el sueno o la asociacidn libre cuando se deja llevar por la imaginacidn. E1 mito en cambio es siempre algo social y cultural. Los individuos lo viven, lo aceptan o lo rechazan y critican, pero no lo producen. Toda sociedad, por alto que sea su nivel cultural, se apoya en unos conceptos o valores imaginados y sofiados. Estos conceptos ll 12 o valores constituyen sus mitos sociales. Y a través de esos mitos forja el hombre las fantasias que siente en torno a su propio ser y al ambiente que le rodea. E1 mito es una asociacidn de imégenes, una especie de sueho que no es individual sino colectivo y social. Segfin Jung, asi como hay una experiencia del mundo externo, basado en las categorias de espacio, tiempo y causalidad, existe también otra interna. Esta fuente interior de la experiencia es el estrato mes hondo del inconsciente, que Jung llama e1 inconsciente colectivo. La estructura organizativa de esta fuente siquica 1a constitu- yen los arquetipos, que son 1a estructura que proporciona e1 modelo para los suefios, 1a imaginacidn y la fantasia. Los arquetipos se dan claramente en los mitos, los cuales en la antiguedad cumplian la misma funcidn que el terapista en nuestros dias; el de servir de pantalla en la cual proyectar los productos del inconsciente colectivo. La naturaleza de los arquetipos puede, por lo tanto, extraerse de los elementos basicos del drama mitolégico. Existen personajes arquetipicos (e1 héroe, el viejo sabio, etc.); temas arquetipicos (amor, odio, fe); lugares (1a caverna, e1 cruce de un rio); argumen- tos, (1a persecucidn, la batalla, 1a bfisqueda); y estados de animo (tormentoso y sereno). E1 mito es también una historia. Para Mircea Eliade, todo mito cuenta una historia sacra sucedida en tiempos primordiales, en un "Illus Tempus", cuya realizacidn trajo como consecuencia e1 existir de algo para siempre. Es, por tanto, més real que cualquier otro acontecimiento profano, a la vez que trae una norma de comportamiento ejemplar para el individuo y la comunidad.4 Eliade explica: Siendo real y sagrado, e1 mito se convierte en ejemplar y, por consecuencia repetible, pues sirve de modelo y de justi- ficacidn a todos los hechos humanos. Es una 'historia verdadera' que ha ocurrido a1 comienzo del tiempo y que sirve de modelo a los comportamientos humanos. Imitando los actos ejemplares de un dios 0 de un héroe miticos, o simplemente contando sus aventuras, el hombre de las sociedades arcaicas se separa del tiempo profano y se reune mAgicamente con el Gran Tiempo Sagrado. 13 Entre las investigaciones mitologicas mas importantes se encuentran los estudios estructuralistas, en los que ocupa induda- blemente e1 lugar mAS destacado el nombre de Claude Levi-Strauss. Del conjunto de su obra se desprenden valiosos aportes, entre los cuales podemos mencionar: a) La consideracidn del mito como instrumento logico, no propio de una mentalidad inferior, sino tan valido para aprehender lo real como el pensamiento racional: Tal vez un dia descubramos que en el pensamiento mitico y en el pensamiento cientifico Opera la misma 16gica, y que el hombre ha pensado siempre igualmente bien. El progreso -- supuesto que el término pudiera entonces aplicarse-- no habria tenido como escenario la conciencia sino el mundo, un mundo donde 1a humanidad dotada de facultades constantes se habria encontrado, en el transcurso de su larga historia, en continua lucha con nuevos objetos. b) E1 establecimiento de la doble estructura, a la vez "histo- rica" y "ahistdrica" del mito. c) La descripcidn de las Operaciones logicas que estén en la base del pensamiento mitico. Asi, por ejemplo, 1a toma de conciencia de 7 y la logica de las cualidades sensibles.8 ciertas oposiciones, d) E1 establecimiento de una metodologia para el analisis del relato mitico: su intento de esbozo de una sintesis de la mitologia sudamericana. Asi como el original intento de Levi-Strauss de asimi- laciOn del tratamiento del mito con las modalidades estructurales musicales, realizado en Mitolégicas. Segfin Luis Cencillo,9 Lévi-Strauss aporta una importante dimension del mito: su funcionalidad expresiva y constitutiva de todo un mundo cultural. Pero lo reduce a ser un elemento funcional-expresivo, absolutamente vacio de contenido en 31 mismo y suceptible de recibirlo 14 3610 gracias a su integracidn en una estructura sintéctica, segfin leyes que no rebasan lo espacial, econdmico y utilitario. Cencillo considera esta teoria demasiado formalista y limitada, ya que segfin él, Levi-Strauss desconoce que el mito se orienta hacia lo trascendental. Para Luis Cencillo e1 mito es: "...ante todo, un producto espontaneo de la formalizacidn cultural del mundo humano, como lo es el arte, la ciencia o 103 usos sociales."10 Dos notas caracterizan e1 mito: 1) Es respuesta a las cuestiones més profundas y graves que un grupo humano se plantea.11 2) Es e1 resultado de intuiciones privilegiadas que han descubierto conexiones insospechadas entre realidades transempiricas.12 AdemAs, segfin Cencillo, "casi todo nuestro 'saber', mas o menos orientado acerca de las realidades de la existencia, casi todas nuestras representaciones generales, se basan y proceden de los mitos. No es un saber cientifico,'mAs no por e110 deja de ser 0 de 'poder ser' un verdadero 'saber' acerca de realidades en profundidad."13 Teniendo en cuenta las opiniones anteriormente expuestas, se pueden establecer las siguientes caracteristicas esenciales del mito: a) El mito no es una irrealidad ni una falsedad, sino un producto cultural, una formalizacidn cultural, una forma de reflexidn y representacidn de 10 real. En otras palabras, un lenguaje. b) Implica reflexidn impersonal, vivencia colectiva. c) Todo mito esta en la zona de contacto entre dos o mes planos que se dan como contrarios a la refleccidn comfin: lo efimero con lo eterno, 10 natural con 10 sobrenatural, lo conocido con lo desconocido. 15 De aqui esa "multivalencia vivencial del mito",14 cuya funcion es, segfin Cencillo: "Dar expresién remotamente inteligible y fundante a las implicaciones dialecticas y a la 'unio contrarium' que toda realidad en su dimension radical presenta. Precisamente por ello supera e1 mito los recursos categoriales de la LOgica y del Lenguaje formalizado."15 d) E1 mito implica un intento de dar respuesta a cuestiones graves que el grupo se plantea. e) Es una norma de comportamiento ejemplar. Inmediatamente relacionadas con estas conotaciones aseveramos las siguientes especificamente referidas a lo mitico en la narracidn: f) En la narracién mitica hay siempre un segundo plano, simbdlico o sugerido, que se desprende de la anécdota narrada y remite a "otra zona" trascendente a lo anecdético, atemporal, "ejemplar". g) La caracterizacidn plasma arquetipos mAs que individuos. h) La verdad del mundo narrativo estructurado miticamente no depende de su referencia a1 mundo exterior, sino de su "funcionalidad expresiva". Es una realidad autOnoma. Hasta aqui se ha tratado de determinar lo que es el mito segfin las teorias de los destacados pensadores anteriormente citados. Se pasara ahora a considerarlo tal como nosotros lo hemos interpretado y enfocado en la narrativa de Rosario Castellanos. Para los fines del presente estudio, e1 mito aparece como filosofia primitiva, 1a mAS simple forma de presentacidn del pensamiento, una serie de esfuerzos por comprender el mundo, por explicar la vida y la muerte, e1 destino y la naturaleza, los dioses y el culto. Cabe hacer mencidn que el mito se distingue de una leyenda en que ésta es una historia primitiva, formulada 16 ingeniosamente en términos de amor, odio, transformada y simplificada de manera inconsciente. 17 MECANISMOS QUE PRODUCEN EL MITO En todo hombre hay una serie de tendencias inconscientes basicas que tienden a expresarse en simbolos. Los simbolos en general son objetos del mundo circundante: el sol, el mar, la luna, las institu- ciones sociales, los otros hombres, en especial e1 padre y la madre, e1 estado, las fuerzas sociales. Estos objetos cuando se vuelven simbolos pasan a recibir toda la carga afectiva de deseos y temores que constituyen e1 fondo del ser humano. Ya no son mes meramente objetos sino simbolos, porque en ellos se ha proyectado el mundo de tendencias subjetivas. De hecho la realidad en 31 misma ya no interesa sino la carga afectiva que se ha volcado en ella. Esto es lo que sucede en los suehos del individuo en los que en verdad las cosas que aparecen y se relacionan entre si ya no interesan en 81 mismas y deben ser interpretadas para desentrahar los problemas afectivos que representan. Lo mismo podemos decir del mito: en él, sol, luna, fuego, rey, padre o madre han pasado a expresar el mundo intersubjetivo de todo un pueblo 0 de un grupo social 0 en algunos casos de toda la humanidad. E1 mecanismo del mito es entonces el de la proyeccidn o si se quiere de la condensacidn por la cual sobre algun aspecto de la realidad objetiva se ha volcado el mundo subjetivo. Pero apor qué tales cosas sirven de simbolo y no tales otras? En la antigfiedad predominaron los simbolos casmicos, mientras que en el mundo :moderno, como veremos, tienden a prevalecer los simbolos fundados en realidades sociales, politicas o culturales. La eleccidn de los simbolos principales depende de los pueblos, de las razas y del nivel de evolucion histdrica y surge de la capacidad de evocacidn que tienen 18 ciertos objetos para despertar y expresar nuestras tendencias. Asi, el agua fue un elemento esencial en casi todos los mitos antiguos. Para el hombre de la antigfiedad 1a realidad agua despertaba y evocaba toda una serie de emociones, de esperanza, de deseo y también de ansiedad y de angustia. E1 agua para él representaba la vida y el ansia de vivir. También 1e sugeria limpieza, purificacidn, frescura, paz y serenidad. Pero a la vez podia ser expresidn de las fuerzas adver- sas de la naturaleza y punto de condensacidn de las ansiedades humanas; el agua enfurecida del mar podia destruirlo, castigarlo, hundirlo; en la tormenta podia inundar toda una regiOn y deshacer su trabajo con todas sus esperanzas. Simbolos y mitos no aparecen como 'creaciones irresponsables' de la psique sino que responden, como nota Eliade, a una necesidad vital, y llenan la funcidn de "dejar a1 desnudo las modalidades mms secretas del ser."16 Se podria enumerar otros mitos antiguos constituidos principalmente por elementos c63micos. En general, muchas veces los mitos repiten en distintas tonalidades las mismas notas.17 Asi las mismas ansiedades frente a la vida y la muerte vuelven a expresarse en otros matices en los mitos sobre el Arbol o la planta de la vida, que encontramos en la Biblia y en los relatos babildnicos.18 E1 pensamiento mitico tiende a expresar sus esperanzas y temores por el proceso de la divinizacidn o la demonizacidn. Los valores,aquello que una cultura considera valido y esencial para su existencia, tienden a ser divinizados. La divinizacidn tiene distintos grados de explicacidn: desde 1a forma mAs directa en que una realidad cosmica 0 social es 19 personificada y entendida como un dios a1 que se rinde culto, hasta 1a mAS disimulada en que un valor cultural es objeto de la admiracidn, fascinacién y veneracidn de un grupo humano. En todos los casos e1 proceso psiquico siempre es el mismo. Lo mismo podemos decir de la demonizacidn: lo temido, lo que se rechaza y lo que angustia se demoniza pero con diversos matices de intensidad que van desde 1a identificacidn de una fuerza c65mica 0 social con algfin espiritu maligno, hasta 1a forma més disimulada que generan las fabulas sociales de desaprobacibn, odio, rencor contra un grupo humano, una raza, o una expresién artistica y cultural. En la historia tenemos asi los casos de divinizacién del sol 0 de la luna, divinizacidn del estado 0 de algun personaje del pasado y divinizacidn de una raza superior, de una clase social, de la ciencia 0 de la técnica. También existe 1a demonizacidn del mar con su dragdn maligno, del fuego 0 de la oscuridad, de una tribu enemiga, de un grupo politico 0 social. Mientras que en la antiguedad e1 proceso de divini- zacion o demonizacidn personificaba las realidades objetivas proyectando todo el psiquismo humano sobre ellas, en el moderno este proceso esta controlado y la personificacidn es mAs disimulada y tenue. Entre todos los mitos tienen especial importancia los llamados mitos de origen o mitos etioldgicos que relatan de un modo fantastico los origenes de todo aquello que afecta o interesa a la vida humana: e1 origen del cielo, los astros, la tierra, las plantas y animales; e1 origen del hombre y la mujer, e1 origen del sexo, de la agricultura y de las técnicas; e1 origen del poder politico; e1 origen del sufrimiento y de la muerte. En todos estos mitos el hombre se remonta a un tiempo 20 anterior a todos los tiempos, un tiempo primordial en el que coloca todos sus ideales: es la edad de oro de los romanos e1 paraiso de los hebreos y de los persas, la edad perfecta de los hindfies.19 Los problemas del presente se resuelven en base a supuestos acontecimientos del pasado colocados en un tiempo que esta fuera de la historia. Cualquiera de las cosas que suceden tendra su modelo y explicacién en ese tiempo (arquetipico) ideal ahora perdido. Si un hombre muere actualmente, esta muerte tendra su explicacién en la planta de la vida que no pudo alcanzar e1 Guilgamesh babildnico, 0 en el pecado de Adan (biblico). Si 103 hombres de hoy cultivan la tierra es porque en un tiempo hubo un héroe celestial que vino a ensefiarlo y si existe 1a planta del tabaco es porque alguna mujer primordial fue muerta y de su sangre nacio 1a planta.20 Este tiempo primero, en muchos casos, es una especie de copia que hace tomar conciencia del presente y en el caso de la Biblia, especialmente como veremos, tienen una fuerza dinmmica sugestiva que impulsa a renacer, a volver a las condiciones de existencia ideales por superacion de lo que ha producido 1a caida y la pérdida de esas 21 condiciones. Este tipo de mitologia es la que se encuentra en esencia en Oficio g; Tinieblas, Balfin Canan, y algunos cuentos de Los convidados ‘gg agosto de Rosario Castellanos. En ellas se intenta resolver las ansiedades del presente mirando hacia el pasado. 21 UBICACION DEL ESTRATO MITICO EN LA NARRATIVA DE ROSARIO CASTELLANOS Establecidos 1a definicidn, 1a caracterizacion y los mecanismos que producen e1 mito, se verificara en principio, la existencia del nivel mitico en Baldn Canan, Oficio d2 tinieblas, Ciudad Real, Los convidados g3 agosto, A1bum.dg familia y El eterno femenino. La presencia del mito en estas obras es evidente y ha sido reconocida generalmente por la critica y por las intenciones declaradas por la autora. Comenzaré con algunas opiniones a1 respecto: En su dialogo con Maria Luisa Cresta de Leguizamén, Castellanos manifesto a la entrevistadora acerca de Balfin Canan: Si, soy plenamente consciente (de las reminiscencias de raices poéticas iniciales; de la actitud frente a1 idioma), y yo veo, ademés, como este elemento poético que es sumamente importante por su abundancia en los primeros libros de relato, de narracion, por ejemplo en Balfin Canan va desapareciendo o adquiriendo otro tono menos lirico, un tono un poquito mes grave, un tono mAs... de una estructura mAS funcional en los libros siguientes. Porque esto corresponde a un cambio en la concepcidn del mundo. La concepcion del mundo en Balfin Canan podria decirse que es mAgica; las personas que estén contemplando este mundo son, 0 indigenas que pertenecen a una civilizacidn o una forma de cultura en la que la razon no tiene funciones importantes; o nifios que tampoco han llegado a la edad de la razdn2 Entonces es vélido que use la lirica para transmitir ese mundo. En su carta a Elias Nandino, asigna lo mitico a su contacto bastante intimo y no deformado por intermediaries, con la mentalidad, las costumbres y las esperanzas de los indios chamulas de Chiapas: El aho pasado escribi una novela, la primera en mi haber. Se llama Balfin Canan, el nombre indigena de mi pueblo. Narra la historia de una familia chiapaneca duefia de un latifundio en la época en que se impuso e1 agrarismo. Esta dividida en tres partes, la primera y la tercera escritas en primera persona, en la que se supone que quien cuenta sus impresiones es una niha de siete afios. Una niha que no corta e1 corddn umbilical a la que la ata a la poesia. Poesia y magia son los dos instrumentos de los que se sirve para captar el mundo. 22 E1 critico Joseph Sommers, quien ha tratado con gran dedicacion las novelas de Castellanos, adscribe lo mitico a la ambivalencia de planos temporales en la que esta construida Oficio g2 tinieblas y al hecho de que los acontecimientos acaecen y se transforman dentro de la conciencia colectiva indigena-chamula, que cambia y transmuta 1a realidad en mito: Preocupada (Rosario Castellanos) por la relacidn entre la realidad y el mito, la obra esta construida sobre dos planos temporales, contradictorios. La accidn se desarrolla en un marco hist6rico preciso, e1 periodo de 1930 y el inmediatamente posterior, la época de Cardenas y punto culminante de la Revolucion. En contraste, el tiempo, para los indios Tzotzil, tiene la cualidad historica de una leyenda india. Los parrafos de apertura ubican la escena en San Juan Chamula, e1 centro religioso y politico tzotzil, en términos de un mito cristianizado narrado con el lenguaje y las imégenes del P0201 22h, version maya de la creacion. A1 final de la novela, 1a derrotada rebelién india es sintetizada no en términos de batallas ganadas o perdidas, sino en la forma de un mito nuevamente creado. El narrador comenta: "Desnudos, mal cubiertos de harapos 0 con taparrabos de piel a medic curtir, han abolido el tiempo que los separaba de las edades pretéritas. No existe 24 antes ni hoy. Es siempre. Siempre 1a derrota y la persecucion. Maria del Carmen Millan sefiala e1 nivel mitico y simbOlico de esta misma novela: Oficio g3 tinieblas no oculta la atraccion fascinante que le deparan los simbolos, inasibles. Parte del principio humano de que el hombre necesita de sus dioses en la medida en que los dioses necesitan a los hombres. Mientras unos exigen adoracion constante, los otros requieren su ayuda para realizar su misidn y defenderse de penas personales y colectivas. Los dioses necesitan ser palpables; representa una sintesis de creencias y necesidades; son 1a personificacidn esencial del mito y del cosmos, e1 apoyo y la respuesta entre lo desconocido y el hombre. 5 Sobre Ciudad Real, Maria del Carmen Millan dice en su valioso articulo titulado igual a la obra: A Rosario Castellanos no le interesa e1 aspecto pintoresco de las costumbres: ceremonias, la vida familiar o comunal, antiguas hist6rias de levantamientos y castigos, tradiciones de magia y brujeria. Todo ese mundo estético o lento, cargado de sugestiones, 23 de correspondencias extrafias, tan contenido y aparentemente impermeable de la injuria y a la ayuda, 5610 forma e1 contexto, e1 ambiente que provoca una situacién cuya crisis detendra al lector antes de que intente una respuesta apresurada. 1a autora trata de los mitos que se han creado alrededor de la mujer, su situacidn y condicion. Como hace notar Beth Miller: Castellanos acostumbra ver sus problemas personales en un ambito social, identifica sus vivencias subjetivas con experiencias generales de la condicion famenina a través de la historia y entiende ‘que el apel sexual es significativo tanto politica como cultural- mente.28 Porque, como nota Castellanos en Mujer Que sabe latin, "la mujer ha sido mes que un fenomeno de la naturaleza, mes que un componente de la sociedad, més que una criatura hwmana, unmito."28 Y busca a través de los personajes de estas tres filtimas obras "otro modo de ser" desmiti- ficando. En una entrevista que Samuel Gordon tuviera con la autora comenta esta: Todos los mitos alrededor de los cuales estamos girando, e1 mito de la maternidad, que se ve en "Cabecita blanca" (segundo relato de Album g2 familia) es monstruoso. E1 mito de la fidelidad conyugal, de la abnegacidn, del apoyo, etc. Todos estos mitos, si existe realmente una virtud --- pero en el buen sentido de la palabra, es decir en el sentido de que es fuerza, --- esto quedara de manifiesto, y todo lo demAs, lo que es paja, lo que es nada mes una acumulacidn de historias repetidas de generacidn en generacidn, pues, se va a desechar para tratar de asumir una actitud que real- mente corresponda a una necesidad. Es decir, si una mujer empieza por aceptar algo que todavia en Mexico no es muy aceptable, por aceptar su cuerpo, va a empezar por aceptar las necesidades de su cuerpo y la responsabilidad de su cuerpo ano? Es decir, habra menos mujeres seducidas, de las que hay. 24 ENFOQUE TEMATICO E1 aspecto mitico que caracteriza a Balfin Canan, Oficio d3 tinieblas, Los convidados dg_§gosto, Ciudad Real, Album.gg familia y El eterno femenino, se fundamenta a continuacidn a través de un enfoque temAtico en donde se verdn aplicadas las categorias que definen a1 mito. La historia de la fundacidn de Chactajal en B21g2_gagég (p. 57), 1a creacidn de San Juan Chamula en Oficio d2 tinieblas (p. 9), son una formalizacidn cultural de los indios Tzotziles de Chiapas: se la trans- miten oralmente y forma parte de su propia tradicidn como pueblo. El propdsito de Rosario Castellanos al presentar leyendas y creencias de los indios chamulas (personajes principales de estas dos novelas), narradas en el lenguaje y las imAgenes del libro sagrado de estos indigenas, e1 22221.223: es el de presentar su pensamiento megico, primi- genio y el pensar visionario del mito que da una razOn explicativa del mundo. Para e1 chamula e1 mito es la realidad absoluta, 1a finica realidad de sus creencias ya sea que se relacione con el comienzo del mundo 0 con tiempos mes recientes. Lo que ocurre hoy es prueba de lo que sucedio en el pasado, y lo que en tiempos pretéritos tuvo lugar, puede repetirse en cualquier momento. Esta creencia es, quiza, la que no 1e permite al in- digena establecer una divisibn clara entre mito y relato moralizador. E1 negar que son ciertos los cuentos que se han transmitido a través de las generaciones posteriores y presentes es refutar lo que cada indigena ve con sus propios ojos, porque dondequiera y en todas las cosas se tmanifiesta 1a veracidad de los relatos: cada sumidero fue hecho por la 25 vara de Dios, para librar a la humanidad de las inundaciones; cada monte es la morada de un sefior de la montafia, e1 dios de la Lluvia; cada grano de maiz es multiplicado por el alma del maiz; el hombre puede realizar sus esfuerzos en la superficie de la Tierra porque e1 Ojoroxtotil decidio destruir a1 jaguar; e1 ser humano no viviria sin 1a continua presencia de Totilme'il; y asi sucesivamente. La vida de hoy es una consecuencia de lo que tuvo lugar en el pasado. Y existe una intima relacidn entre los mitos y otras creencias que se relacionan con el mundo chamula. Los temas miticos sobresalientes de estos indigenas son: 1a creaciOn y la destruccidn; 1a lucha de la Tierra contra el advenimiento del hombre; las hazafias de un protector y del propio maiz en relacidn con el ser humano; e1 descubrimiento de un defensor del hombre entre sus semejantes; e1 origen de la muerte.30 Estos temas y la idea de continuidad constituyen expresiones de la visiOn chamula del mundo. Basandose en estos principios y en la alta sensibilidad que los rodea, e1 chamula ha dividido los verdaderos mitos en dos grupos: los mitos de la creacidn del hombre y los mitos que refieren a la lucha del hombre, en el lugar donde esta hoy colocado. Los mitos de la creaci6n del hombre cuentan las guerras entre los dioses, el segundo grupo cuentan de los conflictos entre los hombres. Segfin Guiteras Holmes,31 el primer grupo de mitos se refiere a1 periodo de las divinidades, aunque se vincula con el advenimiento del ser humano, y comprende los grandes poderes naturales y los seres a quienes se acude por medio de la oracidn. E1 segundo periodo es el que concierne a1 hombre, a la magia y a la subsistencia humana. En el primero, el hombre tiene un protector entre 26 105 dioses; en el segundo, su defensor se encuentra en el maiz y entre sus semejantes. En el primer grupo se hallan, continua Holmes, elementos de la conocida mitologia aborigen mesoamericana: varias creaciones y des- trucciones; e1 origen de las plantas Gtiles; los peligros del "asiento o lugar del tigre"; 1a sucesidn de los "soles". La muerte de los hermanos mayores y la curacidn del dolor de dientes se cuentan en el 22221.!2E32 y en los libros de Chilam.Ba1am.33 Aqui resulta evidente que ciertos elementos de la mitologia cristiana se entreveran con los de la indigena, caracteristica que veremos a menudo en Balfin Canan y Oficio d3 tinieblas de Castellanos. Se pone de manifiesto como las dos tradiciones mitolOgicas se han unido, equiparando a Dios, a la Virgen Maria y a 10s santos con los antiguos dioses paganos. Los primeros han sido incorporados a las pautas y patrones aborigenes y, en consecuencia, han adquirido autenticidad. Puede decirse que la creencia en el castigo del pecado, a la manera cat61ica, fue externa a la concepcidn nativa. En muchas ocasiones se ofrece a1 lado de otras explicaciones de desastre, como sucede con las causas del eclipse.34 En la mayoria de sus mitos, e1 chamula emplea, en forma alternativa, los nombres paganos y cristianos de las deidades. En un mismo relato Kox es Dios y Jesucristo; e1 Ojoroxtotil es Dios y el padre del Sol; La Virgen Maria es la Luna y el Cabinal; y, de nuevo, e1 Kox es el nifio Jesus y el Sol. Algunas partes de los mitos cristianos se han incorporado a los relatos paganos. Por ejemplo, cuando se cuenta que las primeras gentes fueron destruidas porque eran enemigas de Cristo, a quien habian crucificado, o que el Ojoroxtotil es el padre del Sol, pero como el 27 astro es Jesucristo, su padre es "el carpintero”; o bien que el bastén de autoridad es, segfin se dice, e1 bastOn de Dios y el de Ojoroxtotil. Bajo la influencia del catolicismo espahol, los chamulas han llegado a asociar e1 sol con Dios y a la luna con la Virgen Maria. Pero estas asociaciones han servido tan 5610 para reforzar las antiguas creencias mayas sobre el sol y la Luna como simbolos constantes de la masculinidad y la femineidad en el universo. La mentalidad mitica no distingue principios 16gicos sino que distingue un mundo finico que puede ser visto en sclo dos términos: sagrado y profano.3S $610 luego de establecer su valor, la mente primitiva establecera los hechos que le corresponden. La divisidn del mundo en fuerzas sagradas y profanas es la finica posible, dado que en la mentalidad mitica la emocién antecede a la presentacidn objetiva. Debido a1 punto de partida emocional, no se distingue el mundo real del imaginario, la vigilia del sueho, ya que el constante flujo de la vida permite e1 pasaje de un estrato a otro sin siquiera considerar e1 problema de realidades objetivas, tal como lo hace la mente racional. Esto no significa que el ser primitivo sea incapaz de captar las diferencias empiricas entre los objetos, sino que éstas son vistas como artificiales y de poca importancia ante e1 principio fundamental de la solidaridad vital.36 En los acontecimientos mes recientes de la cultura chamula, se han introducido elementos miticos, de manera especial, aquellos que implican la causacion. Los nuevos elementos que se aceptan y los cambios que se afectfian no reciben una explicacion histOrica, una vez que la memoria de los vivos no puede dar fe de ellos; y pasan, en forma gradual, a ser parte del principio. Asi, los eventos criticos que estdn presentes todavia 28 en la memoria de los ancianos, pues tuvieron lugar durante su vida o la de sus padres, se explican de dos maneras, a veces contradictorias. De acuerdo con una de ellas, se da a conocer 1a causa real; en la otra, se introducen elementos msgicos. En dos sucesos de la historia de Chiapas de la segunda mitad del siglo XIX, se muestra este proceso de pensamiento: la desaparicidn de los Totilme'il en su calidad de poderosa autoridad de calpul o familiar y la Guerra de Castas de 1868-69.37 En las narraciones que se hacen acerca de la Guerra de Castas, son evidentes los elementos miticos. E1 tema basico de Oficio d3 tinieblas, es la historia de tal batalla. Es sabido que los indios fueron derrotados durante tales acciones; no obstante, se cuentan las peripecias del dirigente chamula que defendio a los grupos que aceptaron sus proposiciones de socorro. En tales relatos, a1 hombre no le falta un protector. Se pasa por alto 1a derrota para reforzar 1a creencia en la perenne ayuda que le ofrece a1 ser humano un poderoso ser sobrenatural, asemejando a Dios Las ceremonias y los rituales tienen un valor absoluto para los chamulas. Los ritos actualizan en un tiempo y espacio concreto, un hecho fundamental realizado una finica vez y para siempre por la divinidad. En el ambito chamula se dan una serie de rituales que tienen por finalidad hacer propicia 1a voluntad de los dioses para una tarea que se va a emprender o una faena que se ha concluido. Nada importante en el quehacer y la vida de la comunidad tiene lugar sin un previo y posterior acto de caracteristicas sagradas. Esta actitud corresponde a la 'mentalidad del indio que se ubica en un plano donde lo absolutamente real es lo sagrado. 29 Levy-Bruhl38 llego a la conclusidn de que la mentalidad primitiva es intensamente mistica, es decir, que cree en la participacidn de fuerzas ocultas en su mundo. Todo lo que expresa e1 primitivo esta basado en términos concretos, ya que su capacidad de aprehensidn no admite abstracciones.39 Su mundo esta integrado por los elementos perceptibles de la realidad empirica y por los espirituales que capta por medios intuitivos. No hay diferencia entre el mundo que percibe a través de los sentidos y el que intuye.4O Si bien e1 ser primitivo parte de lo que siente a1 nivel empirico, todo lo referira a1 plano mistico que es el finico capaz de explicar 1a realidad.41 Este gran énfasis en la sensibilidad reemplaza a la intelectualidad del hombre 'civilizado', racional.42 En este sentido, concluye Levy-Bruhl, 1a mentalidad primitiva es intensamente mistica y no conceptual.43 Dado un mundo finico, cuyas dimensiones ocupan toda posible experiencia, y donde se une lo empirico a lo espiritual en torno a1 principio de existencia, se pueden establecer los siguientes principios: todo hecho, empirico o no, posee un igual grado de realidad (Primitive Mentality, p. 60);44 todo hecho es simultaneamente reflejo y manifestacidn de un espiritu (pp. 58-9.); 10 accidental es imposible ya que todo se debe a fuerzas misticas; la ley de participacidn y exclusidn permite que algo pueda ser otra cosa sin llegar a fusionarse en un objeto finico (p. 55.); 1a ley de permutacion, corolario de la anterior, establece que los seres pertenecientes a ese estrato existencial finico pueden intercambiarse, lo cual explicaria e1 pasaje sin obstaculos del nivel empirico a1 mistico y viceversa. (pp. 98-99). Partiendo desde un punto de vista filosdfico-cultural, Ernst Cassirer 30 establecio ideas andlogas a las de Levy-Bruhl.45 En A3_Essay gg'Mané6 Cassirer demuestra que la mentalidad mitica concibe una sociedad vital que abarca todo lo que posee vida. Esta sociedad es mas importante que cualquier conglomerado de apariencias externas manifestadas en las formas fisicas de sus integrantes. Lo humano es parte de esta sociedad pero sin poseer un rango superior a 10 animal y vegetal. En principio de la posesidn de vida es lo que unifica a todo lo que es en un sistema finico de valores. Estos conceptos de Levy-Bruhl y de E. Cassirer comprueban camo e1 pensamiento mitico del chamula, funciona en relacidn a la mentalidad mitica primitiva en general. Oficio d5 tinieblas y Balfin Canan, se asientan esencialmente, sobre un mito basico, e1 mito del abandono paradisiaco y la voluntad de afirmacidn por parte de los indios chamulas. Cabe hacer mencidn a1 tono ceremonioso de los libros sagrados prehispanicos que predomina en estas obras. Son novelas que nos abren camino por un mundo indigena misterioso, solitario, lleno de leyendas definitivamente autenticas. Vistos estos puntos, prosigamos a la identificacidn de las principales, bases miticas de la narrativa de Castellanos en donde se aplican las categorias que como se ha visto definen e1 mito. 1. En "El ciclo de Chiapas" aparecen las tradiciones y creencias (leyendas) de los chamulas. Estas creencias implican reflexiOn impersonal, vivencia colectiva. 2. En Balfin Candn y Oficio gs tinieblas existe una ambigfiedad de planos: vista del punto de vista de los indigenas, quienes apelan a todo lo sobrenatural; y la versidn de los blancos (los ladinos, explotadores y 31 opresores de los indigenas chamulas). 3. Aparece también un intento de respuesta a cuestiones graves plantea- das por el grupo: 1a cuestiOn sexual, el tema moral de la salvacidn o la condenacidn, el tema del amor y de la muerte. 4. Norma de comportamiento ejemplar: todo lo que hay de desafio y de castigo en la figura y en la trayectoria del personaje central en Oficio d3 tinieblas, Catalina Diaz Puilja; y de Felipe, en Balfin Canan. 5. En la historia de Oficio d3 tinieblas hay permanente ambiguedad y superposicion de planos significacionales: a) La conducta misteriosa de Catalina, que da lugar a interpretaciones sacrilegas del padre Mendujano y del sacristan Xaw, a1 asombro mAgico prOpio de la mentalidad de los chamulas. b) Verdad-engafio: versiones sobre el chal de la Alazana, y sobre el levantamiento (pp. 306 y 368 respectivamente.) c) Clima de ambiguedad y de misterio. 6. Hay una caracterizacidn que plasma "arquetipos" mes que individuos. Para aclarar e1 sentido que demos a arquetipo, nos serén fitiles las aseveraciones de Rene Jara Cuadra, quien refiriéndose a1 tema dice en su articulo, "E1 mito y la nueva novela hispanoamericana":47 E1 pensar plasmado en esta novelistica corresponde a un estadio mAgico anterior a1 principio de identidad, que no es concreto ni abstracto sino "sincreto o confundente", para decirlo con palabras de Ortega, en donde $610 existe lo que tiene que ver con algo; su dinamismo es el de una analogia combinadora de hechos y objetos dispersos en estructuras intercambiables. Asi se comprende por qué, antes que tipos o simbolos, los personajes encarnan mayoritariamente una configuracidn arquetipica, ajenos a toda fluencia tempo-espacial o psicoldgica, extrafios a la verosimilitud psicoldgica y cul- tural, auténticas presencias de lo hispanoamericano, vivencias de un arcano original en que todo era posible. Los caracteres individuos quedan en segundo plano, y no debe sorprendernos que un nativo de Santa Mdnica de los Venados cambie el nombre de la isla de Santa Prisca por el de San Priapo, en una acotaciOn 32 de elevada ironia intelectual y cultural, para aludir a1 regodeo er6tico de Mouche en Los pasos perdidos; de la misma suerte que el Jaguar y Teresa en La ciudad y los perros; Lituma y Bonifacia en ‘Lg Casa Verde, sufren cambios radicales en su actitud frente a1 mundo que, a veces, nos cuesta reconocerlos. Lo que importa es la antropofania americana yacente en su calidad arquetipica. La transcurrencia a espaldas del tiempo que sorprendemos en estos seres arquetipicos, permite 1a identificacidn del mito... Contiene la vida humana en su totalidad: por medio del ritmo actualiza un pasado arquetipico, es decir, un pasado que potencial- mente es un futuro dispuesto a encarnar en un presente. Por eso, en la regiOn temporal del mito los contenidos de conciencia del individuo se funden con los de la humanidad. Segfin esto, lo arquetipico americano en la obra de Castellanos se da en: a) Balfin Canan: 1a nana, -- la arcana, portavoz de las leyendas de una tribu--; e1 padre, e1 Conquistador; Felipe, 1a Victima en bfisqueda de redencién, e1 "Hermano Mayor". b) Oficio d3 tinieblas: Catalina, 1a Madre, la mujer estéril, paridora de dioses; Pedro Winikton, el Prometeo americano; el padre Mendujano, e1 cura de mentalidad feudal; Isabel, 1a esposa Victima, 1a esposa abnegada opuesta a la Alazana, la mujer facil, la querida; Fernando Ulloa, e1 Liberador; Domingo, e1 Redentor. c) Ciudad Real: Los indios chamulas, la raza oprimida, explotada. En "Aceite guapo", Daniel Castellanos, e1 viejo que estorba, que no sirve; en "La suerte de Teodoro Mendez Acubal", Teodoro, e1 indeciso, don Agustin Velasco, e1 avaro; en "Modesta Gomez", Modesta, la atajadora, 1a ladrona; en "El advenimiento del aguila", Hector, e1 ventajoso, e1 explotador; en "Cuarta Vigilia", 1a nifia Nides, la avaricia personificada, 1a avara; en "La rueda del hambriento", e1 médico, e1 tipico burgués escéptico. d) Los convidados d3 agosto: Emelina, la mujer frustrada, la quedadona; 33 Reinerie, la Primitiva en oposicidn a las civilizadas (1a tia Julia, y las mujeres del pueblo). e) Albgngg_familia: en "Leccidn de cocina", 1a eSposa engafiada, la mujer neurética, insatisfecha; en "Domingo", e1 pequeho burgués; en "Cabecita blanca", 1a madre chantajosa y manipuladora; en "Album de familia", la mujer profesional frustrada, la mujer vacia. f) §1_eterno femenino: la Usurpadora; 1a Mujer de Accidn, 1a Mujer Contemporanea. Reconocida la presencia del mito y de la mentalidad mitica en estas obras, se intentara a continuacidn una clasificaciOn tanto del mito aludido como del modo de estructurarse narrativamente. Dos fuentes nos seran fitiles: el libro de Luis Cencillo: Mito, Semantica y'Realidad50 y el de Rene Jara Cuadra: Mggggmdg estructuracidn mitica gg.1§.realidad gn_lg actual novela Hispanoamericana?1 Refiriéndose a la clasificaciOn del mito en el nucleo narrativo, Cencillo establece una categorizacidn basada en tres criterios diversos: l. Segfin e1 nivel histdrico de las cultures a las que pertenezcan: sacrales y seculares.52 53 a) Signitivos (pretenden 2. Segfin su contenido y su intencidn: orientar a1 hombre mostrandole su propio sentido, e1 del cosmos y el de algunos grandes acontecimientos c63micos y sociales. b) Participativos (mostrar e1 sentido de la convivencia nacional). c) Etiolégicos (explicar e1 proceso causal y la procedencia del mundo, de 31 mismo 0 de los bienes culturales que posee). 3. Segfin e1 grado de elaboracion literaria o expresiva: a) rituales (primitivos o misterios); b) literarios (alegdricos, épicos, legenda- 34 rios).S4 De acuerdo a esta clasificacidn, los mitos que aparecen en la narrativa de Castellanos se pueden ubicar como: l. Sacrales y Seculares. 2. Signitivos. Participativos. Etioldgicos. 3. Rituales y literarios. Nos interesan muy particularmente los mitos Signitivos (presentes en las primeras tres obras de Castellanos: Balgg‘ggnég, Oficio d2 tinieblas y Ciudad Real), y la subdivisidn de este tipo de mitos que presenta Cencillo: a) Tipolégicos: los mitos que mAs directamente muestran e1 sentido del cosmos y de la vida. b) Escatologicos: aquellos mitos que tratan del sentido de la vida y de las realidades casmicas a partir de la exposicidn de su estado final, concebido de un modo catastrdfico, o esencialmente transformativo de la condicién humana. Como hace notar Cencillo, "...como cuando se alude 0 describe e1 fin de una humanidad 0 de una era edsmica como comienzo del estado presente,... 0 e1 final de todo un grupo étnico."55 c) Mitos soterioldgicos y Catérticos: Cencillo los destaca como: Mitos que corresponden a una concepcidn analoga de la vida 0 de la situacidn humana como deficiente, amenazada o impure; 1a diferencia esta en que en unos 1a superacidn de este estado inicial es realizada por un héroe que salva a un grupo 0 a1 genero humano de su condicidn, mientras que en los mitos Catérticos se explica y se fundamenta e1 modo como el hombre mismo pueda y deba purificarse. Ateniendonos ahora a la estructuracidn narrativa del mito, Jara se refiere a tres modos distintos de "plasmaciOn mitica narrativa de la realidad", explicando que: "En todas, 1a intencidn es la misma: 35 esfuerzo del escritor por reproducir una imagen mitica del mundo, consecuencia de la realidad ideolOgica de organizar e1 caos para hallarse a si mismo en el sentido que la circunstancia tiene."57 Estos 'modos' son: A) Mode mitolOgico: el mundo se estructura sobre la base de un sustrato mitico que se proyecta a1 arcano original del individuo americano. Las objetividades representadas ponen en funcionamiento un sistema relacional referido a las teogonias y cosmogonias prehispanicas, coloniales e de la mes antigua tradicien occidental, actuantes per simple analogia e relacien explicita. A menudo, estas novelas parten de una suerte de pensar magico, primigenio, y se elevan desde el pensar visionario del mito para dar a la obra una razén explicativa del mundo. B) Mode mitopéyice: creaciOn inmediata de una realidad mitica que emana de la estructura misma del relato; e1 mito se instituye en la novela, cuya estructuraciOn se funda en el modo de pensar mitico. C) Mode paramitolegico: E1 mundo narrative es amplificado e se lo explicita en un plano de mayor profundidad usando del mito clasico o biblico come correlate estructural implicito. La obra de Rosario Castellanos puede ser ubicada en el Mode Mitoldgico (A), y en el Mitopéyico (B). 36 L08 MITOS MODERNOS Mircea Eliade afirma que ciertos cemportamientos miticos perduran afin en nuestres tiempos y en todas las sociedades.58 Pero a1 referirse a estos cemportamientos, no alude a las supervivencias de una mentalidad arcaica, sino a que ciertos aspectos y funciones del pensa- miento mitico son constitutivos del ser humano de ayer, hey y de siempre. Si el mito antiguo expresaba las emociones primordiales de una comunidad per medio de un relato més o menes fantéstico referido a un pasado lejano, en el mundo moderno este tipo de mito ha desaparecido casi per complete. Los mitos modernos ya no son relatos sobre dioses, espiritus y heroes semidivinos. Sin embargo, se sigue verificande el mismo mecanismo de proyeccien inconsciente de estados afectivos sobre realidades externas. Ahora ya no son los elementos cosmicos los que atraen 1a atencien del hombre. Ya no son e1 sol o la luna, los astros, las aguas y el cielo los objetos que en virtud de una proyeccidn subjetiva se transforman en dioses 0 en heroes fantastices. E1 progreso técnico ha tendide a semeter la naturaleza que yo no angustia ni intriga come antes. El lugar de la naturaleza ha sido ocupado ahora per las fuerzas sociales, por los fenOmenos culturales, per e1 proceso de la historia. En este plane el hombre aun se encuentra inmerso en el misterio y se siente dominado per poderes que lo arrastran de uno a otro lado sin posibilidad de control por su parte. En estas realidades aparecera entonces e1 elemento propicio para que el hombre vuelque su inconsciente intersubjetivo. El proceso de divinizaciOn o demonizacidn ya no se dirigira a las fuerzas naturales a no ser en 37 algunos cases de regresion mitica, sino a lo humano come fuerza social y cultural. Se divinizara e1 Estado, una clase social, e1 progreso técnico y cientifico, determinadas formas sociales y costumbres, la historia, e1 futuro y otras fuerzas. Se demonizara en cambie, las instituciones religiosas, algunas razas, algunas clases altas o bajas, e1 pasado burgués. Cada grupo humano tendera a divinizar o demenizar las realidades socio-culturales segfin su propie engule de enfoque. De hecho encontramos que el mito moderno implica siempre una divinizacien e demonizacien disimulada o disfrazada, caracteristica de una sociedad que reprime su mundo afectivo y tiende a mecanizar en lugar de personificar las fuerzas cesmicas y sociales. Mientras e1 antiguo personificaba, e1 moderno mecaniza. E1 antiguo veia en cada ser una realidad personal. En cambio, el hombre contemporaneo proyecta sobre el mundo externo un conjunto de relaciones abstractas segfin e1 modelo de las ciencias empiricas. Existe también una compleja trama de mitos que se pueden identificar con el nombre de mitos burgueses. Estos tienen un origen cemfin y per ese pueden agruparse bajo el mismo nombre. Son mitos burgueses porque responden a la mentalidad que surgio a fines de la Edad Media y comienzos del Renacimiento y supone, en general, 1a afirmacien de les valores de la individualidad que recién entonces comenzaron a acentuarse. Estos mitos se centran en la idea de un paraiso individual. Cada individuo ha de conquistar su paraiso y ha de conquistarlo per la lucha, una competencia. Esta competencia que fundamentalmente se verifica en 38 e1 plane del comercio, la de libre empresa, del campe literario, del buen negocio, ha de cenducir a1 triunfo del mes apto y este triunfo a la larga beneficiara a todos. Estas creencias se condensan en algunas palabras simbole; en este caso las principales son las palabras libertad, igualdad, democracia, progreso.59 En las filtimas dos obras narratives de Rosario Castellanos, Album d2 familia y El eterno femenino, se plantea e1 fenemeno mitico-burgués. Como ejemple basico de la libre competencia, tenemos e1 cuento "Album de familia" (cuento que da nombre a1 libro). La libre competencia lleva a todas las formas de avaricia, egoismo y explotacidn creande un munde altamente tecnificado y terriblemente inhumane. Otro mito que tanto inquieta a la burguesia es el del éxito. E1 éxito come resultado del esfuerzo, del tesén, de la inteligencia individual, de la suerte, ya que para la clase media e1 sistema social es algo ajeno.60 E1 éxito significa casarse bien y tener hijos saludables, un marido comprensivo y generose. E1 éxito que significa tener un gran carro y una casa propia en las nuevas colonias de la clase media, y tener unos aherros que 1es permitan hacer sus anuales vacaciones. Pero todas estas ideas del éxito se convierten muchas veces 3610 en aspiraciones y suehes inalcanzables. Como e1 burgués esta ocupado con sus estrechisimos problemas caseros, no le interesa lo que pasa fuera de su pequefie grupo. Esta atrapado dentro del sistema social. Es 1a decadencia del mito. Comienza un proceso de infantili- zacion de sus creencias basicas per la aparicien de mitos subsidiaries que lindan con la supersticien y el fetiche. Surgen les mitos del confort, del prestigio y de la propiedad privada, tres formas de 39 degradacidn por cosificacien de los antiguos ideales.62 La fracasada felicidad liberal lleva a otro subterfugio. No habiendo logrado e1 paraiso, hay que engaharse con el prestigio. Les objetos se vuelven entonces simbolos de prestigio (e1 automdvil de mejor categoria, la casa de fin de semana, las relaciones sociales, e1 titulo universitario...). En cada caso 1a realidad objetiva no interesa en 51 misma, sine come vehiculo que concentra en 31 sentimientes de seguridad, superioridad, distincien. No se viaja a Europa para enriquecerse con auténtices valores culturales, sino para poder comentar luego con les amigos y no sentirse inferior frente a fulane de tal que ha viajado varias veces. E1 sentimiento de inferioridad y la inseguridad del hombre vacio de personalidad, sera e1 motor principal de los grandes consumidores de prestigio y sus victimas viviran e1 mite en continua angustia come si estuvieran en presencia de un demonic insaciable que las exigiera constantemente sacrificios de esfuerzo y dinero para subir un escalen mes en la escala social. Un gran ideal, el de la libertad y dignidad humana, termina asi en una identificacidn irracional entre dignidad y captacien de imagenes televisivas, lavado y secado de ropa, enfriamiente de alimentos y eliminacien de basuras. Esta es la nueva dignidad del hombre, y también del hombre mexicane burgués que nos presenta Rosario Castellanos en sus dos filtimas obras narrativas. CITAS 1 Mircea Eliade, Mitos, suefios y misterios (Buenos Aires, 1961). 2 Carl Jung, Arquetipos g_inconsciente colectivo (Buenos Aires, 1961). 3 Jung, p. 96. 4 Mircea Eliade, Mite y realidad (Madrid, 1973) p. 18. 5 _________J "Los mitos en el mundo moderno," Lngorre, Universidad de Puerto Rico, ano II, No. 6 (abril-junie de 1954), pp. 69-70. 6 Claude Levi-Strauss, Antropelogia estructural (Mexico, 1969) p. 103. 7 Levi-Strauss, pp. 117-123. 8 C. Levi-Strauss, Mitolegicas: Lg crude 1.12 cocido (Mexico, 1972) p. 313. 9 Luis Cencillo, Mito, Semantica y Realidad (Madrid, 1970) pp. 5-8. 10 Cencillo, p. 5. 11 Ibid., p. 7. 12 Ibid., p. 7. 40 41 13 Ibid., p. 439. 14 Luis Cencillo, p. 9. 15 Ibid., p. 9. 16 Mircea Eliade, Imagenes y Simbolos (Madrid, 1956) p. 62. 17 C. Levi-Strauss, Mitolegicas, pp. 73-97. 18 Cencillo, p. 227. "En el Popol 223 de los mayas, e1 Arbol Ceiba, de inmensa copa y siempre verde, da frutos sagrades en forma de craneos humanos, y la cabeza del héroe cortada y colocada en la bifurcacion de sus ramas 'fecunda con su saliva (cf. e1 liquido lechoso que emite e1 Arbol yakute) a una doncella, que da luz dos Hermanes mellizos, mientras que ella queda constituida en depositaria de una 'sapiencia' que la hace inmortal." Véase Balfin Canan de Rosario Castellanos, Cap. VII, p. 125. 19 Eliade, Mite 1 Realidad, Cap. II. 20 Eliade, p. 23. 21 Eliade, Mitos, suefios y misterios, pp. 90-97. 22 Maria Luisa Cresta de LeguizamOn, "En recuerdo a Rosario Castellanos," La Palabra y_gl Hombre, no. 19, (1976), p. 5. 23 Rosario Castellanos, "Carta a Elias Nandino," Revista d3 Bellas Artes, 18 (1974), p. 21. 24 Joseph Sommers, Rulfe, Yahez y_FUentes: la novela mexicana (Caracas, 1969) p. 204. 25 Maria del Carmen Millan, "En torno a Oficio d2 tinieblas," Anuario d3 Letras, 3 (1963), pp. 289-99. 42 26 p. 24. Millan, "Ciudad Real" Revista gg_Be11as Artes, 18 (1975), 27 Beth Miller, "Voz e imagen en la obra de Rosario Castellanos," Revista g2 la Universidad gg_México, Vol. XXX, No. 4, (dic. de 1975, enero de 1976), p. 33. 28 Rosario Castellanos, Mujer que sabe latin (México, 1973) p. 7. 29 Samuel Gordon, "Rosario Castellanos: cuando e1 pasado maneja 1a pluma con ira," Cuadernos dg_Jerusalén no. 2-3, (1975), p. 36. 3O Calixta Guiteras Holmes, Los peligros del alma: visiOn del 31 Guiteras Holmes, p. 254. 32 Popol Vuh, las antiguas historias del Quiche, traducidas a1 texto original con introducciOn y notas de Adrién Recinos, (Mexico, 1971). 33 El‘libgg fig 103 Libros g5 Chilam Balam, traducciOn de sus textos paralelos per Alfredo Barrera, (Mexico, 1972). 34 Guiteras Holmes, Los peligros del alma, p. 251. 35 Ernst Cassirer, The Philosophy g£_Symbolic Forms (New Haven, 1955) Vol. II, pp. 79 y sig. 36 Cassirer, An Essay 22_Man: An Introduction 52 2 Philosophy 32 Human Culture (New Haven, 1945) pp. 82-3. 37 Guiteras Holmes, p. 251. 38 Lucien Levy-Bruhl, Primitive Mentality, traducido del original francés, Lg mentalité primitive, per Lilian A. Clare, (Boston, 1966) pp. 26-29. 43 39 123g., p. 35-39. 40 Ibid., p. 32. 41 L. Levy-Bruhl, Primitive Mentality, p. 126. 42 Ibid., p. 57. 43 lg;g., p. 402. 44 Levy-Bruhl, Primitive Mentality (Boston, 1966). Todas las citas de este pérrafe seran de esta edicien. 45 Para una discusien de ambas teorias, véase David Bidney, "The Philosophical Anthropology of Ernst Cassirer and Its Signifi- cance in Relation to the History of Anthropologycal Thought," en The Philosophy of Ernst Cassirer (Illinois, 1949) pp. 465-544. 46 Cassirer, Ag Essay 22_Man, p. 83. 47 René Jara Cuadra, "E1 mito en la nueva novela Hispanoamericana," Revista Signos, Universidad Catolica de Valparaiso, Chile, Vol. II, 1 y 2, (1968) pp. 3-33. 48 Jara Cuadra, p. 9. 49 Ibid., p. 11. 50 Cencillo, Mite, Sementica y_Realidad, pp. 51-57. 51 René Jara Cuadra, Modes de estructuracien mitica de la realidad en la actual novela Hispanoamericana (Chile, 1970)_ pp. 1-25. 52 Luis Cencillo, Mito, Seméntica y Realidad, p. 54. 53 Ibid., p. 54. 44 54 Ibid., p. 56-60. 55 Ibid., p. 52. 56 Luis Cencillo, p. 53. 57 Jara, Modes d3 estructuracien mitica g2 12 realidad en 13 actual novela Hispanoamericana, p. 16. 58 Eliade, Mite y Realidad, p. 200. 59 Gillo Dorfles, Nuevos ritos, nuevos mites (Barcelona, 1969) pp. 42-53. 60 Gabriel Careaga, Mites y_fantasias 9£.l£ clase media 22 Mexico (México, 1975) pp. 102-120. 61 Véase 1a interesante obra de Vance Packard, Los buscadores ‘gg prestigio (Buenos Aires, 1964). CAPITULO II LA FUNCION DEL MITO EN BALUN CANAN B1193 gape—n [1957] narra la historia del derrumbe de la familia Argfiello. Una niha, hija de esta familia, desprovista de nombre y fisonomia, cuenta la primera y la tercera parte de la novela. Narra la vida y las costumbres de su pueblo natal, Comitén, su extraho contacto con las leyendas y supersticienes mayas que la son transmitidas por su nana indigena, y la misteriosa muerte de su hermano Mario. La segunda parte esta narrada en tercera persona y trata de las experiencias trégicas de la familia en su finca Chactajal: e1 asesinato de Ernesto, e1 supuesto maestro que Cesar Argfiello, e1 padre, lleva a Chactajal, obligado per los indigenas; e1 levantamiento de estos; y la extrafia desaparicien de Matilde, hermana de Cesar. Los acontecimientos de la trama en 31 no encierran gran misterio. Lo profundamente interesante y valioso es la descripcidn de un mundo tan extrahe y remote que apenas se puede creer que pertenezca a nuestra época. Invaden 1a atmdsfera viejas creencias y supersticienes, y el culto indio a la magia desempeha un papel en la tragedia central. Todavia mAs fascinaderes que los elementos histOricos son 1a brujeria intemporal de la narraciOn, e1 concepte magico de la realidad, y la ‘mentalidad mitica de los personajes. Nahum Megged en su ensayo "Entre soledad y bfisqueda de dialogo" dice: Rosario Castellanos descubre (en Balfin Canan] 1a trégica desconexien entre los dos pueblos que componen su pais. E1 indio 45 46 perdie su calendario y quede en la nebulosa del no tiempo. E1 blance que creia ser siempre el que domina, recibe lo que invierte: aspereza, odio y mesquindad. El patrdn pierde su entereza y valor en el memento que las estructuras se rompen y tiene que enfrentarse a otra posiciOn que la de las épocas en las cuales les indios hacian su turno para recibir un latigazo. E1 gran César, e1 padre de la familia, abandona Chactajal, deambula por Tuxtla tratando de convencer a las autoridades que no escuchan sobre la necesidad de que el blance mantenga su tierra. SOlo una mujer ladina consigue entablar relaciones con el indio. La prima Francisca, quien se entrega a la brujeria como amante de la bestia mitologica, "e1 Dzulum," ante los ojos atdnitos de los indios. E1 tema central de la obra, es, basicamente, 1a lucha magica que se lleva a cabo entre los brujes indios y la familia Arguello para salvar la vida del hermano de la narradora y del finico hijo varen de la familia, Mario. Como hace notar Megged: Los brujes lanzaron una maldicidn sobre la familia, ellos empezaren "a comer" a Mario come venganza de la violencia blanca. La nana que esta a1 tanto de esta maldiciOn es echada de la casa. La tia Roselia conoce 1a brujeria y teme la fuerza de los brujes. La tia Amalia lleva a los nines a1 sacerdote, a la primera comuniOn come antidote a la brujeria. Les ensehan religiOn para veneer a1 mal. Pero en ese mismo memento, a1 captar e1 credo que habla del diable, de Catashana, de Satanas y del miedo a Dios, quien parece ser $1 mas grande de los diablos, comienza a operarse la brujeria. La explicacidn.mégica de la muerte de Mario es un ejemplo del procedimiento mitico-conceptual del que la autora se valid para narrar un hecho natural come es la muerte. Semejante es el método que se emplea en el capitulo XVIII de la primera parte, donde se transcribe un documento que Cesar Arguello oblige a escribir a uno de sus peones y en el que éste narra, en forma muy similar a come lo hace e1 anenimo autor del Popol Vuh, come llego a manos de los Argfiello 1a finca, y cuales fueron los antepasados del actual propietarie y lo que estos hicieron en vida en Chactajal: 47 Estuve con los fundaderes de las ciudades ceremoniales y sagradas. Estoy con los que partieron sin volver e1 rostro. Yo guié e1 paso de sus peregrinaciones. Yo abri su vereda en la selva. Ye los conduje a esta tierra de expiaciOn. Aqui, en el lugar llamado Chactajal, levantamos nuestras chozas; aqui tejimes 1a tela de nuestros vestidos; aqui moldeamos e1 barre para servirnos de él. Apartados de otros no alzames en nuestro pufio e1 botin de la guerra. Ni contamos a escondidas la ganancia del comercio. Alrededor del arbol y después de concluir las faenas, nombrébamos a nuestros dioses pacificos. Ay, nos regecijaba creer que nuestra existencia era agradable a sus ojos. Pere ellos, en su deliberacion, nos tenian reservado e1 espanto. Hubo presagios. Sequia y mortandad y otros infortunios, pero nuestros augures no alcanzaban a decir la cifra del presentimiento tan funesto. Y 3610 nos instaban a que de noche, en secrete cada une se inclinara a examinar su corazen. Y torciera 1a garra de la cedicia; y cerrara la puerta a1 pensamiento de adulterio; y atara e1 pie rapido de la venganza. Pero Lquién conjura a la nube en cuyo vientre se retuerce e1 relampago? Los que tenian que venir, vinieron. (pp. 57-58.) Este documento describe e1 estado de gracia de Chactajal antes de la llegada de los Arguello. Es este pueblo en el que después de transcurrir tranquilamente las faenas cotidianas, los indigenas se reunian alrededor del arbol sagrado a nombrar a sus dioses pacificos. Se cumple en 61 e1 mito del "buen salvaje", de la Edad de Oro4 perdida per culpa de "los que tuvieron que llegar", 0 sea, 1a civilizacidn. En esta narracien se ve el proceso mitolOgico del que habla L. Paramio en.Mi£g‘g Ideologia.5 Es el‘mito creado per la necesidad de los individuos particulares de proporcionar una explicacidn inconsciente a su presente crisis. Como destaca Mircea Eliade: "Encontrar en todas las religiones 1a figura del enemigo que busca perturbar e1 orden establecido, es tarea que no exige demasiada explicacion. E1 enemigo es, debe ser, 1a explicaciOn de la existencia del mal, del fracaso de los dioses protectores y del orden que estos pretendieron implantar".6 Es e1 mito del abandono del paraiso. 48 Pero este mito es mAS que una simple explicaciOn de la caida de la raza indigena de Chactajal y de la explotacien a la que los ladinos (aqui simbolizados per la familia Arguello) sometieron a los indios. De este mito se puede deducir que la resistencia que ofrecio y ofrece e1 indigena a1 materialismo ladino previene de su siempre presente bfisqueda del alma, de su enigmatica urgencia vital para comunicarse con 10 indiscernible, de su firme voluntad de conquista de la unidad a través de la diversidad. Es e1 mito de la voluntad de afirmacidn: Y es aqui, hermanes mios menores, donde nos volvemes a congregar. En estas palabras velvemos a estar juntos como en el principio, como el tronco de la ceiba sus muchas ramas. (p. 60.) La conjuncidn en Balfin Canan de la circunstancia histOrica, e1 acontecer autobiografico y los sistemas de simbolos que se interpenetran en ellos, no es el fruto de un artificio literario que aproxima lo "ficticio" a 10 "real". Surge, por el contrario, de la profunda intuicidn de un creador que descubre la presencia de un orden significante en la realidad y que percibe en su propia vida la potencia de situaciones arquetipicas que la incitan a reconstruir 1a amplia parabola de su pueblo y asi, consecuentemente, de la historia humana. La recuperaciOn del mundo mitico se opera pues, a partir de una re-actualizacidn de su capacidad de revelar 1a realidad en todos sus sentidos. Nahum Megged hace notar que: "En esta novela multiangular se repite e1 eje soledad, no diéloge, y la bfisqueda trégica de la unidn con la vida."7 Es, ademés, una novela en donde segfin narra la misma autora, "...1as metaforas resplandecian per todas partes, pero yo me 49 salvaguardaba de una condensacien arguyendo que me habia propuesto rescatar una infancia perdida y un mundo presidido per la magia y no per la legica. Pero e1 equilibrio se rompia cada vez que este munde me planteaba 1a exigencia de ser comprendido y explicado y no simplemente descrito."8 La ubicacidn de Castellanos en una linea simbOlica que la conecta con el munde del espiritualismo, no le impide asumir vigorosamente la historia de su pueblo, cuya presencia se advierte viva y continuamente en esta obra y en las subsiguientes que discutiremos. Es que, en el fondo, lo histOrico social no es ajeno a1 mundo mitico, ni, menos afin, replega a este 1a categoria de la ficcien. Muy por el contrario, ambos sen niveles de la total realidad, Siendo lo histdrico y lo concrete su nivel fenoménice y aparente, y lo esotérico y espiritual su nivel profundo que da a aquel su sentido. En Balfin Canén se expresa con simpatia lo indigena y con profunda comprensien el mundo mAgico en que viven los chamulas, descendientes de les mayas. Revive 1a autora agilmente e1 ambiente provinciano de Comitén y las complejas relaciones de interpenetraciOn entre los indies y los blancos en un intente muy logrado de captar con profundidad este mundo. E1 indio de Balfin Canan, producto de su cultura, de su historia, de su creencia mitica, esta delineade, en términos realistas, en perenne cenflicto con el blance, o ladine. E1 mundo del blance esta basado en la opresidn del indio, y su economia depende de esta situacidn esclavizante y desvastadora. E1 mundo del indigena esta enraizado en 50 sus creencias, en sus mitos, en su miseria y en su cadena perpetua de servidumbre y esclavitud. La atmOSfera mAgica donde transcurre 1a acciOn se produce por medio de la morosa detencien en las supersticienes, las leyendas, los cuentos, 1a mitologia, las denominaciones mayas de las fiestas y los alimentos, y todo un caudal de imaginacien primitiva que la nana va infiltrando en la niha narradora de la novela: Niha---- ZSabes? Hey he conocido a1 viento. La nana no interrumpe su labor. Continua desgranando e1 maiz, pensativa y sin sonrisa. Pero yo sé que esta contenta. Nana---- Eso es buene, nihita, porque e1 viento es uno de los nueve guardianes de tu pueblo. (p. 23.) En Balfin Canan todo es mitico. A. Los preambulos tomados de los libros sagrados mayas. .El libro del Consejo es la fuente del primer preambulo: Musitaremes e1 origen. Musitaremes solamente la historia, e1 relato. Nosotros no hacemos mas que regresar; hemos cumplido muestra tarea, nuestros dias estan acabados. Pensad en nosotros, no nos borreis de vuestra memoria. (p. 8.) E1 Libro del Consejo o Popol Vuh, es la biblia de los maya-quiché de Guatemala. Relata en la primera parte 1a creacidn del munde; en la segunda, las mitologias del pueblo maya-quiché; en la tercera, 1a creaciOn del hombre (quien fue hecho de maiz); y en la filtima, la histdria de las diversas tribus de la regidn. La revisien detenida del Pepol Vuh nos 10 revela como la fuente o punto de partida de la novelistica de Rosario Castellanos. En una carta que la autora enviara a Elias Nandino comenténdole su estancia en Chiapas 1e dice: "Los que integramos el grupo, somos siete. Tres 51 muchachos tzeltales, tres tzotziles y yo. Los dias que no salimos estudiamos juntes historia y geografia de Mexico y leemos e1 £2221 22h."9 No es de extrafiar pues que el mito de los origenes, que en Balfin Canan aparece en la pagina veintiocho, esté basado en este antiquisimo acopie de mites maya-quiché. E1 segundo preambulo precede del libro Chilém.Ba1am.dg_Chumayel y dice: Toda luna, todo afio, tedo dia, todo viento camina y pasa también. También toda sangre llega a1 lugar de su quietud, come llega a su poder y a su trono. (p. 75.) El libro de Chilam Balam gg.Chumayel abarca todas las fases culturales por las que fue pasando el pueblo maya de Yucatan. E1 material que contiene es heterogéneo. De modo general puede clasificarse asi: 1) Textos de caracter religioso; 2) Textos de caracter histerico; 3) Textos médicos; 4) Textos crenelegicos y astrolegicos; 5) Astronomia; 6) Rituales; 7) Textos literarios; 8) ‘Miscelanea de textos no clasificados. El segundo capitulo de Balfin Canan, a1 que precede este preambule temado del Chilam Balam, trata del caracter religioso y ritual de los habitantes de Chactajal, asi como la concepcien del tiempo mitico de éstos. El tercer preémbule previene de Los Anales gg_lg§_gahil. Y muy pronto comenzaron para ellos los presagios. Un animal llamado Guarda Barraca se quejd en la puerta del lugar de la Abundancia, cuando salimos del Lugar de la Abundancia. iMorireis! 303 perdereis! Yo soy vuestro augur. (p. 217.) Los Anales dg_1os Xahil es la tercera de las cuatro recopila- ciones de narraciones y registro de historias y augurios de los mayas 52 de Xahil. Este preémbulo introduce la nota de misterio en que se desenvuelve e1 episodio de la muerte de Mario. B. Leyendas -Y entonces, celéricos nos desposeyeron, nos arrebataron lo que habiamos atesorado: 1a palabra, que es el arca de la memoria. Desde aquellos dias arden y se consumen con el lane en la heguera. Sube e1 hume en el viento y se deshace. Queda 1a ceniza sin rostro. Para que puedas venir tfi y el que es menor que tfi y les baste un soplo, solamente un soplo..." (p- 9-) -Dicen que hay en el monte un animal llamado dzulfim. Todas las noches sale a recorrer sus dominios. Llega donde esta 1a leona con sus cachorros y ella 1e entrega les despejes del becerro que acaba de destrozar.." (pp. 19-21.) -Y dicen las criadas que anoche se eye e1 tintineo de unas espuelas de plata contra las piedras de la calle. Era e1 Sombreren, e1 espanto que anda por los campos y los pueblos dejando sobre la cabeza de les animales su sefia de mal aguero." (p. 60.) -Pues ahi tienen que estos eran dos nines que les decian per nombre Conrado y Luis...Todas las noches se juntaban con otros indizueles y se iban a jugar a1 traspatio. iAy, nanita, que miedo! y jugando se les aparece el diablo de las siete cuerdas, ;Catashana! (pp. 257-260.) C. Mitos de origenes. Estos les veremos més detalladamente en las siguientes pdginas. D. Los parlamentos de la nana: Vengo a entregarte a mi criatura, Senor. Tfi eres testigo de que no puedo velar sobre ella ahora que va a dividirnes la distancia. Abre tus caminos para que no tropiece, para que no caiga. Que 1a piedra no se vuelva en su contra y la golpee. Que no salte 1a alimaha para morderla... (p. 62.) E. Hechicerias: Juana no tuvo hijos. Porque un brujo 1e habia secado e1 vientre. Era en balde que mascara las hiervas que 1e aconsejaban las mujeres y que bebiera su infusion. En balde que fuera, ciertas noches del mes, a abrazarse a la ceiba de la majada... (p. 107.) 53 ...Lo dijeron otros que tienen sabiduria y poder. Los ancianos de la tribu de Chactajal se reunieron en deliberaciOn. Pues cada une habia escuchado en el secrete de su suefio una vez que decia: "Que no prosperen, que no se perpetuen. Que e1 puente que tendieron para pasar a les dias futures, se rompa. Eso les aconsejaba una vez come de animal. Y asi cendenaron a Mario. (p. 230.) En medio de este munde magico, se desata una tempestad latente de violencia que derrumbara el mundo y la sociedad de la cual forma parte 1a nina que narra la historia. La violencia se produce come una consecuencia inevitable de una marcada tensien entre indio y ladino, que en lo que va del siglo no ha hecho sino agudizarse. También, simultaneamente, la violencia introduce 1a conciencia y la agudizacien de un sentimiento de frustracien muy caracteristico de las clases indigenas de Chiapas. Existe un estado de agresividad latente que muchas veces se ha manifestado a través de la historia de Chiapas con las Guerras de Casta. La realidad concreta y objetiva de esta novela excluye 1a posibilidad de comunicacien y sintesis entre ambos mundos. Nos encontramos con el divorcio mas irreconciliable, con la incomunicacidn desoladora hecha de una larga serie de suspicacias y rencores ancestrales. En este marco se ha formado la escritera. En su casa, en la infancia, debie escuchar muchas veces les horrores de les levantamientos indies, ademés de asistir a otros actos de violencia y a tremendos hechos de represien. Y sin compartir este sentimiento de desprecio que les padres de la nifia-narradora sienten per les indios, la autora no pasa per alto uno selo de estos hechos y sentimientos. E1 caracter autobiografico de la novela lo afirma 1a autora misma en una entrevista que sostuviera con Maria Luisa Cresta 54 de Leguizamen: "Yo creo que Balfin Canén es esencialmente un libre autobiogréfico. Es 1a narracidn de mi infancia; es ademas, un testimonio de los hechos que presencié en un.momento en que se pretendie hacer un cambio econemico y pelitico en los lugares donde ye vivia entonces..."10 La actitud comprometida de Rosario Castellanos hacia el indio esta en este libre, subyacente, omnipresente, nutriende su pesicien ética ante el mundo, encaréndose en actualizadas estructuras simbelicas. 'Nada ha sido inventade gratuitamente; les hechos se fundan de raices en la historia para mostrar, denunciar, y aunque implicitamente, condenar. La realidad de les acontecimientos, 1a injusticia que el ladino comete con el indie, e1 absolutismo eclesiastico, e1 aplastamiento y destruccion de las costumbres indigenas, todo es bien conocido: Y Lquiénes son los indios para negarse? Estas muy equivocado si crees que les he consentido sus bravatas por miedo. Esta bien. Ellos tienen razen a1 exigir ciertas cosas. Pero son tan imprudentes come les nifios. Hay que cuidarlos para que no pidan lo que no les conviene. gEjidos! Los indies no trabajan sin la punta del chicote no les escuece en el lemo. iEscuela! Para aprender a leer. 3A leer que? Para aprender espafiol. Ningun ladine que se respete condescendera a hablar en espahol con un indio. (p. 188.) La lectura de les mAs significatives monumentes de la lite- ratura maya-quiché (El Popol Vuh, Chilam Balam.gg,Chumayel, y los Anales g3 Xahil) per Rosario Castellanos, su crecimiento en contacto con su cargadora india, quien, segfin ella misma lo dijera, 1e enseho un caudal mitico folklorico de compleja raiz indigena y su intuicidn poética siempre activa, han sido, indudablemente, 1a fuente de la cual ella se nutrio para hacer posible 1a 55 reactualizacidn de les simbolos indigenas. El resultado fue también, 1a revivificaciOn de un mundo esotérico (es decir, espiritual, religiose en el mAS profundo sentido), que tan implicitamente presenta en su obra. Para entender les acontecimientos culturales y los hechos histerices que la autora presenta, no esta de mes recordar algunos hechos de la historia de Chiapas. Los pueblos que Castellanos presenta estan en les altos de Chiapas y habitados por los tzotziles y los tzeltales. Le que en la actualidad constituye e1 Estade de Chiapas pertenecie a la Capitania General de Guatemala, una de las dos subdivisiones administrativas del Virreinato de la Nueva Espaha. Ciudad Real hey San Cristebal, fue fundada en 1528, cuatro ahes después de la Conquista, y es hey en dia e1 centro ecenemico de la regidn, donde viven unos 30 mil indios distribuidos en 29 municipalidades. La mayeria de las comunidades estan situadas en las partes elevadas de la altiplanicie a una altitud de 2,300 m. y tienen centres ceremoniales en los pequefios 11 sus aldeas se hallan dispersas en las regiones montafiosas. valles; Luis Suérez hace notar que: "En les montes, e1 indio y la tierra dura. En les valles, la tierra fértil y los comercies, e1 ladino."12 Las comunidades indigenas (chamulas) sen pueblos que dependen del cultivo del maiz para su subsistencia. Dicho cereal es la base de una extensa variedad de alimentos, desde les cetidianes y sencillos come las tortillas y el pezol (masa agria de maiz disuelta en agua), hasta les rituales y especiales come les diferentes tipos 56 de ateles y tamales. La abundancia o escasez del maiz da la pauta de bienestar o hambre. La agricultura es la actividad fundamental de los indios en los altos de Chiapas. La vision del mundo que poseen tiene come base las caracteristicas de tal actividad y el use de una lengua que les provee de las categorias fundamentales, la base simbelica de sus concepciones. La técnica agricola es muy simple, en la mentaha se requiere 5610 de hacha, machete y azaden para preparar los campos, lo cual significa un tremendo esfuerzo a 10 large de todo el ciclo agricola. Cuando las cahas estan grandes y las mazorcas maduras, se precede a doblarlas para apresurar su secamiento y protegerlas de las aves depredatorias. La cosecha ofrece mayor dificultad en el acarreo del maiz desde los campos de cultivo hasta la casa, labor fatigosa per la distancia tan grande que hay que recorrer. E1 transporte se hace con mayor frecuencia sobre los propios hombres de les indios, pues las bestias de carga son caras y escasas.13 En todo memento las milpas estan expuestas a las fuerzas na- turales: un fuerte aguacero, una lluvia fuera de tiempo, una granizada, una helada o vientes intensos pueden acabar con la cosecha en cualquier momente. La fauna predominante es aquella que vive a expensas de los cultivos: ratas, ardillas, comadrejas, cuervos y una gran variedad de otros pejaros. A esto hay que agregar la importancia de la fertilidad de la tierra, excelente en pocos sitios, hacia su agotamiento en su mayoria per lo intense de les cultivos, lo rudimentario de la tecnologia y la ineptitud de los 57 mismos en gran parte. La escasez del agua hace imposible e1 riego.14 En la temporada de descanse, cuando les campos no requieren ninguna atenciOn, numerosa cantidad de indios se dirige a trabajar a las fincas cafetaleras, otros van a les pueblos cercanos y otros se quedan en sus pueblos participande de la intensa vida social y trabajando en la censtruccidn, o bien en la reparacien de sus casas y atendiende algunos cultivos, si no es que ocupan cargo alguno en la organizacien social de la comunidad que les retenga en el centro ceremonial. El ciclo agricola es el marco de referencia para la concepcien general del tiempo, las diferentes etapas marcan mementos importantes dentro de les cuales se va a desarrollar una actividad definida en el campe. Este se comprueba per la existencia de un calendario que tiene una base claramente agricola. E1 afio se divide en 18 meses, cada uno de los cuales tiene veinte dias. A ellos agregamos un periodo complementario de cinco dias, de importancia fundamental en el ritual agricola. En la actualidad no se conocen nombre e indicaciones numerales para identificar les afios; igualmente les dias carecen de nombre alguno. Unicamente los meses tienen su nombre, pero 1a mayoria son incomprensibles. De todas formas, el calendario continua teniendo aplicacien para la actividad agricola y para los rituales ligados directamente a ella. Su vigencia se advierte en la mayor parte de les pueblos de les altos, afin cuando es posible advertir pequehas diferencias en cuanto a los nombres de los meses y a su ajuste a1 calendario cristiano. Su conocimiento sigue 58 transmitiéndose per la utilidad que representa a1 indicar etapas del ciclo agricola.15 Ricardo Pozas, en su amplio y minucioso estudio, Chamula, sehala las normas de justicia, de igualdad y fraternidad que prevalecen en los pueblos indigenas tzetzales y tzotziles. Pueste que la igualdad constituye un firme principio normative, 1a organizacien social impide 1a acumulacidn de las riquezas, y para ese, establece leyes acerca de la herencia que el autor califica de "la norma social més perfecta".16 Lejos de ser natural, debido a una pasividad organica, e1 mantenimiento de estas normas, requiere constantes esfuerzos de adaptacien hacia 1a sociedad individualista de sus amos. Pozas hace también un excelente andlisis de las respuestas que una comunidad se ingenia en encontrar para preteger unos valores en los que selo ellos creen. Dentro de este centexto cultural surge, a partir de 1957, la obra narrativa "El Ciclo de Chiapas" de Rosario Castellanos. Balfin Canén no es una novela indigenista. La autora hace notar que: Los criticos en general han coincidido en incluirme dentro de la corriente indigenista porque les personajes que protagonizan 1a mayor parte de mis libros de relatos, son indigenas. Sin embargo yo no creo que esta inclusiOn sea valida porque lo que se entiende per literatura indigenista corresponde a una serie de esquemas, a una concepcidn del mundo manique a en la cual se dividen los buenos y los males por el color de la piel; y naturalmente les buenos son los indios porque son las victimas, y 103 males son los blancos porque son los que ejercen poder, tienen la autoridad y el dinero; y yo no creo que estos esquemas sean v81idos. Precisamente lo que he tratado de hacer en todos mis libros es que este esquema se muestre come false y aparezca 1a ambiguedad esencial de les seres 59 humanes; pero ademAs, la serie de contradicciones que existen entre las relaciones sociales. Es una novela lirica que mmestra con profundidad 1a cosmovisiOn mitica del chamula, asi como la del ladino. Es 1a expresion de lo indigena (su mundo, su cultura y su compertamiento social), su entretejimiento con las ideas de la "gente de razen", las supersticienes a menudo cempartidas por blancos e indigenas y la incrustracion de las bellas leyendas mayas que tenemos a través del libro perpetuadas en la mente de la autora a través de su nana indigena. Estas leyendas se las transmite la nana oralmente, proceso que ha sido en todo tiempo la via favorita de comunicacidn de las verdades miticas. La tradicien cultural de les indigenas que trata esta novela depende en gran medida de la transmisiOn oral para su conservacien. Las narraciones existentes en esta cultura son abundantes y cubren una amplia variedad de temas que Rosario Castellanos conocia bien. Estas narraciones tienen la impertante funcidn de transmitir y difundir los valores aceptados por la cultura india, las actitudes sancionadas socialmente. Es e1 medio por el que se ensehan las premisas funda- mentales que sostienen e1 complejo sistema de creencias, 1a cosmovisiOn que explica 1a posicien y el origen del hombre en el universo. Como ejemplo, el mito de los origenes, la historia de la creaciOn del hombre narrada por el maestro (nana) a1 iniciado (niha) merece ser transcrita aqui, no selo porque las ideas contenidas en él se censervan con gran vitalidad entre les indios de los Altos de 60 Chiapas, sino per la cemplejidad de imagenes y la belleza de la peesia misma del texto: ---Al principio---dice---antes que vinieran Santo Domingo de Guzman y San Caralampie y la Virgen del Perpetue Socorro, eran cuatro finicamente les sefiores del cielo. Cada uno estaba sentado en su silla descansando, porque ya habian hecho la tierra, tal come ahora 1a contemplamplamos, colmandole el regaze de dones. Ya habian hecho el mar frente a1 que tiembla el que lo mira. Ya habian hecho e1 viento para que fuera cemo e1 guardian de cada cosa, pero adn les faltaba hacer a1 hombre. Entonces uno de les cuatro sefiores, el que viste de amarillo dijo: ---Vamos a hacer a1 hombre para que nos conozca su corazen y arda de gratitud como un grano de incienso. Los otros tres aprobaren con un signo de su cabeza y fueron a buscar les meldes de trabajo. ---;De que haremos a1 hombre? preguntaren. Y el que vestia de amarillo cogie una pella de barre y con sus dedos fue sacando 1a cara y los brazos y las piernas. Los otros tres lo miraban presenténdole su asentimiento. Pero cuando aquel hombrecito de barre estuvo terminade y paso por las pruebas del agua, se desbarato. (p. 28.) En la narracien que explica 1a creacidn del hombre y del mundo segfin el libro sagrado maya, 2222;.2229 fuente de esta leyenda, ocurren igualmente les hechos. Primero se crea a1 mundo dividide en cuatro partes. En seguida sen creados los animales del bosque, a quienes se les indica sus atributos particulares. Pero los creadores necesitan que los invoquen, que se les rinda atributo y que se les adore. Los animales creados no podian hacerlo y no hacian mas que chillar y graznar horriblemente. Dice el'mito: "Ne habra gloria ni grandezas en nuestra creacien hasta que exista 1a criatura humana. Asi dijeron."18 E1 hombre se hizo de barre, pero a1 ser pasado per la prueba del agua se desmorene. Esta creaciOn fue destruida y se inicio otra nueva (el hombre creado de madera) y otra nueva, creande otra destruccidn y otra creaciOn, hasta crear a1 hombre de carne después de 61 haber fracasade con el hombre de oro. --Y dia con dia 1a dureza del corazdn del hombre de oro fue requebrajandose hasta que la palabra de gratitud que les cuatro sehores habian puesto en 61 subio hasta suboca. Los sefiores despertaron a1 escuchar su nombre entre las alabanzas. Y miraren lo que haLia aucedido en la tierra durante su suehe. Y lo aprobaren. Y desde entonces llaman rice a1 hombre de oro y pobres a los hombres de carne. Y diSpusieron que el rice cuidara y amparara a1 pobre per cuanto que de él habia recibido beneficios. Y ordenaron que el pobre responderia por el rico ante 1a cara de la verdad. Por ese dice nuestra ley que ningun rice puede entrar a1 cielo si un pobre no lo lleva de la mane. (p. 30.) La’funciOn mitica de esta leyenda de los origenes es el de identificar e1 sistema de creencias del pueblo indigena de losXAltos de Chiapas en donde crecie la autora, y mostrarnos la esencia fundamental de la cosmovisien que explica e1 origen del hombre en el universo. Justifica también 1a existencia del pobre indio, sin cuya ayuda no podria e1 blance entrar a1 cielo. Un persenaje arquetipico. auténticamente primitive y tragico es Felipe Carranza Pech. Felipe asume e1 papel de liberador. Es e1 lider indio que descubre el mundo y las leyes del blance, aunque no las entiende. Le que si entiende es que "u raza, a1 ser explotada por el ladino, esta siendo desposeida también de su mas natural necesidad de dignidad y sobrevivencia. De ahi su demanda de justicia, de ahi su impaciencia y su necesidad de romper con el silencio y la pasividad de les suyos: Ne habia que esperar 1a resurrecciOn de sus dioses, que les abandonaron en la hora del infortunio, que permitieren que sus ofrendas fueran arrojadas come paste de les animales. iCuantos habian esperado y cerraron les ojos sin haberlos viste venir! No. E1 habia conocido a un hombre, a Cardenas; lo habia oido hablar. (Habia estrechado su mane, pero éste era su secrete, su fuerza). (p. 105.) 62 Come primera medida de salvacien para los suyos, exige un maestro y una escuela. Saber escribir es una de las maneras de aprender a perpetuar la memoria de su pueblo. Es por eso que él asume e1 papel del hermano mayor y deja constancia de su esfuerzo: Para la censtruccion elegimos un lugar, e1 alto de una colina. Bendito porque asiste a1 nacimiento del sol. Bendito porque lo rigen constelaciones faverables. Bendito porque en su entrafia remevida hallamos 1a raiz de una ceiba. Cavames, hermanes, a nuestra madre, la tierra. Y para aplacar su boca que gemia, derramamos 1a sangre de un animal sacrificado; e1 gallo de fuertes espolones que goteaba per la herida del cuello. Habiamos dicho era 1a obra de todos. He aqui nuestra obra, levantada eon eld on de cada uno. Aqui les ancianos se descargaron de su ciencia, invisible como el espacio censagrado por la beveda, verdadero como la b6veda misma. Esta es nuestra casa. Aqui la memoria que perdimos vendra a ser come 1a doncella rescatada a la turbulencia de los rios. (pp. 125-126.) La escuela se convierte asi en el lugar sagrado, mitico, en donde se rescatara 1a memoria. La construecien del recinto ha de llevar a1 indio por el camino de la razen a la libertad, a la memoria de su pasado. Veneer e1 olvido es veneer a la muerte. Eseribir para los que vendran es perpetuar 1a memoria de un pueblo y una manera de veneer a1 olvido. Aquellos que logran aeordarse de sus existencias anteriores se preocupan en primer lugar de descubrir su propia historia, dispersa a lo largo de sus innumerables encarnaciones. Se esfuerzan per unificar estos fragmentos aislados, per integrarlos en una sola trama a fin de descubrir el sentido de su destino.19 De una manera analoga buscan estos indies veneer e1 olvido, veneer a la muerte. La autora nos muestra aqui una nueva dimensien del mito en el 63 sentido de que éste no es tanto un concepte magico, sine més bien un anhelo a la libertad e a la realizacien de les hombres en la plenitud de la vida. Las tradiciones se deben conservar, por eso, les esfuerzos de les chamulas tienden a proteger e1 orden dado 0 el destino del munde tal come ha sido transmitido de generacion en generacien. Es una forma de vivir y sobrevivir. En esta cultura, les mayores son los indicados especialmente para el prepOSito de conservar las costumbres, per ser quienes ya han side dotados de aptitudes y conocimientos especiales.20 Es per este que Felipe es escogido come e1 hermano mayor. Habia vuelte de Tapaehula a Chactajal porque sabia que era neeesario que entre su gente se constituyera uno de ellos en el elegido: Los antiguos tuvieron uno [hermano mayor! que los guiaba en sus peregrinaciones, que les aconsejaba entre sus suefios. Este deje constancia de su pase, una constancia que también les arrebataron. Y desde que los abandono, ahos, afios de tropezar contra 1a piedra. Nadie sabia c6mo aplacar las potencias enemigas. Visitaban las cuevas oscuras, cargados de presentes, en las épocas calamitosas. Masticaban hejas amargas antes de decir sus oraciones y, ya desesperados, una vez escogieron a1 mejor de entre ellos para crueifiearlo. Porque les blancos tienen asi a su Dies, clavado de pies y manos para impedir que su celera se deseneadene. Pero les indios habian viste pudrirse e1 cuerpo martirizado que quisieren erguir contra la desgracia. Entonces se quedaron quietos y todavia mAS: ‘mudos. (p. 106.) Felipe transmite a les suyos historias y leyendas de sus antepasados con el fin de encontrar 1a razen de sus actos. Aqui, hace referencia a1 sacrifieio humano que llevaron a cabo les indios para encontrar a su redentor. Este acontecimiento sera el tema de Oficio gs tinieblas. Este sacrifieio les ofrecia un fin a su éxode (ahos de trepezar contra 1a piedra) y una redencien ahorada per todos ellos 64 a través de les ahos a su desesperaeiOn y castigo. Pero toda intencidn de la conciencia colectiva mitiea, representada per Felipe, e1 hermano mayor, de perpetuarse en la memoria del pueblo para alimentar su fe en la realidad mitica de que asi fueron las cosas, asi son y seguiran siendo, es nulificada por la tremenda impotencia de les dioses muertos y de la mudez estatiea que les impide seguir perpetuandose. He ahi la dimension tragiea de Felipe. Ser un buen tzotzil, nos dice Huiteras Holmes, significa estar a1 tanto de las narraciones de les tiempos pasados, de come era la vida entonces para que asi continue siendo: Se cuenta la historia del hombre que, estando vive todavia, visito a1 Katibak, morada de las almas, y vie cemo se castiga a les que roban y fornican; hacen los relatos del comienzo del mundo, de los dioses, de la lluvia y el trueno, de la crecida de los rios, e1 diluvio, del fin del mundo, de las muchas veces que les difuntos han venido a visitar a los vivos para regocijarse e1 Dia de Muertos, de la plaga de langestas y el hambre que sobrevino, y repiten las afiejas narraciones de los antepasados acercazde cdmo era el mundo cuando aquéllos estaban en su juventud. En el primer capitulo indicamos que la mente primitiva acepta 1a existencia de un todo unido por el principio de solidaridad vital al cual pertenece todo ser viviente. Este principio de la mente mitica y la ferviente creencia en leyes ocultas, trans-empirieas, constituyen la base de la cosmovisién chamula. Viven dentro de un tiempo mitico. La vida es considerada como un flujo continue compuesto por segmentes que también estén unidos por un flujo y que no tienen una direeciOn espacial y temporal determinada. Considerando que en la visien mitica de la realidad nada es estatico, invariable ni univoco, los pasajes de un segmento a otro y de un mundo existencial 65 a1 otro sen posibles. Estos cambios tienen lugar en lo que Eliade llama "tiempo sagrado". Este difiere del tiempo profano en su reversibilidad: "El tiempo sagrado es recobrado y repetido indefinidamente. Desde un punto de vista, podria decirse que no 'pasa', que no constituye una duraciOn irreversible. Es un tiempo ontolégieo, Parmenidesano; siempre permanece igual a si mismo, no cambia ni se agota."22 Ne habia testigo para estas ceremonias, hechas a espaldas de la gente de la casa grande. Los patrones se hacian les desentendidos para no autorizar con su presencia un culto que el sefior cura habia condenade come idolatrico. Durante muchos afios estos desahoges de les indios estuvieron prohibidos. Pero ahora que las relaciones entre Cesar y los partidarios de Felipe eran tan hostiles, Cesar no quiso empeorarlas impeniendo su voluntad en un asunto que, en lo intimo, 1e era indiferente y que para los indios significaba la practica de una costumbre inmemorial. Pero en la noche, cuando César asistia a1 rezo del ultimo dia de la novena, acompanado de toda la familia, ya no deberia haber ni una huella de les acontecimientos diurnos. Las imagenes envueltas en yerbilla serian guardadas de nuevo en el lugar oculto que era su morada durante todo el aho. La juncia piseteada se renovaria por eargas de juncia fresca. Y les cirios consumidos serian reemplazados por otros en el recinto de la ermita, les indios, momenténeamente libres de la tutela del amo, alzaban su oraciOn herbara, eumplian un rito ingenue, mermada herencia de la pagania. Torpe gesto de alianza, de sfiplica, peticiOn de tregua hecha per la criatura atemorizada ante la potencia invisible que lo envuelve todo como una red. (p. 128.) Las mismas ceremonias, los mismos ritos son eelebrados, una y otra vez, desde tiempo inmemerial. El tiempo no pasa, y continuamente se estan refiriendo a1 principio de las cosas, a1 "Illud tempus": Los que por primera vez conocieron esta tierra dijeron en su lengua: Chactajal, que es come decir lugar abundante de agua. E1 gran rio pastor llama, con su vez que suena desde lejos, a les riachuelos tributaries. Oeultan su origen... 66 Los que per primera vez nombraron esta tierra 1a tuvieron entre su boca come suya. Y era un saber de mazorca que dobla la caha con su peso... Los que per primera vez se establecieron en esta tierra llevaron cuenta de ella come de un tesore... (p. 192.) Las oraciones y los ritos religioses son también mareadas manifestaciones de la visien del mundo de estos personajes- indigenas. En la ceremonia que celebran para festejar el dia de Nuestra Sefiora de la Salud, se presencia la forma de aeercarse a sus divinidades y a sus santos para trascender, aunque momentaneamente su misera condiciOn de vida. No son oraciones ni rezos contemplatives sino desesperadas sfiplicas con vez de "perro apaleade de res separada brutalmente de su cria". (p. 126.) A gritos solicitaban ayuda. En su dialecto, frecuentemente entreverande palabras espafiolas, se quejaban de hambre, de las asechanzas armadas per les brujes. (p. 127.) La embriaguez de los hombres chamulas, indispensable en tedas sus ceremonias, les hace perder todo contacto con 10 cotidiano, y bajar a la regien del inconsciente para sumirse en un mundo donde no puedan marcar 1a frontera entre 10 natural y lo maravilloso. Esta ceremonia, "que para los indios significaba la practiea de una costumbre inmemorial" (p. 126) es la finica expresidn de sus necesidades mes bASicas, de su contacto con 10 divine. E1 rito, en toda sociedad primitiva, es un medio para marcar la frontera entre 10 natural y lo prenatural, es decir, entre lo que es y lo que esta mes alla de les sentidos. Una vez cumplido e1 rito, queda 3610 1a manifestaciOn de la fe que el chamula pone en las fuerzas 67 superiores a ellos para mitigar su sufrimiento; su conciencia de lo maravilleso (ras o mitico) y su no menos fuerte conciencia de 10 real (e1 hambre, e1 aplastamiento de su dignidad). Junto a la presencia del rito, innumerables detalles pequefios nos van indicando e1 contenido mitico de la narracien y su relacien en las formas primitivas de aprehender el mundo. Tal vez lo mes evidente esta en la firme creencia de les personajes en las leyendas y narraciones prehispanieas. En realidad no se trata de meras leyendas, pues todos ellos, 1a nifia, 1a nana, 1a madre, la tia Francisea, 1a tia Amalia y los indigenas, creen firmemente en la realidad de les hechos narrados y, mAs todavia, buscan adecuar su conducta vital a1 significado intimo de lo que eyen. Asi, per ejemplo, para justificar e1 mal aguero que habra de aeompafiar a les Argfiello a través de la novela, se cuenta de como las criadas oyen y ven la presencia del Sombrerdn, e1 "espanto que anda por los campos y los pueblos dejando sobre la cabeza de les animales su sena de mal aguero". (p. 60.) La leyenda del Sombreren, reeopilada per Susana Francis en su libro S2232 antiguas leyendas 23 nos dice que el SombrerOn: "ronda per las calles de chiapaneeas San Cristobal al amparo de las sombras. Se aparece a los trasnocheadores solitarios, pero mAS que nada a quienes e1 alcohol ha prestado audacia. A primera vista se ve como un hombre ordinarie con la sola caracteristica de usar un enorme sombrero de palma bajo e1 H 24 cual sus facciones se esfuman . La convivencia entre blancos e indios ha hecho que estos se 68 asemejen en cuanto a sus creencias en supersticienes, sortilegios y hechicerias. Si 105 indios creen en brujerias y encantamientos, también creen en cosas similares los blancos. En el capitulo cinco de la primera parte, 1a nana cuenta una hermosa leyenda a la niha, la leyenda del Dzulum, animal misterioso y hermoso a quien hasta las "personas de razen" 1e pagan tribute: Una vez, hace ya mucho tiempo, estébamos todos en Chactajal. Tus abueles recogieron a una huérfana a la que daban trato de hija. Se llamaba Angelica. Era como una vara de azucena. Y tan decil y sumisa con sus mayores. Y tan apacible y considerada para nosotros, los que la serviamos. Le abundaban les enamorados. Pero ella eomo que los miraba menos 0 come que estaba esperando a otre. Asi se iban les dias. Hasta que una mafiana amanecie 1a novedad de que el dzulum andaba rondando en los términes de la hacienda. Las sefiales eran les estragos que dejaba dondequiera. Y un terror que habia secado las ubres de todos los animales que estaban criando. Angelica lo supo. Y cuando lo supo temb16 come las yeguas de buena raza cuando ven pasar una sombra enfrente de ellas. Desde entonces ya no tuvo sosiego. La labor se 1e caia de las manos. Perdie su alegria y andaba come buscéndola por los rincenes. Se levantaba a deshera, a beber agua serenada porque ardia de sed. Tu abuelo pense que estaba enferma y trajo a1 mejor curandero de la comarca. E1 curandero llego y pidio hablar a solas con ella. Quién sabe qué cosas se dirian. Pere el hombre salio espantado y esa misma noche regreso a su casa sin despedirse de ninguno. Angelica se iba a caminar a1 campo y regresaba, ya oscure, con el ruedo del vestido desgarrado por las zarzas. Y cuando 1e preguntébamos donde fue, sdlo decia que no eneontraba e1 rumbo y nos miraba come pidiendo ayuda.. Hasta que una vez no velvio. --E11a lo mire [a1 dzulung y se fue tras 61 come hechizada. Y un paso llame al otre pase y asi hasta donde se acaban los caminos. E1 iba adelante, belle y poderoso, con su nombre que significa ansia de morir. (pp. 20-21.) E1 aborto de Matilde lo lleva a cabo una bruja, una curandera que utiliza todos sus resabios ancestrales para eurarla: --Necesito que maten una res. Un tore de sobreafio. Junten en un traste los tuétanos. Ah, y no vayan a tirar la sangre. Esa me la bebo yo. (p. 168.) 69 Cuando les brujes comienzan a "comerse a Mario", Amalia, una amiga de la madre de éste, sumerje en un té que habra de tomar e1 nine una reliquia traida de Lourdes (Francia) con el objeto de que de este modo se epere e1 milagro de su curacion. (p. 273.) Pero 1a brujeria ya habia empezado a eperarse. E1 poderoso, e1 dominador se ve absorbido y desmenuzado per la prepia supersticien, que a1 fin se funde inapelablemente en el lejano y extraho poder de les indigenas: --E1 senor cura. Hazme caso, por favor Zoraida. E1 senor cura es el finico que puede salvar a Mario. Rezaria exorcismos para que el demonio se aleje de esta casa. Porque es el demonio, todos se dan cuenta. Hasta e1 Doctor Mazariegos. aPor que crees que no quiso ni intentar siquiera la operaciOn del nine? Porque sabe que no serviria para nada. (p. 276.) Del mismo modo, encerrara un profundo simbolismo e1 hecho de que Ernesto mate un venado, pues desde ese entonces los indies diran para designar e1 lugar en donde tal cosa ocurriera: "Donde se pudre nuestra sombra" (p. 69.): Mario y yo nos acercamos con timidez hasta el sitie donde yaee e1 venado. Los otros indies se inelinan tambien hacia ese ojo desnudo y algo ven en su fonde porque cuando se yerguen tienen e1 restre tambien demudado. Se retiran y van a encuclillarse lejos de nosotros. Desde alli nos miran y cuchichean. (pp. 69-70.) El ciervo seria indudablemente e1 tona, chulel e nahual de uno de estos indies, aunque en boca de la autora parece ser mas bien colectivo. La creencia del chulel o nahual se denomina come nahualismo o tonalismo. E1 tonalismo es la relaciOn entre un individuo y un animal 0 fenomeno natural que es su eompafiero. Para e1 chamula los tres elementos bASicos del ser humano son 1a carne, les huesos y el espiritu. Cuando nace una persona, un compahero animal (wayjel o chulel) 70 nace en el monte a1 mismo tiempo y su vida y destino estan mAgicamente ligados con los de su duefio humane. Ambos tienen el mismo espiritu (chulel), de manera que existe una relaciOn reeiproca entre ellos per toda la vida. Todo lo que ocurre a la persona ocurre tambien a su compahero animal a1 mismo tiempo y viceversa. Si el hombre no esta bien, su compafiero animal debe estar en las mismas condiciones. Si 1e sucede algo a uno 1e sucede a1 otre en el mismo instante.25 Cura.- -Ese es todo. Debi figurérmelo. Brujerias, supersticienes. Me traen a las eriaturas para que yo las bautiee, no porque quieran hacerlas cristianas, sino per aquello del agua bendita que sirve para ahuyentar a les nahuales y los males espiritus. (p. 249.) La creencia de estos indigenas en el nahualismo es otra expresiOn mAS, dentro de la novela, de su mentalidad mitiea, y del concepte msgice que tienen de las cosas y de la naturaleza. Rosario Castellanos ahonda en la condicidn social, economica y humana de les chamulas de Chiapas, asi como en la representacien estética de sus leyendas y creencias. Es su forma de afirmar que el ser humano, cualesquiera que sea su raza, puede trascender 1a tristeza de su condicidn $610 a través de su propia fuerza interior y de su propia fe. Mientras todas las circunstancias externas tienden, como en el caso de Felipe, a reducirlo hasta su nivel animal, otros impulses, no racionales, pero si integramente humanos, lo empujan hacia un nivel superior. Y lo mitico es, en esta obra, patrimenio de los que oyen la voz misteriosa que empuja a1 hombre a esfuerzos imposibles, aparentemente estériles, pero cargados de sentido solidario. CITAS 1 Rosario Castellanos, Balfin Canan (Mexico: Fondo de Cultura Economica, 1971). Todas las citas de esta novela serén de esta ediciOn. 2 Nahum Megged, "Entre soledad y busqueda de dialogo," Les universitarios, Nfim. 31, p. 5. 3 Ibid., p. 5. 4 Mircea Eliade, "E1 mito del buen salvaje e les prestigios del origen,” en La Torre, Revista de la Universidad de Puerto Rico, aho III, nem. ll (julio-sept., 1955), pp. 49-65. 5 Ludolfo Paramio, Mite g Ideologia (Madrid, 1971) p. 107. Eliade, Mite y Realidad (Madrid, 1971) p. 138. Megged, p. 4. Rosario Castellanos, Juicios Sumarios (Mexico, 1966) p. 433. Castellanos, "Cartas a Elias Nandino," Revista gg_Be11as Artes, Nfim. 18 (nov.-dic., 1974), p. 21. 10 Maria Luisa Cresta de LeguizamOn, "En recuerdo de Rosario Castellanos," La Palabra y_gl_Hombre, Nfim. l9 (julio-septiembre, 1976) p. 10. 11 Even Z. Vogt, Los Zinacantecos: g2 grupo mayargg‘gl siglo XX, (México, 1973) p. 9. 71 72 12 p. 11. Luis Suares, Mexico antiguo gg.gl_sigle XX_(México, 1969), 13 Guiteras Holmes, Los peligros del alma: visien del mundo .d2 33 tzotzil (Mexico, 1965) p. 42. 14 Ricardo Pozas, Chamula: g3 pueblo indio eg_los Altos d9 Chiapas (Méxice, 1950) Capitulos I y II. 15 Guiteras Holmes, p. 35. 16 Pozas, p. 93. 17 Leguizamdn, p. 4. 18 gpp91_y 9 (Mexico, 1971) p. 24. 19 Eliade, p. 133. 20 Guiteras Holmes, p. 111. 21 gpig , p. 111 22 Eliade, Lg sagrado 1_13 profano (Madrid, 1967) p. 69. 23 Susana Francis, Sobre antiguas leyendas chiapanecas (Mexico, 1960) p. 60. (El prelego es de Rosario Castellanos.) 24 Ibid., p. 60. 25 William R- Holland, "E1 tonalismo y el Nagualismo entre les tzotziles," Estudios de Cultura Maya (Mexico, 1961) pp. 167-172. CAPITULO III DIMENSIONES MITICAS: LO SAGRADO Y LO PROEANO EN OFICIO 2E TINIEBLAS La dimensien mitica es un aspecto fundamental en Oficio d2 tinieblas1 (1962). En esta novela se encuentra una vez més a1 indio chamula, la expletacien y la miseria en que vive, su sufrimiento, sus antiguos ritos, y la forma en que un cristianismo deformado emerge para dar un sentido a su pasividad y a su interrogacidn constante. Con tono de leyenda prehispanica, la novela empieza con la narracien de la fundacien legendaria de San Juan Chamula, ciudad ceremonial de los indios tzotziles: San Juan, El Fiador, el que estuvo presente cuando aparecieron por primera vez les mundos; el que die e1 si de la afirmaeien para que echara a caminar e1 siglo; uno de les pilares que sestienen firme lo que esta firme, San Juan Fiador, se incline cierto dia a centemplar la tierra de los hombres. (p. 9.) El caracter de rito y de literatura oral que aqui se manifiestan, anuncian 1a apertura de un munde primitive donde 1a existencia -- igual que un oficio de tinieblas -- es lenta, monetena y triste. San Juan Fiader se complace en el valle Chamula por su hermoso paisaje. "Y fue entonces cuando en el animo de San Juan se movie e1 deseo de ser reverenciado en este sitie." (p. 9.) Y para que no falte con que eenstruir su iglesia, transforma en piedras a todas las ovejas blancas de les rebahos que pacian en aquel paraje. 73 74 Los indies del valle, les hombres tzotziles (o mureiélagos) no saben interpretar aquel prodigio, y han de esperar a que lleguen los espaholes para que ellos con la cabeza y les indios con las manos den principio a este ambito sagrado, en donde se desarrolla 1a accidn de la novela. Del contacto de estas dos culturas, 1a indigena y la espahola, surge 1a incomprensiOn, 1a intoleraneia y la violencia. La iglesia cat61ica, incompetente come mediador, no hace sine fomentar e incrementar las diferencias irreconciliables que mas de una vez terminaran en rebeliones y guerras de casta. Oficio g2 tinieblas trata de la lucha entre les blancos y los indios. En una entrevista que le hieiera e1 critico Emmanuel Carballo, Rosario Castellanos aclara: La novela esta basada en un hecho histerico, e1 levantamiento de los indios chamulas, en San Cristobal, e1 ano de 1867. Este hecho culmino con la crucifixidn de uno de estos indios, a1 que proclamaron los amotinados como el Cristo indigena. Por un memento y por eie hecho, les chamulas se sintieron iguales a los blancos. Guiteras Holmes relata asi e1 trasfendo histerieo en que se basa la novela: Una joven pastora que se dedieaba a cuidar sus ovejas, encontre tres hermosas piedras verdes, que 1e hablaron eon tono amable. Corrie a comunicérselo a Cuscat, jefe natural de la pequeha comunidad, quien las coloce reverentemente en un cofrecito de madera, con el que sostuvo largas conversacienes. Cuseat y su "santo" o sus "dioses", llegaron pronto a1 conocimiento de muchos que, por su medic, compartieron la divina protecciOn. La noticia fue difundiéndose por los mAS apartados lugares y la gente acudio respetuoso llevando ofrendas, para adorar a1 animador y curandero. Cuseat vestia en su calidad de sacerdote, les apropiados ropajes blancos; daba las aguas bautismales y el alivio a les enfermos, predicando ante las multitudes, que se reunian. Los curas parrocos, de 75 los que per ese tiempo habia uno permanente en cada pueblo, trataban de disuadir a sus desapacibles rebafios, de esta herejia; hasta procuraron hurtar e1 cofre de Cuscat, con su sagrado contenido; pero fueron descubiertos y murieron en el intente. E1 nfimero de adeptos aumente hasta incluir no 5610 tzotziles de las tierras altas, sino también a muchos tzeltales de Cuncuc y Tenejapa, quienes se cengregaban todos los domingos en un sitie ritual nombrado Bux, en territorio Chamula un peco a1 sudoeste de Chenalho. Las tres piedras verdes o "santos" eran e1 anciano San Mateo y Santa Rosa, a quienes habian adorade en Chamula durante 150 apes, y la joven Santa Luisa, nombrada en honor a la esposa de un maestro que unido a les chamulas, les instaba a atacar San Cristobal y extender su rebeliOn mas alla de les limites de sus propias tierras y aldeas. De esta rebelien y sus consecuencias hay varias versiones. Maria del Carmen Millan da un excelente resumen del hecho que debio conocer Rosario Castellanos: En 1867, Pedro Diaz Cuscat, fiscal del pueblo de Chamula, en unien de su mujer, Agustina GOmez Checheb, fabrican una figura de barre en el paraje de Tzaljalhemel y hacen correr la versidn de que este dies ayudara a les indios en sus necesidades. Cuscat proyectaba la voz del Dies, y el culto fue tomando importancia. Cuando e1 cure del pueblo se entero de estas practicas, se llevo a1 idolo que peco después fue sustituido por otros. La versien de que Cuscat y su mujer hicieron cerrer fue que ella les habia parido. Mientras crecia e1 ritual de estos nuevos dioses y el ascendiente de la mujer, erecia tambien e1 sentimiento de rencor contra les ladinos causantes de la situacidn miserable de les indies. E1 hecho de que Cuscat hubiera sido aprehendido por llevar a cabo tales practicas y luego puesto en libertad con el argumento de la libertad de cultos, convencio a los indios tanto de la calidad extraordinaria de Cuzcat, come de la necesidad de combatir a los ladinos. Como acto propiciatorio, Pedro Diaz Cuzcat propone a su pueblo la eleeciOn de una Victima cuyo sacrifieio les igualaria a los blancos. E1 elejido es Domingo Gomez Checob, de dieciocho ahos, quien fue crucificado e1 Viernes Sante de 1868. Ignacio Fernandez Galindo se encarga de definir 1a situacidn: entrena militarmente a les indies y comanda e1 incendio, saqueo y destruccidn de las easas de les ladinos asi come e1 asesinato de hombres, mujeres y nines. Entre tanto, e1 cura Miguel Martinez y su comitiva son asesinados cuando intentaban destruir les idelos. La alarma erece, pues son seis o siete mil indios los que estén en pie de guerra. A pesar de tal nfimero, la ayuda del gobierne determina su dispersiOn. E1 movimiento 76 subersivo se mantiene latente durante afios. Galindo es fusilado y Cuscat eseapa. Estos sen escuetamente los hechos histerieos que Rosario Castellanos revivio en Oficio g3 tinieblas. Sin embargo, 1a accidn no se lleva a cabo dentro de la novela sine hasta 1930, la época de cardenas, en que parecia que la reforma agraria se efectuaria en Chiapas. E1 nucleo anecdetico parte del hecho de que Fernando Ulloa, delegade del gobierne, idealista, intenta restituir a la poblaeien indigena la tierra agricola que por derecho 1e pertenece. Para este tiene que enfrentarse con su enemigo mayor, e1 latifundista Leonardo Cifuentes quien inescrupulosamente se vale de todos los medios para no disminuir su poder ni reducir su hacienda. Cifuentes es el prototipe del macho mexicane, hombre primitive y astute, espeso infiel y pendenciero. Hace de la Alazana, esposa de Ulloa, su amante y maneja intereses sociales y politicos a su antejo. Es e1 tipieo patrdn del que la autora narra: Patren: el que sostiene una easa en Ciudad Real, con la esposa legitima y los hijos, les muchos hijos, el que instala una querida en el pueblo y otra en el rancho (aparte de las aventuras ocasionales con muchaehitas indias y pequehas criadas mestizas;) aparte, tambien de las incursiones en el barrio prohibido. (p. 150.) Fernando Ulloa, per otre lado, es un idealista torpe e ingenue. Intenta ayudar a les chamulas y hacer posible un cambio radical de la situacien, pero termina siendo devorado per esta. No puede ser e1 dirigente militar del levantamiento que fomenta entre los indios porque no entiende ni su cultura ni su lengua. Su oficio, a la par de les 77 indigenas, termina siendo otre oficio de tinieblas. Si se tuviera que resumir en pocas palabras el tema de esta novela, se podria decir que es la bfisqueda del hombre comfin (desposeido de solidaridad con sus semejantes) de una salvacien--social y espiritua1--a través de la crucifixidn. Es decir, es el eterno drama de la pasiOn del hombre en su lucha por su libertad. Los personajes centrales, Pedro Winikton y Catalina Puija, son exActos representantes del comportamiento y de la mentalidad primitiva de les chamulas. De ahi su concepte mAgico de la realidad, asi como el carécter religiose de la novela. Para ellos, el mundo sin dioses, sin ritos, no tiene significado y es solamente caos e irrealidad. E1 dios cristiano que les presenta su sacerdote, e1 padre Mendujano, escucha y proteje solamente a los blancos. Para su seguridad y beneficio, es neeesario restituir les ritos de su antigua religien idolatrica y aprender a escuchar las veces de les dioses ancestrales. Si los ladinos tienen un cristo que los protege de les males y les asegura inmunidad contra la muerte, ellos tambien tienen que 'producir' uno de igual magnitud y fuerza. Para entender el mundo mégico en el cual se desenvuelven los personajes indigenas de esta obra, es neeesario recordar algunos conceptos bdsieos que han sido desarrollados en Lg sagrado yhlg profano de Mircea Eliade.5 Son 108 siguientes: el hombre primitive y aquel de las culturas antiguas es un ser ubicado en un mundo religiose donde todo es manifestacidn de la divinidad. El espacio que se marea por un acto de fundacidn lo saca del caos y lo incorpora a1 cosmos y lo constituye, per lo mismo, en real. Lo real por excelencia es el espacio sagrado, es aquel que supone potencia 78 efieiencia, fuente de vida, fecundidad, orden. E1 hombre es, existe, a1 instalarse en ese espacio sagrado. Supera asi 1a rela- tividad, e1 caos y la ilusiOn o irrealidad. Y es, tambien, porque lo que fundamenta ontolOgicamente el mundo es la manifestacien de lo sagrado.6 En la novela, Catalina Diaz Puilja asume e1 papel de sacerdo- tisa para interpretar y transmitir e1 concepte sagrado y la palabra divina de les dioses paganos. Para este, convierte e1 paraje de Tzajal-hemel en un santuario, en un espacio sagrado, punto de llegada de les peregrinos de toda la zona de Chamula. E1 indio, una vez instalado en su propie espacio o cosmos sagrado recobra, aunque por un instante, sentido y valor a su existencia. E1 grupo se puso en marcha rumbe a Tzajal-hemel. Cuando llegaron a la cueva no les fue facil entrar. La gente se aglomeraba como en otros tiempos, per todas partes. Estaban excitados y ansiosos. Se habia corrido la voz de que Catalina Diaz Puilja iba a aparecer. (p. 255.) Catalina va creande una liturgia completa y delirante en la que les homenajes se centran sobre la misma "ilol" que sufre estados de éxtasis en los cuales les dioses se revelan. Contrastando con la desnudez del santuarie hizo su aparieien Catalina, pesada de adornos, hierétiea como un cadaver, sostenida en los flancos per mujeres de su séquito. Se coleco dando 1a espalda al altar, ante el que no hizo ninguna genuflexien. Los idolos que alli se adoraban ano eran acaso criaturas suyas, hijos suyos? (p. 255.) E1 entusiasmo colectivo hacia estos idolos llega a tal grado que les indigenas asesinan a1 sacerdote Manuel Mendujano, e1 parreco que habia destrozado los altares erguidos en la cueva de Tzajal-hemel, su Centro. 79 En Semana Santa, cuando e1 cenflicto entre lo cristiano (lo ladino) y lo profano (lo indie) aleanza su méxima expresiOn, Catalina impulsa a la tribu a sacrifiear en la Cruz a Domingo, e1 nifio que ella erie eon amor, esmero y sacrificio. La estremecedora crucificcien del nihe, en perfecta correSpondencia con la pasiOn cristiana, da principio a la rebelien de los chamulas que tienen ya su Cristo. Ahora nosotros tambien tenemos un Criste. No ha nacido en vane ni ha agonizado ni ha muerte en vane. Su nacimiento, su agonia y su muerte sirven para nivelar a1 tzotzil, a1 chamula, a1 indio, con el ladino. aQue podemos temer? Sobre nuestras cabezas ha caido la sangre del bautismo. Y los que son bautizados con sangre, y no con agua, esta dicho que no moriran. (p. 324.) Segfin 1a aeertada expesicidn de Clara Passafari, en Oficio d3 tinieblas, "Les hechos acaecen y se transforman dentro de la conciencia colectiva indigena que cambia y transmuta 1a realidad en mito, y las oscuras derrotas en leyendas sin limitacien temporal."7 Para les personajes indigenas, el mundo de San Juan Chamula les es inexplicable sin e1 mito. Joseph Sommers dice: E1 tiempo y la cronologia estén subordinades a etro fendmeno: la transformacidn, dentro de la conciencia indigena colectiva, de la realidad en mito, un proceso en el cual puede vivir e1 Tzotzil, segfin su concepte de lo mAgico y lo supernatural, herencia de sigles milenarios, interpretande ambos e1 presente y el future a través de su misterieso pasado. Esta conciencia celectiva indigena, vista en perspectiva, es sostenida a través de la novela por personajes arquetipicos (Catalina, Pedro, Domingo). De mode que la novela, lentamente se va situando en su propia perspectiva mitico-religiosa. ‘Maria del Carmen Millan explica e1 significado del titulo de la novela: 80 E1 nombre mismo del libro se refiere a uno de los ejereieios de la Semana Santa, que contienen pasajes de las Lamentaciones de Jeramias; es anterior a las celebraeiones del Viernes Sante, y censiste en apagar graduahmente las velas que estén en el altar, cuyo nfimero varia y de las cudles 8610 se debe quedar prendida una. Se trata de un oficio funebre que sugiere e1 deseonsuelo y la oscuridad en que quede el mundo después del prendimiento de Jesucristo y de su crucificcien; la convulsion de la naturaleza, e1 dolor de los discipules y la eeguera de les judios. La luz renace con la resureecidn y el sacrificio propicia la vida eterna. Este simbolismo parece orientar toda la obra, con la que se ajustan, incluso, hechos de cardeter histerico ocurridos en el pueblo de Chamula en diferentes épocas. A1 mencionar e1 significado del evangelio y su relacidn e importancia en la obra, cabe hacer notar que en esta novela lo religiose excluye lo divine, pues e1 Cristo crucificado no es el hijo de Dies, sino 1a Victima chamula, 0 sea, e1 hijo del indio, y lo religiose queda aqui limitado estrictamente a lo humano. La mentalidad chamula no ha dejado nunca de mezclar les dioses cristianos con los dioses paganos. De ahi que cuando Catalina restituye a su pueblo los ritos de la antigua religion idolatrica, hace use tambien de algunos ribetes catOlicos dificiles de separar desde mucho tiempo atras. De la misma forma adoran y sirven a sus idolos come a les santos: Pedro asentia y Catalina 10 miraba con lastima. Habia escuchado sus discusienes con los principales. Eran obstinados y temian que 31 e1 rito de la Semana Santa no se seguia con exactitud las potencias que hasta ahora les habian protegido se les tornaran hostiles. La misma Catalina se equivoce creyendo que en algo podria influir para revocar estas decisiones. Cuando dijo, en uno de les trances en los que caia frecuentemente, que les idolos de Tzajal-hemel exigian un culto exclusive, los que la oian quedaron pasmados de asombro y de temor. Pero después de largas deliberaciones les principales llegaron a un acuerdo: Ofrecerian a los idolos oblaciones extraordinarias para testimoniar su sumisien. Pero celebrarian la Semana Santa en el temple de San Juan porque era tambien poderoso y capaz de hacer dafio. (pp. 299-300.) 81 E1 significado simbelico de Catalina es de gran trascendencia en la novela. Es la que lleva a su pueblo a un enfrentamiento entre lo posible y lo imposible, a1 intente de trascender la muerte y de evadirse finalmente en ella. Maria del Carmen Millan 1a analiza: pastora de un rebahe indigena, 1a engendradora de los dioses antiguos: Sorda para las relaciones del mundo, aprende a escuchar las veces de sus dioses ancestrales. Vuelve a la cueva de su infancia y se convierte en sacerdotisa de un culto que promete para los suyos el fin de la adversidad. Atropellada por el eelo religiose del Padre Mendujano, es encarcelada per carges de culto idolatrico y per intentos de sublevacidn. Pese a las afrentas y a la confusion, Catalina sale de alli con un nuevo prestigio: ha violantado las puertas de las rejas, las acusaciones. La psicosis colectiva 1e confiere mayor poder, y el P. Mendujano y sus acompafiantes son sacrificados a1 pie de les idolos. Catalina es la sacerdotisa profeta que viene a traer redencidn pueblo: 3Vamos a renacer, igual que nuestros dioses! ;Vamos a movernos para sentirnos vivos! Vamos a hablarnos de tfi y yo para confirmar nuestra realidad, nuestra presencia. (p. 212.) Es 1a Madre, la Virgen Maria india, 1a madre del crucificado, 1a --Es una ilol-- tiene mucha fuerza. --;Fuerza! Ni siquiera un hijo ha podido tener. --Y aQué son esos santos que 1e naeieron en la cueva? --Dicen-- prosiguio e1 pasado martoma, aturdido per la repentina victoria sobre su mujer--dicen que cuando los santos naeieron de 1a 1101, estaba sucia de barre y no de sangre, come las etras hembras. Y que les santos naeieron ya de la edad que tienen. (p. 254.) Es Maria del rostro moreno, la Madre que da valor y significado a1 sacrificio, a la crucifiecien de su hijo: Aqui llegamos todos al final de la cuenta con el ladino. Hemos padeeido injusticias y persecuciones y adversidades. Quiza alguno de nuestros antepasados peco y por eso nos fue 82 erigido ese tribute. Pero de pronto los dioses se manifiestan, las potencias oscuras se declaran. Y su voluntad es que nos igualemos con el ladino que se ensorberbecia con la posesidn de su Cristo. (p. 324.) Catalina es el motor que mezcla los origenes histOricos con los origenes miticos, porque a través de su conciencia y de sus acciones historia y mito se confunden. Es la que despierta 1a conciencia mitica primitiva de su pueblo, adermecida per tanto tiempo. Es también 1a conciencia de su sociedad que vive en constante rebelien contra el tiempo concrete, histerico y que, come sostiene Mircea Eliade, es la que alimenta una nostalgia de retorno periddico a1 tiempo mitico de les origenes.11 Retroceder, borrar este dia de marido ausente, de hijo raptado. ;Si se pudiera regresar hasta el principio! Cuando e1 trabajo era alegre como un juego y los juegos... (p. 192.) Es la ilol, la intérprete mAgica de las creencias mitieas tzotziles. El término Ilol, segfin Guiteras Holmes, significa basica- mente curandera, pero su significado va mucho mAs alla de este. El término ilol literalmente quiere decir "vidente." Los indios chamulas creian que en tiempos mit016gices todos los hombres podian 'ver' dentro de les cerros y observar a sus dioses ancestrales directamente; pero ahora selo les iloles pueden 'ver'. Para llegar a ser una Ilol una persona tiene que sonar tres veces que su "alma" ha sido llamada ante los dioses ancestrales en el Gran Cerro Anciano.12 Asi, Catalina quien es de las que pueden mirar de frente e1 misterio, es tambien e1 simbole de un culto que promete para los suyos e1 fin de la adversidad porque es la que ha rote e1 silencio de les dioses ancestrales y por la cual sabrén entender las olvidadas 83 promesas de sus idolos. Su trAgiea infertilidad, su obstinada bfisqueda de la manera de quedar prefiada 1a llevan a1 conocimiento de los brujes y de les hechiceros. Pero tode es infitil. Entonces comenze 1a peregrinacidn. Acudia a los custitaleros, gente errante, sabedora de remotas noticias. Y entre los pliegues de su entendimiento guardaba les nombres de los parajes que era precise visitar. En Cancuc habia una anciana, dahera o ensalmadora, segfin 1a solicitaran. En Biqu'it Bautista, un brujo, sondeaba la noche para interpretar sus designios. En Tenejapa despuntaba un heehicero. (pp. 12-13.) Su luna se habia tenido roja come la luna de las solteras y de las viudas. (p. 12) Frustrada, aprende a indagar en el misterio. Se convierte en un ser temible, respetada, a quien todos miraban con temor. Asi para Catalina fue nubléndose la luz y queda confinada en un mundo sombrio, regido por voluntades arbitrarias. Y aprendio a aplacar estas voluntades cuando eran adversas, a excitarlas cuando eran propicias, a trastrocar sus signes. Repitie embrutecedoras letanias. Intaeta y delirante atravese corriendo entre las llamas. Era ya de las que se atreven a mirar de frente e1 misterio. Una "ilol" cuyo regaze es aredn de les conjures. Temblaba aquel a quien veia con mal cefio; iba reconfortado aquel a quien sonreia. (p. 13.) Catalina y su espeso Pedro Winikton han adquirido e1 "caler" neeesario para aeercarse a sus dioses. Ella per sus poderes sobre- naturales, él por los servicios que presto a la comunidad. Los cargos politicos y religioses tienen per efecto directo "volver e1 alma mes caliente" y el calor va aumentando a medida que las funciones se elevan en jerarquias y que piden mas sacrificios.13 Para Joseph Sommers, Catalina es: ...un genuine personaje literario, una rareza en la novela latinoamericana, que casi nunca logra retratar personajes indios 84 convincentes. Trascendiendo lo folkldrice y 10 regional, Catalina responde a motivaciones que son universales, asi come peculiares a circunstancias locales. Su problema bésico es conocido de todas las mujeres: ‘la esterilidad. Pero su respuesta a1 problema esta condicionada por su propia cultura. Ella busca poder y recompense en su carrera come ilol, curandero o intérprete msgico de las creencias mistieas tzotzil. Con estas caracteristicas simb61icas, Catalina encarna tambien el mundo estéril, seco, lleno de soledad y patetismo de los suyos. A través de su oficio y de su sacrificio, la historia retorna sobre si misma y eventos ya cumplidos vuelven a acontecer. Toda frontera se diluye en la relatividad del espacio y del tiempo. En ella todo lo que pueda ser legieo y erenolOgico es sustituido por el orden ritmico y espiritual del mito. En Catalina el tiempo mitico se actualiza. Su movilidad nos abre las puertas a1 tiempo original que abraza todos los tiempos, pasados e futures en un presente. Es, segfin Octavio Paz, 1a forma en que el mito "contiene la vida en su totalidad: per medio del ritmo actualiza un pasado arquetipieo, es decir, un pasado que potencialmente es un futuro dispuesto a encarnar un presente."15 Per ese, en la regidn temporal del mito, los contenidos de conciencia del individuo se funden con los de la humanidad. La representaeién de esta temporalidad mitica en la narraciOn, impliea e1 sincretismo espontanee de las menciones temporales que provoca la actitud omnisciente y omnipresente de la autora en Oficio g3 tinieblas. E1 universe mitico se nos presenta como un ritual que lo envuelve y la obliga a la revivencia del mito. La intenciOn de la autora es la construccien del mundo indigena, de su conciencia mitica, 85 de su concepcion del munde y del universe.16 Pedro Winikten es tambien otre personaje trégice, que encarna la semilla mitica, simbolo de la necesidad humana, obsesiva de vivir con dignidad y justieia en este plano existencial como en el espiritual. Hombre de caracter noble, se da cuenta que la lucha de su pueblo esta condenada a1 fracaso y a una brutalidad sin sentido. Y sin embargo sabe que todo intente de cambiar este destino es imposible, porque él, como el resto de los chamulas, esta sujeto a1 fatal destino reservado para ellos per sus dioses. Su lucha interna estriba en darse cuenta que su pueblo es el esclavo del ladino en términos materiales, y en términos espirituales, e1 esclavo de les idolos. Pedro no intente siquiera detener 1a avalancha de aconteci- mientos que se preeipitaban en torno suyo. E1, lo mismo que sus compaheros de raza o condiciOn, creian en la verdad de lo que se estaba manifestando. Esperanzas, mil veces derrotadas por el infortunio, brotaban ahora de nuevo, pujantes. Y en ese frenesi combative del que tambien participaba sentia e1 latido anunciador de hechos que darian a las vidas de todos un nuevo cauce. "La humillaciOn ya no ha de asfixiarte mAS con su dogal de hierro. La injusticia sera reparada. Los dioses resucitaron para deeirnos que tfi y to y tfi, seres libre, que seres dichoso." (p. 214.) Le que mes nos llama la ateneiOn en la actitud de Pedro y Catalina es su esfuerzo per penetrar una realidad--social el de Pedro, espiritual el de Catalina--cuyo llamado es mAs imperioso que el de la necesidad biolOgica. Lo que acaba de eonmover en este compromise arcaico es su extremado valor. Porque lejos de tratarse de sobrenatural domesticade, de un refugio contra desgracias e injusticias de este mundo, esta investido de la potencia terrible y fulminante propia de los fendmenos espirituales e1 estado pure, 86 intocados aun per la erosiOn del intelecto. Lo que caracteriza a ambes es una actitud de profundo laconismo y soledad. Unidos per una fuerza indescriptible, fuera del orden establecido, se enfrentan a sus destinos con una resolueiOn inquebrantable. Obsesionado per implementar un orden basado en la justicia, Pedro se rebela contra el abuse, la violencia y la violacidn. Pedro avizoraba algo mes, invisible todavia para los otros. Si no bastara el sufrimiento padeeido (se decia entre si) para merecer la redenciOn, tenemos otros méritos: e1 haber sabido agruparnos alrededor de un hombre que se ha inclinado a escuchar nuestras quejas, que conoce la extensidn de nuestra miseria y que ha sondeado nuestra angustia: Fernando Ulloa. Esta midiendo lo que se nos debe y cuando haya terminade marchara en busca del Gobierno hasta la ciudad de Tuxtla, donde les ajwaliles firmaran les papeles de la restitucien. Seremos, desde entonces, indios con tierra, indios iguales a les ladinos. Y sera ésta la primera palabra del dios que se haya cumplido. (p. 215.) Alerta y sensible a todo lo que injuria su dignidad humana, asi como la de su tribu, Pedro se rebela contra lo establecido. Maria del Carmen Millan dice: "Algo se rebelo en su sangre contra el abuse, la violencia y la vielacien, pero quiso buscar sosiego para preparar su espiritu y sus aptitudes y poder un dia tener en sus manos la balanza que pesa las acciones de los hombres."17 Para Pedro e1 ejercicio de ser juez es sagrado. Para ser un juez justo se prepara en la sobriedad y la disciplina. Pero en su bfisqueda, trepieza constantemente con la injusticia. Arrastrado por la necesidad imperiosa de sobrevivir en un mundo pobre, Pedro lucha contra 1a esterilidad de la tierra que se niega a darle e1 sustento basico para una sobrevivencia elemental. Pero en 87 vane. Tiene que engancharse a una finca. Al enfrentarse a1 enganchador, ..."le pregunte como se llamaba y le dijo nada més Pedro Gonzalez. Callo el nombre de su Chulel salvaguardando su alma del poder de los extranjeros, deje al margen de este trato lo mAs profundo y verdadero de su ser". (p. 51.) También esto es infitil, pues el enganchador 1e habia tomade una fotografia y su ficha habia sido colocada en el archive. "De esta manera, les aseguraba e1 enganchador, habia entrado en posesion del chulel de cada uno." (p. 52.) Era infitil huir, quejarse, estaban atrapados. Su alma no les pertenecia y sin ella no se puede existir. E1 chulel es la imagen onirica del individuo, su esencia impalpable, su forma fisica y sus caracteristicas mentales. La sustancia espiritual que constituye e1 chulel nunca muere, ya que pasa a ser a otro en un ciclo interminable. Puede salir del cuerpo pero su ausencia crea, inevitablemente, una condicidn peligrosa. Puede acarrear e1 dafie y la muerte. Segfin Guiteras Holmes, "El cuerpo se vuelve carne para comer y constituye una facil presa de los poderes malignos, ante les cuales esta inerme."18 Asi, deja su tierra para ser Victima de la explotaciOn y de las condiciones inhumanas con las que son tratados los indios enganchados en este caso, en la finca de don Adolfo Homel, un alemAn. Porque don Adolfo tenia un corazdn sensible. Si en su finca se recurria, cuando era neeesario a1 cepo, a1 calabozo y al latigo, era porque apreciaba 1a disciplina. Si en la tienda de raya se expendia aguardiente a precios mAS altos que los del mercado y si las jornadas de trabajo eran de sol, era porque respetaba las costumbres. (p. 56.) Come e1 Felipe de Balfin Canan, e1 haber oido a1 presidente 88 Lazaro CArdenas y haber estrechado su mane, crea su fuerza y su sello de pacto con la justa distribueidn de la tierra y su sentido de la justicia. Tambien Pedro, come Felipe, trata de llevarles 1a palabra "Justicia" a les suyos, pero recibe la misma indiferencia y sentimiento de miedo per parte de los suyos ante tan desmesurada preposicien. En las conversacienes con los principales Pedro hablo del Presidente y de sus promesas de justicia. Los demés lo escucharen con impaciencia y malestar. Porque la vida de los chamulas era trabajoso, pero de les sufrimientos heredados y transmitidos a sus hijos ellos ya conocian la rutina. (p. 62.) Ne pueden aceptar la esperanza de una justicia porque la expe- riencia les ha ensefiado que no puede haber justicia para el indie y menos afin viniendo de la boca de un blance. Los demés asintieron gravemente. Los viejos se retiraron de alli embargados per una c61era sin nombre y sin salida. zQué habia dicho este advenedizo, este Pedro? Que los trabajos que ellos habian padeeido serian exencien y desagravie para las generaciones venideras. zAcaso su condiciOn era, pues, circunstancia azarosa y remediable? No, era destino, mandate de las potencias oscuras, voluntad de dioses crueles. 3Qué burla a sus creencias, que mefa a su vida, a sus virtudes humildes, a la sumisien que ahora despojaban de sus méritos si Pedro hubiera dicho la verdad! (p. 63.) La condicidn del sufrimiento y de la explotacidn es aceptada como una ley divina, como un castigo de les dioses a los que no pueden eludir, ya que ningdn poder humano ni siquiera la del Presidente, es mas fuerte que el de sus dioses. Regresa a su tierra 5610 para traer otre oficio de tinieblas que él mismo, a ciegas, trata de imponer y seguir. ...Decir justicia en chamula era velar, dia y noche sostenido per la promesa de un hombre remote cuya buena fe ningune habia prebado afin. Era preferible callar. 89 -Pere yo 10 he visto- insistia desesperadmmente Winikton-- yo soy testigo y fiader de que lo que dice e1 gran ajwalil es verdadero. Xaw Ramirez Paciencia carrapee antes de responder. -- Es buene, hijo mio, que guardes estas noticias para tiempos mAs oportunos, para el tiempo de su sazOn. (p. 63.) Pedro Winikton es una parte intrinsica del clima mitico que envuelve a la novela. A través de Pedro, vemos que no existen les ferreos limites que separan el reino vegetal, a1 reino animal y al reino del mundo sobrenatural de las experiencias humanas. Hombre y paisaje, hombre y animal y hombre y espiritu, se manifiestan del mismo modo, casi en igualdad de condiciones, asemejéndose cada vez mes unos a otros. La naturaleza es una, y en ella el hombre y los otros seres son capaees de extrafias semejanzas y mutaciones. El hombre se parece, per ejemplo, a1 paisaje en que crece. Cuando describe por primera vez a Pedro, 1a autora nos dice: "Winikton se considero semejante a1 tallo hueco; a1 rastrojo que se quema después de la recoleceien. Era comparable tambien a la cizafia. Per que no tenia hijos." (p. 12.) De igual mode describe a Catalina: Catalina es ya como el animal marcado por un hierro: el de les dioses. Delante de ella e1 gran estupor de lo desconocido.. ' El silencio es la boca hambrienta del abismo. Hay que aplacarla arrojando a su fonde lo que ha de saciar su hambre: una Victima. Catalina es un arbol sacudido, un cofre saqueado. Ya no tiene nada que dar. Y e1 silencio persiste. Nada que dar. Porque lo ultimo que posee lo defiende y su desnudez no es perfecta como la de la Cruz. (p. 317.) La justicia tambien es vista no come lo que representa, sino come su contraria: la bestia que la devora: "A fuerza de topar con ella en todas las encrucijadas fue aprendiéndola, rasgo a rasgo. 90 Conocie sus mahas de animal dahino, e1 cubil donde se refugia, sus disfraces, su rapidez para huir." (p. 31.) E1 pueblo que va a sus ritos es descrito come un gran animal torpe: "Conforme avanzaban las horas se veia aquella multitud moviéndose como un gran animal torpe, per su tamano, por su pesantés." (p. 121.) Y en el memento de la crucificciOn: "Domingo comprendio de pronto, que de alguna manera se habia convertido en ese que tanto temie siempre: en un perro rabioso." (p. 322.) La condicidn humana, degradada brutalmente, es igualada a la de les animales. Las humillaciones y el trabajo brutal se miden en la descripcien del trato de les indios chamulas en las fincas ya que, come lo describe la autora, la tribu es un "gran animal torpe, desarticulado, acefalo." (p. 226.) Y e1 sufrimiento de les seres humanos, de una raza extirpada per la violencia es sdle un episodio en el sufrimiento de toda una raza: Solos, estos hombres olvidan su linaje, 1a dignidad que ostentaban, su pasado. Aprenden de los animales cobardes las ciencias de la furtividad. Se deslizan sobre la hojarasca sin sucitar un rumor, dan un rodeo para no caer en la trampa, imitan la muerte ante 1a inminencia del peligro. (p. 362.) Esta visidn del hombre que apenas se mantiene por sebre las cosas y por sobre los animales, volviende a 10 animal 0 a lo ina- nimado a través del sufrimiento, la humillaciOn y la miseria, da un nuevo matiz a la creencia mitica original de que, segfin Ernst Cassirer, "existe un vinculo comun que une a todas las cosas, que la separacidn entre él [el hombre] y la naturaleza, y entre las diferentes clases de objetos naturales, es, después de todo, arti- ficial y no real."19 91 Domingo Diaz Puilja cumple tambien un destino tragico dentro de la novela. Es 1a Victima propiciatoria, e1 Cristo de los indigenas. Su muerte iguala, aunque mementaneamente, a1 indio con el ladino. Su funciOn no es 3610 la de morir sino tambien la de hacer volver a nacer. Pero de pronto les dioses se manifiestan, las potencias oscuras se declaran. Y su voluntad es que nos igualemos con el ladino que se ensoberbecia con la posesien de su Cristo. Ahora nosotros tambien tenemos un cristo. No ha nacido en vane ni ha agonizado ni ha muerte en vane. Su nacimiento, su agonia y su muerte sirven para nivelar a1 tzotzil, al chamula, a1 indio, con el ladino. Per ese, si e1 ladino nos amenaza tenemos que hacerle frente y no huir. Si nos persigue hay que darle la cara. (p. 324.) Su dolorosa e inhumana muerte redime al chamula no en términos de una salvaciOn espiritual sino en términes de una redencidn social. Su crucifiecien, en correspondencia con la pasien cristiana, da principio a la rebelien de les indigenas. Con su muerte echa a andar un nuevo ciclo mitico en el cual "cada cosa, como en les tiempos de la creacien e de la vida pacifica, quede con su guardian." (p. 326.) E1 tiempo retorna a la edad primera. La igualdad, la justicia y la libertad estén a1 alcance del indigena. No pueden temer ni a la muerte. Tienen su Redentor. Une de les indios centeste que ya no iban a permitir que ningfin ladino les hablara de ese modo, puesto que ahora eran iguales. Ante 1a risa burlona del viejo ahadio e1 argumento irrefutable: que les chamulas tenian un Cristo propie y que habian escuchado 1a promesa de que no iban a morir. (p. 329.) El sacrificio, acto sagrado y ritual, es aqui la reencarnaciOn de les ritos ancestrales indigenas. E1 presente es una vez mes e1 pasado y el futuro. La recuperacien periedica del tiempo primor- dial, el regreso a1 tiempo finieo, con un Cristo come guia y 92 redentor. Y esta es una de las funciones del mito.20 La crucificcien de Domingo trae come consecuencia e1 renacimiente de los suyos. Les brinda un escape de la pesada carga de injusticias y aplastamientos que les agobia. Su funcien es hacerles creer la ilusien de una trascendencia que salta per encima de su amarga rutina. El tiempo de exaltacien y de triunfo es demasiado corto. Los indigenas contraponen a su Cristo con un santo cristiano y salen perdiende: "--La Virgen de la Caridad se apareeio a los ladinos y custodia el pueblo. Les indies no se atreven a luchar contra ella". (p. 348.) La liberaciOn no se lleva a cabo. Termina siendo otre oficio en tinieblas, pero la esperanza no muere. Sin embargo, la esperanza que vive en los hombres chamulas no es una esperanza serena. Es sufriente, tragica. La bfisqueda de la tiniebla les conduce a las cuevas. En el centre de la cueva, repesa e1 arca. La han defendido de la codicia de les ladrones y mAs de uno sucumbio antes de permitir que se la arrebatara. La cubren de las intemperies come si fuese criatura desvdlida, la pretegen de la incuria, 1a rodean de solicitud y de reverencia. Porque en el arca esta depositada 1a palabra divina. Alli se guarda e1 testamente de los que se fueron y la profesia de los que vendran. Alli consta lo que dictaron las potencias oscuras a sus siervos. Alli resplandece 1a promesa que conforta en los dias de la incertidumbre y de la adversidad. Alli esta 1a sustancia que come e1 alma para vivir. E1 pacto. (p. 363.) E1 ciclo mitico se cierra. Desnudos, mal cubiertos de harapos 0 con taparrabos de piel a medio curtir, han abolido el tiempo que los separaba de las edades pretéritas. No existe ni antes ni hey. Es siempre. Siempre la derrota y la persecucien. Siempre e1 amo que no se aplaca con la obediencia mas abyecta ni con la humildad mas servil. Siempre e1 latigo cayendo sobre la espalda, sumisa. Siempre e1 letigo.. Siempre e1 cuchillo cercerando.. (p. 362.) 93 E1 sistema social y todo lo que rige la vida de les indigenas esta detalladamente delineado en la novela. Se describe e1 sistema de gobierne de les chamulas, su organizacien politica, 1a conducta social y los mecanismos psicologicos que les rige. Pere lo que determina la vida india es la presencia de la sociedad dominante, les personajes ladinos de diversas clases sociales. Joseph Sommers les describe muy acertadamente: Los [personajes ladinos] mes interesantes son e1 tradicional terrateniente y su amargada esposa, su desdichada hija, un obispo acosado per la culpa y un sacerdote ambicioso. La mas notable caracteristica comun a todos estos individuos es el grado hasta el cual todo su sistema de valores ha sido corroido per una mezcla de odio y miedo a les indios, de les cuales dependen, pero a quienes miran come geres inferiores, desagradables y esencialmente irredimibles. 1 Los ladinos son miambros de una sociedad hip6crita, vacia de valores espirituales, empapada de un miedo irracional a les indi- genas. Es una sociedad llena de prejuicios y limitaciones culturales. Basta recordar come Leonardo Cifuentes, e1 cacique fuerte, mata a su hermano: "El mismo Cain de las Escrituras procedie asi contra su hermano Abel per la desigualdad del trato que se les daba." (p. 75.) E3 el mundo de materia en constante conflicto con el mundo del espiritu del indigena. Las descripciones de la vida cotidiana de ambos mundos sirve de teldn de fonde a la acci6n principal, que es el interminable oficio de tinieblas de dos mundos irreconciliables, de dos visiones del mundo tan opuestas come lo es la realidad y la fantasia, e1 mito y la historia. Las relaciones entre el mundo indigena y el blance se 94 establecen per personajes puentes, come los denomina Maria del Carmen Millan: "Son estos Teresa --1a nana de Idolina-- Y Xaw Ramirez Paciencia. Les dos sirven a los blancos y les hacen conocer peculiaridades de su manera de entender el mundo."22 Ni uno ni otre, sin embargo, encuentra su lugar en ningune de les grupos humanos que unen, y la comunicacien queda una vez mas y para siempre, truncada y relegada a las tinieblas. E1 ladino se caracteriza per su materialismo y superficialidad. El indigena se caracteriza por su ingenuidad, ignorancia y servi- lisme. Ambas concepciones hacia la vida estan presentadas en esta obra profunda y completamente. E1 ladino, tal come se ve a través del personaje Leonardo Cifuentes, no puede presindir de sus posesienes materiales y su principal objetivo es incrementarlas. E1 indigena no puede vivir sin creencias o leyendas. La finica explicaeien de su existencia es el mito. Alfonso Gonzalez en su ensayo "Lenguaje y protesta en Oficio dg tinieblas", afirma: Asi come les tzotziles disuelven sus problemas en la inconsciencia del alcohol, el mundo de San Juan Chamula les es inexplicable sin e1 mito. Este da un tono de leyenda a una realidad social. Los indios, que no pueden entender el que les ladinos hayan encarcelado y libertado, sin castigos mayores, a un grupo de mujeres encabezado per Catalina, dicen que esta, "..estaba en la carcel y de repente ningune de les guardianes pudo mantener cerradas las puertas. Y nuestra comadre Catalina y las otras mujeres que estaban presas salieron volando hasta su paraje.." (p. 254.) Le real y lo fantdstico son inseparables en la cosmogonia tzotzil. La leyenda de la fundacien de San Juan es tan verdadera que esta escrita en los tres arcos de la puerta de la entrada del temple (p. 10.). A1 final de la novela, Teresa, la nana india de Idolina, hija de Leonardo Cifuentes, hace a un lado la matanza que acaba de sufrir su pueblo, situando la derrota de este en un pasado remote: "En otre tiempo no habias nacido tu, criatura; acaso tampoco habia nacido yo, hubo en mi pueblo.. una ilol de gran virtud. (p. 366.) 3 95 La cualidad atemporal del mito es parte integral de la vida de les tzotziles, y la realidad se pierde en las tinieblas del rito y de la imaginaciOn. La mezcla de rites paganos y catelicos per parte de les indigenas nos muestra su conflicto ya no tanto social come espiritual. La esencia de les ritos paganos ha sido transferida a la misa, a1 bautizo, a la oracien y adoracidn a los santos. Este conflicto, en vez de haber sido resuelto por los sacerdotes a1 suministrarles las ensehanzas religiosas a los indigenas, a través de un entendimiento basico de la mentalidad y costumbres indigenas, no han hecho sine agudizar las tensiones entre estos dos mundos. La influencia de les sacerdotes en las dos culturas podria haber servido de puente conciliador para resolver ese antagonisme. Pere su oficio, otre oficio de tinieblas tambien, no hace sine agudizar la incomprensibilidad e intelerancia. La actitud del Padre Madrujano ejemplifica claramente este hecho en la novela: iY con que lentitud marchaba todo! Los feligreses estaban dispuestos a pagar los diezmos y primicias que exige anualmente la Iglesia: estaban dispuestos a dar las limosnas necesarias, a entregar dinero a cambio de les sacramentos. Laudable dadivosidad, y mAs teniendo en cuenta su pobreza. Pero a este se limitaba su practica de la religien. Seguirian estando a1 margen de lo que constituye verdaderamente a un catelice. No podia instruirseles en sus deberes espirituales, excitarlos a la confesien y a la peniteneia porque entre sacerdote y pueblo se interponia la barrera del idioma. aCuénde iba a conseguirse asi que se suprimiese alguno de les ritos con que se mancillaba e1 temple? Los indios protestarian con furia, come cuando e1 padre Manuel pretendie impedir que el mayordomo de Santa Margarita se emborrachase cada vez que tenia que cambiar los vestidos de la estatua.. (p. 121.) 96 El padre Manuel reaceiona con furia hacia la practica pagana de les indios en el temple: En el interior de la nave se habian congregado los indios. No de rodillas, tendidos en el suelo, rasguardaban con la concavidad de las manos 1a llaga agonizante de las velas y gemian, retorciéndose. Habia otros de pie, vacilantes, ya beodos, que se enfrentaban a les altares en una grosera reclamacien de agravios. Y en la espuma de la gran ola de mfisica, ese tema infantil, se derrumbaba incesantemente después de sostener un memento su nada en el espacio. E1 padre Manuel no intente siguiera gritar para pedir que cesara todo aquello. Su voz se perderia dentro de la corriente de sonido. ...Y golpeaba, ciego de ira, y no sabia si a1 otre o a si mismo. (p. 123.) Los indigenas hacen use de la misa para liberarse de sus congojas y expresar su inquietud, abiertamente, ante los santos. El significado de la misa en la mente tzotzil nos 1a explica Jacinto Arias en El mundo numinoso dg_12§_m§ya§: Una vez mes se debe recordar que el esfuerzo comunal se orienta (entre les tzotziles) hacia el mantenimiento de la armenia tanto en el mundo visible como en el invisible. Llevar a un sacerdote en alguna ocasien importante a dar misa en la iglesia constituye una del las obligacienes de la comunidad hacia los santos y otros poderes invisibles; es 8 la vez una ofrenda y un page per la labor que estos han emprendido en el mundo invisible. Dicha obligacien se debe eumplir e, de otra manera, les poderosos seres invisibles castigarian a la comunidad llevéndole enfermedades, sequias u otras calamidades que romperian e1 equilibrio ideal en el orden social y moral visible. Esa idea de la misa y su funciOn tienen un paralelo a las ceremonias celebradas en honor a les moradores de les lugares sagrados, per parte de las autoridades civiles, cuando menos dos veces a1 afio. Dichas ceremonias consisten en visitar las montafias, las cavernas y las fuentes mes importantes, donde se dicen oraciones y se toca mfisica y se sirven bebidas, es una fiesta que ofrecen las personas del munde visible a les moradores de aquellos lugares para pedirles lluvia, salud y riqueza en beneficio de toda la comunidad. Esa misma idea se halla presente en la misa ofrecida por el sacerdote. La finica diferencia radica en que ésta ultima es una celezraciOn en honor a les poderosos seres ladinos invisibles.2 97 La misa no tiene per que ser interpretada a la manera de los ladinos. La obligaciOn hacia les seres invisibles (les santos) ha sido cumplida y estos no tienen ya por que lastimar o hacer dano a la comunidad indigena. A 105 santos cat61ieos se les adora porque estos ayudan y dan una razen de ser. Ubiean a1 indigena en el universo. De alli que el ser divine de la mitologia catelica espahola fue incorporado a1 sistema maya, atribuyéndole relaciones funcionales con el ser divine del sistema existente sir ser identificado con él. Asi les santos y los idolos siguen constituyendo distintos tipos de dioses. Ni Catalina ni Pedro pueden dejar de eumplir con el rito de la Semana Santa per miedo a enfurecer a las potencias que siempre los han protegido. Cuando Catalina dice a les suyos que les idolos de Tzajal Hemel exigian un culto exclusive, su misma gente se queda pasmada de asombro y de temor. Pero después de largas deliberaciones, les principales llegan a un acuerdo: ofrecer a los idolos mas oblaciones de las acostumbradas para mitigar su celo, y eumplir con los santos cristianos tambien, pues son poderosos y capaces de hacer daho. En las celebraeiones de la Semana Santa, no es sorprendente 1a persistencia del fonde precertesiano: Tede el valle de Chamula retumbaba de mfisica. E1 acordeen jadeante y desigual, como una respiracidn de borraeho; las arpas, las lineas delicadas, invisibles per la distancia y la oscuridad. E1 ritmo de los pies, calzados con caites de cuero grueso y mal curtido. Per todas partes a1 mismo tiempo- iniciadose, continuando, alcanzando su f1n- e1 Bolonchen, la danza del tigre y la culebra, la metamorfesis del dios, de pronto recononocible en un animal a1 que los ojos estén acostumbrados. En ese animal que preside les nacimientos, que acompaha y fortalece la vida, que despoja de su horror a la muerte. El Bolonchen, continue, igual, inacabable... E1 pueblo de Chamula esta estableciendo su alianza con las 98 potencias oscuras, esta pagando su tribute a les verdaderos sehores, esta rescatando su derecho de vivir un afio mas. (p. 302.) Igual en la iglesia que en la cueva, a1 orar, los indios cantan, lleran y rezan a gritos. El acto es el mismo. $610 103 dioses son diferentes. Para e1 chamula 1a fiesta religiosa de la Semana Santa cobra especial significaeien, ya que por medio del derroche de energias acumuladas durante e1 afio, puede liberarse, dejar de lado todo aquello que lo aisla y le separa de les demAs. Es el tiempo en que puede participar, comulgar con quienes lo rodean, salir de si mismo y embriagarse. E1 chamula celebra e1 fin de un tiempo y el comienzo de otre, rescata su derecho de vivir un ahe mes. Es la celebraeidn de la renovacien de la fe. Necesita de estos ritos para afirmar y confirmar su creencia en lo divine. Tal es su credulidad que cuando se les informa que las tropas del gobierne se encuentran en camino para sofocar e1 levantamiento, responden les principales con seguridad: "LCOmo? En les caminos cada piedra se convertiria en un guardién, cada peha en un obstACulo, cada arboleda en un ejército. Tal es el poder de San Juan, cuye doble esta en el cielo y vigila cuando la imagen de Chamula descansa." (p. 305.) Ninguna fuerza mundana puede contra el poder de una raza que se ha comunicado con 10 divine. Estén seguros de su victoria contra el ladino porque..: Su enemiga inmemorial (La Virgen de la Caridad), la que en los combates se encuentra en varies lugares a la vez, animando a los pusilanimes, devolviendo la vida a los moribundos, tendiendo trampas fatales a los chamulas, no habia tomade participaciOn en este conflicto. Entonces podia ser ganado. Se abrazaban entre si, destaparon las betellas 99 de alcohol, rieren hasta las lagrimas. (p. 305.) Pere cuando 1a duda les llega si saldra la Virgen de les milagros en defensa de les ladinos, inmediatamente se ponen a buscar otre intercedor e protectora que traspase en poder y fuerza a la Virgen enemiga: --5A quien vamos a alzar para que la mire de frente? --Nuestre patren es San Juan. --San Juan pasterea rebahes. Ne tiene espada. --Santiage es jinete --Cura les caballos cuando pisan 1a hierba mala. Ne quiere pelear. --;La Delorosa? Esta proposicien no ebtuve respuesta. La Dolorosa vagaba por la tiniebla de las noches, lamentAndose de sus hijos muertos. Triste, loca, madre, acdmo les podia defender? La respuesta 1a encuentran en su Redentor indigena, Domingo. La dimensien temporal en donde les mitos suceden no esta relacionada con nuestra limitada concepcidn del tiempo croneldgico. No posee la finitud irreparable de nuestra contingencia que permanentemente nos esta arrojando hacia un futuro nunca alcanzado y que deviene sin cesar en pasado. En el tiempo sagrado se rompe 1a continuidad y la sucesion. Segfin Octavio Paz, "E1 tiempo transcurre en el tiempo arquetipico. Y es mes: es tiempo arquetipico, capaz de reencarnar. E1 mito es un pasado que es futuro, dispuesto a realizarse en un presente."25 Per lo tanto se puede deducir que en la visien que presenta Rosario Castellanos de dos culturas ideoldgicamente epuestas existen dos tiempos: e1 profano y el sagrado. El primero permite desprenderse de la sucesien (1a visien del 1adino);en e1 segundo, en cambio, e1 mito es suceptible a ser siempre hey, en la reencarnacien 100 en ciertes espacio-tiempos de les ritos ancestrales. Para el Cristianismo, come para el hombre en las sociedades arcaicas, el tiempo no es homogeneo. En cualquiera de sus conme- meraciones, asisten verdaderamente a la reactualizacien del misterio de la anulacifin del tiempo profane mediante la repeticien infinita del rito sin que dnjr do set siempre el mismo. E1 se'"’ficio en el que participa toda la comunidad chamula, les brinda la oportunidad, aunque momentanea, de encontrarse en la situacien limite en la cual Caes y Orden cesmices estan unidos. E1 desequilibrio per cl que pasan a través de este rito, les permitira encontrar e1 equilibrio posterior dc seres y cosas. Este sera su afirmacien del ser. La crucificcion dc Domingo prevecaré su recomenzar. En este sacrificio participamos dc una transformacion mitica en los personajes. Es la finica oportunidad dc aliviarse de la pesada carga dc razen que les agobia y de escaparse del tiempo que, inexorable, les circunda. E1 ambiente que prevalecv en este sacrificio tema 1a forma de una fiesta tal come nos 1a describe Octavio Paz en El laberinto ES 19. 801.9989: La fiesta es una Revuelta, en el sentido literal de la palabra. En la confusien que engendra, 1a sociedad se disuelve, se ahoga, en tanto que erganismo regido conforme a ciertas reglas y principios. Pero se ahoga en si misma, en su caos o libertad original. Todo se comunica; se mezcla e1 bien con el mal, el dia con la noche, lo santo con 10 maldito. Tede cohabita, pierde forma, singularidad y vuelve a1 amasijo primordial. La fiesta es una operacien cosmiea: 1a experiencia del Desorden, 1a reuniOn de los elementos y principios contrarios para provocar e1 renacimiente de la vida. La muerte ritual suscita e1 renacer; e1 vemito, e1 apetite; 1a orgia, esteril en si misma, la fecundidad de 101 las madres e de la tierra. La Fiesta es un regreso a un estado remote e indiferenciado, prenatal o pre-social, per decirlo asi. Regreso que es tambien un comienzo, segun quiere 1a dialéctica inherente a los hechos sociales. E1 sacrificio de Domingo es una reencarnaciOn de les sacrificios prehispénicos. Es 1a manifestacien de un rito arcaico del mito de la muerte come necesidad para la renovacien de la vida. Per ese su muerte tiene que seguir e1 proceso ritual de la agonia que saciara el "hombre de los dioses" y que redimira a su tribu. La persistencia del mito precortesiane subraya la diferencia entre la concepcien cristiana y la indigena: Cristo salva a1 mundo porque nos redime y lava la mancha del pecado original. Domingo no es tanto un dies redentor come une recreador. La nocien del pecado para les indies esta todavia ligada a la idea de salud y enfermedad, personal, social y cesmica. Este sacrificio es un retorno a lo que en la mente del indigena es lo sagrado y que les permite, come anteriormente lo mencionamos, a través del desiquilibrie y embriaguez momenténea, e1 equilibrio posterior de seres y cosas. Es 1a representacien total de la comunidad y de la cosmogonia, pero a la vez es la circunstancia particular en la que se afirma su ser. El resultado del levantamiento indigena es desastrose y sobre- viene la tragedia. Matan y mueren sin sentido. Una vez mAS se les somete y se destierran a1 desierto, a las tinieblas, a la soledad: "LQue estaban persiguiendo? Daba lestima verlos, andrajosos, sucios, andando come loeos per cualquier vereda." (p. 329.) Impulsades per sus destinos infinitamente antiguos, per potencias sociales destruetoras y aniquiladoras se refugian en una 102 esperanza mas: en un libro que para ellos se convierte en sagrado y que los perpetuara a través de la palabra (pensamiento mitico). El libro se expone a la adoracidn. El principal lo alza, con cuidado exquisite, entre sus manos. Lo acerca a1 rostro de los que estén presentes para que sean testigos y lo divul- guen entre quienes no tienen acceso a la ceremonia. Son testigos de que el libro existe. Que no se ha perdido en las vicisitudes de la fuga ni en el saqueo del desastre. Existe, para que la esperanza no desfallezca. Existe. Ahora ya pueden cerrarse para siempre estos ojos arrasados en legrimas. Los que han viste les salva. Y continfia expuesta, como una hostia, esa pagina que algun héroe ignerade rescate de la catastrofe. Esa pagina inicial en la que llamea un titulo: Ordenanzas Militares (p. 364.) La vida de estos indios seguira perpetuéndose en ese oficio de tinieblas, y sacrificéndose a seres desprevistos de conciencia moral y social come Leonardo Cifuentes. E1 nivel espiritual, sin embargo, la semilla de la esperanza no ha desaparecido del todo. La "palabra" y la esperanza perduran. El tragico episodio de la crucificien y la desastrosa lucha es convertida al final de la novela en una leyenda. Este hecho nos muestra que el pensar mitico, e1 descender a un tiempo preterito para volver a vivirlo, para volver a sentirlo, para reaetualizarlo, es llevado a cabo per una indigena --la nana Teresa-- cuye papel es perpetuar la memoria de su pueblo. La leyenda con que concluye 1a novela se desplaza en un tiempo preterito, en un "pasado mitolegico". En ese tiempo mitico en el que todo ha sucedido, esta sucediendo y volvera a suceder. Un tiempo en que la finica propiedad del hombre --e1 futuro-- ha sido escamoteada por un continue presente, un eterno retorne.27 103 --En otre tiempo --no habias nacido tfi, criatura; acaso tampoeo habia nacido yo-- hubo en mi pueblo, segfin cuentan les ancianos, una 1101 de gran virtud. Con sele mirar un horizonte sabia si era de prosperidad e de escasez; conocia e1 destino en el semblante de los hombres y expulsaba 1a enfermedad del cuerpo de quienes 1a padecian. Esta ilol tuvo, para espanto de todos, un hijo de piedra. Hablaba come habla la gente de razen; aconsejaba a les peregrinos que acudian a presenciar e1 predigio; hacia andar a les tullidos y derramaba la abundancia de cosechas en las milpas. ... Pero conforme crecia su autoridad crecia tambien su soberbia. Ya no era suficiente entregarles e1 cerdero mAs escogido ni las primicias de las cosechas ni las flores mes hermosas. La ilol se habia tornado taciturna. La ilol y su hijo tenian hambre y necesitaban comer a1 primogenito de cada familia. La tribu, que temia sus sortilegios, 1e entrege una Victima que fue devorada. Pero luego exigieren otra y otra y otra mes. Eran insaciables. Les tzotziles andaban barajustados, sin saber que hacer. (p. 367.) Teresa transforma 1a realidad en una leyenda. Todos los actos de violencia se convierten en la leyenda en actos hereicos. Los actos semi-inconscientes de Catalina se ven transformados en actos megicos y fantasticos. La leyenda ha convertido la realidad en un mite con el fin de justificar con dignidad la caida de una tribu, y cimentar 1a esperanza que ha de alimentar a los futures hombres de la misma. Carl Jung sefiala que les mitos retratan a1 pueblo que les nutre y les crea, y expresan, de manera propia, experiencias que estén en el transfondo psiquico de la humanidad.28 Como e1 arte, come les suenos, come las alueinaciones --y sin que de mode alguno pretendamos opener en un mismo nivel todas estas manifestaciones -- 1a memoria popular, fabuladora de la nana Teresa, nos pone en contacto con el inconsciente colectivo de les chamulas. La memoria de la nana, 104 recordamos, no entrega les hechos tal come sucedieron, sino adaptades a su peculiar estructura de pensamiento. Segfin'Mireea Eliade, "La memoria pepular retiene facilmente acontecimientos, arquetipos en vez de personajes histOrices."29 La dimensien fantastica de les hechos precede a su dimensien real y los dota asi de todos los atributos maravillosos que le ha dado 1a imaginacien de Teresa (representante de la imaginacidn pepular.) En muy poco tiempo, el hecho real, historieo, ha perdido su singularidad y se ha revestido de los rasgos propios de la consciencia mitica. El valor de esta historia convertida en leyenda radica en el testimonio que encierra: e1 indio, a pesar de su enfermizo alcoholisme --preducto de su desesperante situacien--, es un ser humane que posee valores tan positives y universales, tales como una existencia apegada a ritmes y ritos naturales y la honda consciencia colectiva de les mitos y del pasado. A pesar de su derrota, el chamula emerge como el verdadero héroe, que sabe sobrellevar los sufrimientos y que, a pesar de su miseria, no pierde la esperanza de mejorar su situaciOn social. Dueho de una conciencia mitica, para él no hay un proceso histerico, sine mAS bien un simple presente perpetua y la repeticien de una serie de actos rituales. Ser atemporal, en tinieblas, sobrevive y sobrevivira a sus antagonistas, aunque para este tenga que vivir y revivir muchas otras derrotas. Rosario Castellanos explica come e1 chamula concibe el mundo: De acuerdo con la manera de vivir y cencebir el mundo, a les chamulas les era imposible conquistar la ciudad enemiga. 105 Me explico. Entre ellos la memoria trabaja en forma diferente: es mucho menes constante y mucho mAs caprichosa. De ese modo, pierden e1 sentido del propesite que persiguen. Se lanzan contra pequefios poblades, contra ranches sin duenos y, en unos y otros, desahogan la violencia. Conforme se produce e1 desahogo, la violencia deja de ser necesaria, aunque no haya producido les efectes que se proponia. En ese memento, Oficio ES tinieblas se convierte en novela y se aparta definitivamente de la historia. La pereepcien y compenetracien de esta cultura per parte de la autora, deriva de un sensible deseo de reivindicar social y humanamente a1 hombre chamula. A través de su novela muestra una completa identificacien con los sufrimientos y angustias del pueblo tzotzil. Castellanos aclara que: Come les personajes indigenas eran, de acuerdo con les dates historicos, enigméticos, traté de conecerlos en profundidad. Me pregunté per que actuaban de esa manera, que circunstancias les condujeron a ser de ese modo. Asi comencé a desentraharlos y a elaborarlos. Un acto me llevaba a1 inmediato anterior, y por ese método llegue a conecerlos integramente. Basandose en las circunstancias histericas de Chiapas, 1a autora se aprovecha de ellas para penetrar en los aspectos intrahistericos de la misma. Les elementos antrepolegicos, sociales, y psicolegicos que maneja, nos colocan frente a una situacien real enfocada con objetividad y percepcien artistica. Partiendo de una existente realidad, Rosario Castellanos crea su propia realidad del mundo chamula, una realidad tefiida de magia y rito a la vez que de una cruda y denigrante violencia. CITAS Rosario Castellanos, Oficio d2 tinieblas (Mexico: Joaquin Mortiz, 1966) Todas las citas de esta novela serén de esta edicidn. Emmanuel Carballo, lg'pgetagonistas gg_la literatura mexicana del siglo XX. (Mexico, 1965), p. 421. 3 p. 19. G. Guiteras Holmes, Les peligros del alma (Mexico, 1965), Maria del Carmen Millén, "En torno a Oficio dg tinieblas," Anuario dg Letras (Mexico, 1963), Num. 3, p. 291. Mircea Eliade, Lg sagrado y_lg'profano (Madrid, 1967), pp. 150-160. 6 Ibid., p. 160. 7 Clara Passafari, Los cambios y_estructuras en la narrativa mexicana (Argentina, 1968), p. 85. Joseph Sommers, "Changing view of the Indian in Mexican Literature," Hispania 47, nem. 1 (march, 1964), p. 50. 9 Millan, p. 292. 10 Ibid., p. 294. 11 Mircea Eliade, §l_mito del eterno retorno (Buenos Aires, 1968), p. 90. 106 107 12 Holmes, p. 72. 13 Holmes, p. 306. 14 Joseph Sommers, Yanez, Rulfo y_Fuentes (Caracas, 1968), p. 205. 15 Octavio Paz, E1 arco yulg lira (Mexico, 1956), p. 63. 16 Cuando hablames de "concepcien del mundo" hacemos un determinado intente de caracterizar un modo de vida tradicional. Es uno de esos términos fitiles para expresar algo de lo que es més general y persistente en un pueblo. 17 Millan, p. 295. 18 Holmes, p. 244. 19 Ernst Cassirer, Antropolggia filosefica (Mexico, 1967), p. 145. 20 Mircea Eliade, E1 mite del eterno retorno, p. 47. 21 Sommers, p. 205. 22 Millan, p. 298. 23 Alfonso Gonzalez, "Lenguaje y protesta en Oficio gg'tinieblas", Revista g3 estudios hispénicos, Tome IX, (octubre de 1975), p. 449. 24 Jacinto Arias, E1 mundo numinoso dg'los mayas (Mexico, 1975), p. 83. 25 Paz, p. 62. p. 46. 108 27 L. Paramio, Mite g Ideologia (Madrid, 1971), p. 45. 28 Carl Jung, Psychology 2f the Unconscious (New York, 1974), p. 29. 29 Mircea Eliade, El mito del eterno retorno, p. 47. 3O Emmanuel Carballo, p. 421. 31 Ibid., p. 422. CAPITULO IV MITO Y REALIDAD EN CIUDAD REAL Les diez cuentos que componen Ciudad Real1 [1960] son un resumen del munde magieo y deprimente del indio chiapaneco que habita alrededor de 0 en Ciudad Real, antiguo nombre de San Crist6bal las Casas. Son cuentos que revelan e1 origen de les tzotziles, sus leyendas, sus ceremonias, sus creencias, su forma de vivir y su decadencia. Rosario Castellanos presenta dramaticamente el contacto entre indios y el mundo ladino. A1 enfrentarse con las presiones abruma- doras de esta sociedad ajena y hostil, e1 indigena convoca en su defensa las creencias y la sabiduria heredadas de generaciones pretéritas. Pero resultan inadecuades estos recursos en una lucha desigual, con desenlace invariable de tragedia y sufrimiento. Tal es el caso en el primer relate, "La muerte del tigre". En "La muerte del tigre", aparece e1 mito etiolegico de los Bolometie, tribu chamula. A manera de leyenda, la autora narra 1a existencia de los Bolometic en tiempos inmemoriales: "La comunidad de los Bolometic estaba integrada por familias de un mismo linaje. Su espiritu protector, su waigel, era e1 tigre, cuye nombre fueron dignes de ostentar por su bravura y su audacia." (p. 13.) Era una raza prOSpera y soberbia. Pero llegaron les caxlanes (los espafioles), quienes les derrotaron en sangrientas batallas, despojéndolos de sus tierras y de su historia: "Alli iniciaron una 109 110 vida precaria en la que el recuerdo de las pasadas grandezas fue esfumAndose, en la que su historia se convirtie en un manso rescoldo que ningune era capaz de avivar." (p. 13.) Las potencias superiores habian decidido destruir a1 tigre, a1 waigel de les Bolometic. Inermes, agarrotados por el terror, vencides, huyen a la sierra inhespita. Comienzan a morir de hambre. Les que se salvan, llegan a Ciudad Real. Alli les acometen con injurias, humillaciones y desprecio. Su miseria es tal que tienen que engancharse a remotas fincas cafetales de donde no habrian de regresar jamas. E1 mito actfia en este cuento en su condicien de narracien histerica del pasado.2 Todas las obras que configuran e1 patrimonio tradicional de les pueblos antiguos e de los actuales pueblos no histerices, pueden ser consideradas come conjuntos de expresiones miticas. En "La muerte del tigre" aparece e1 patrimonio de les Bolometic, asi come tambien e1 desarrollo y el aniquilamiento total de su raza y de su cultura. En "La tregua" se presentan algunos elementos que reflejan el contenido mitico de la narracien: leyendas, espiritus malignos, creencias populares sobre dioses devoradores, supersticienes, ritos, y el sacrificio. Es una historia que recrea e1 eomportamiente y la forma primitiva de aprehender el mundo de los chamulas del paraje de Mukenja. Narra e1 homicidie brutal de un desconocido que llega, perdido y debilitado per la altura, e1 hambre y la sed, a1 paraje. Una indigena, Rominka, lo confunde con el Pukuj, espiritu que 111 enciende 1a guerra, propicia enemistades y destruye las cosechas. Llena de terror, avisa a les hombres de su tribu del encuentro. A1 darse cuenta de que no es sino un miserable caxlén, lo sacrifican colectivamente con violencia para calmar a1 insasiable Pukuj y desahogar su odio contenido per tanto siglo. Joseph Sommers sehala: Per medie de eseenas retrospectivas se dilucida 1a doble raiz del asesinato. En primer lugar habia que aplacar a1 espiritu malevolo que amenazaba la cosecha y el destino del paraje. Pero e1 segundo motive era reaccionar en contra de la politica de terror llevada a cabo por las autoridades de San Cristobal, en liga con les fabricantes de aguardiente -- politica de quemar y matar para impedir que los indigenas elaboraran su propie 'trage'. Pero les males no desaparecieron. El sacrificio fue selo una tregua. Concluye 1a autora: "La tregua no fue duradera. Nuevos espiritus malignos infestaron e1 aire. Y las cosechas de Mukenja fueron ese ahe tan escasas come antes. Los brujes, comederes de bestias, comederes de hombres, exigian su alimento. Las enfermedades tambien les diezmaban. Era precise volver a matar." (p. 34.) E1 cuento no evita ni suaviza e1 estado primitive y la degra- dacien en que viven les indios de este paraje. MAS bien recrea a ese ser indigena, atemporal, y su respuesta a les problemas acarreades por su condicien actual. Segfin destaca Maria del Carmen Millan: En "La tregua" se plantea el caso del chamula sin recuerdos. El hecho de ayer no esta ubicado en el tiempo; pudo haber ocurrido hace meses o hace siglos. La memoria colectiva lo registra come actual o inminente; zcuando ocurrie la destruccien de les alambiques clandestinos? zQuiénes murieron achicharrados dentro de sus jacales? No imperta ese. De cierto se sabe que quien cause tantos estragos fue el Pukuj, que en algfin memento fue liberado y desde entonces se presenta en forma de animal 0 de ladino. 112 E1 Pukuj es, segfin Guiteras Holmes, "un término genérico que designa la muerte y la maldad. Se dice que el Pukuj es todo pede- roso. El y Dies tienen igual fuerzas; e1 Pukuj desea exterminar e1 alma del hombre y derrotar a Dies. Esta vinculado con la noche y todas las perversidades de la oscuridad. Gambia de forma. Es enemigo de la alegria, de la felicidad y de la risa del hombre."5 En la mente colectiva de Mukenja, e1 Pukuj tiene una fuerza preternatural. Es decir, ejeree una influencia vital y misteriosa sobre los miembros de esta comunidad que rigen su vida en la supersticien y en la fuerza misteriosa de los espiritus. La leyenda del Pukuj que satura 1a atmesfera del cuento es de una belleza tal que merece ser aqui transcrita: Antes, cuentan les ancianos memoriosos, unos hombres malcontentos con la sujecien a que el Pukuj los sometia, idearon e1 modo de arrebatarle su fuerza. En una red juntaron los tributes: posol, semillas, huevos. Los depositaron a la entrada de la cueva donde e1 Pukuj duerme. Y cerca de les alimentos quede un garrafen de posh, de aguardiente... Cuando e1 Pukuj caye dermido, con los miembres flojos per la borrachera, los hombres se abalanzaron sobre él y lo ataron de pies y manos con gruesas sogas. Los alaridos del prisionero hacian temblar 1a raiz de los montes. Amenazas, promesas, nada 1e consiguie la libertad. Hasta que uno de les guardianes (per temer, per respete, aquién sabe?) corto las ligaduras. Desde entonces e1 Pukuj anda suelto y, ya en figura de animal, ya en vestido de 1adino, se aparece. Ay de quien lo encuentra. Queda marcado ante la faz de la tribu y para siempre. En las manos temblorosas, incapaces de asir les objetos; en las mejillas exangfies; en el extravio perpetuamente sobresaltade de los ojos conocen los demAs su tremenda aventura. Se unen en torno suyo para defenderle sus familiares, sus amigos. Es indtil. A la vista de todos, e1 sefialado vuelve la espalda a la cordura, a la vida. Despojos del Pukuj son los caddveres de nines y jevenes. Son les locos. (pp. 28-29.) E1 tema del tercer cuento de Ciudad Real, "Aceite guapo,‘ versa sobre el hombre solitario que lucha contra 1a impotencia de la vejez 113 y contra las creencias de una comunidad que cree que si un hombre de tal edad ha sido respetado per la muerte, es porque ha hecho pacto con las potencias oscuras. Daniel Castellanos Lampoy, e1 personaje, es un anciano que sin denes de brujo ni dignidad de martoma tiene que buscar un puesto, un menester que lo sostenga con dignidad en su comunidad durante su vejez. Desprovisto del titulo de 'pasada autoridad' que la mayoria de les ancianos llegan a adquirir sirviende a la comunidad, Daniel tiene que ahuyentar 103 males agurios que su edad y su condicien acarrean. Para les tzotziles la presencia de un anciano que no ha sido pasada autoridad es una amenaza, un ser dafiino. La autora comenta: No, un anciano es el mal y nadie debe aeercarsele en busca de compasien porque es infitil. Basta que se siente a la erilla de los caminos, a la puerta de su casa, para que lo que contempla se transforme en erial, en ruina, en muerte. Su presencia sela es dafiina. Hay que alejarse de e1, evitarlo; dejar que se consuma de hambre y necesidad, acechar en la sombra para poner fin a su vida con un machetazo, incitar a la multitud para su lapidacidn. (p. 38.) Daniel Castellanos Lampoy ha llegado a la edad en que no es f8cil borrar 1a estigma de la vejez. Como dice la autora en el pdrrafo citado arriba, 1a vejez acarrea 1a mala suerte. En el pueblo se le podia atribuir cualquier malestar o péridida de un animal del rebafio. Daniel tenia que buscar una salida y la encuentra, per lo menos momenténeamente. Se convierte en martoma de la santa Margarita. El puesto de martoma, aclara Guiteras Holmes: ...se conoce come cargo de hombre pobre, ya que implica selo una ligera carga econ6mica. Per lo general 10 desempehan les pasados, (les ancianos) quienes habiendose elevade al mas alto range posible, desean continuar de servicio y vivir en el centro ceremonial.. a causa de la satisfaccidn que derivan 114 de este cargo.. Alggnos ancianos cuidan a1 mismo santo, o uno diferente cada vez. Daniel Castellanos Lampoy lleva a cabo su cargo con gran dignidad y esperanza pero con una gran congoja: "ZCuanto tiempo 1e quedaba junto a la sombra protectora de la santa Margarita?" (p. 44.) A1 terminar su cargo de martoma, terminaria tambien su aceptacidn en la comunidad, y por consiguiente, su vida. Ademés, se habia enamorado de la santa. Su mayor anhelo era poder hablar con ella. Pero, Ledmo?, si la santa Margarita no entendia 1a lengua chamula. Recurre a1 'aceite guapo', bebedizo que sirve para hacer hablar castilla (espafiel) a les indios. Maria del Carmen Millan describe acertadamente los efectos de este bebedizo: Tendria que hablar, que defenderse, que probar ... pero su lengua se niega, sus pensamientos lo burlan. Per lo menos, les efectos del 'aceite guapo' que le recomende e1 sacristén, lo sumieron en la inconsciencia de una borrachera solitaria, que detuve unas horas la carrera de su destino. "Modesta Gomez", trata de una sirvienta ladina en casa acomodada, quien sufre la deshonra a manos del hijo de la familia. Expulsada come consecuencia se refugia en un matrimonio que selo 1e brinda hijos e infelicidad. A1 quedarse viuda, 1a finica alternativa para mantener a sus criaturas es volverse "atajadora" -- interceptar a las mujeres indigenas que descienden rumbe a1 mercado. Trés apoderarse violentamente de 1a‘mercancia de éstas, 1a atajadora arrojaba a cambio algunos centavos al suelo. Era un acto de venganza la violencia con que desempefiaba su cargo. Joseph Sommers acertadamente deelara que: "El cuento descubre e1 mecanismo interno de la sociedad de Ciudad Real, 1a jerarquia cuye 115 estrato social mes deprimido se solaza de que existe un grupo en torno de la ciudad, en condiciones afin inferiores."8 E1 indio no 3610 tiene que luchar contra sus propios espiritus malignos, sino tambien contra toda una raza exterminadora cuye finico prepesito parece ser el de extirpar su ultimo aliento. E1 indie que vende tedo lo que posee para comprar la Justicia es el tema del cuento "El advenimiento del Aguila". Aqui aparece una forma mes de explotacien que utiliza e1 blance para semeter a1 indio. Hector Villafuente vende a1 indio e1 aguila que aparece en el sello de la correspondencia per cinco mil pesos. Como se ha dado cuenta de la importancia que el aguila del sello representaba para el indigena, inescrupulosamente exige tan desmesurada cantidad. Sabia que pagarian aunque tuvieran que venderse para el resto de sus vidas. E1 Aguila era para el indio la Justicia. Rosario Castellanos demuestra en esta narraciOn hasta que punto e1 chamula basa su comportamiento, su realidad en el mito. En "La rueda del hambriento" se presenta a1 medico en compe- tencia con el brujo. E1 cuento empieza con la llegada de una enfermera, Alicia Mendoza a Oxchuc. Su primer encuentro con la cultura chamula ocurre cuando los arrieros que la cenducian a su destino se explicaban e1 origen de la neblina. Veamos e1 procedimiento: -- Pues ahi tienen ustedes que un dia santo Tomes tire a1 ciele una piedra, asinota de grande. --;Ah, qué fregar! No me vas a decir que el cielo se caye. --;Y que querias que hiciera? Nuestro Senor Jesucristo no quiso levantarlo. Que 1e sirva de escarmiento a ese tal per cual -- dijo--. Que lo levante el que lo haya derrumbado. Y desde entonces Santo Tomes hace la fuerza, todos los dias. gPere que va a poder! Aguanta un peco; y luego e1 ciele lo 116 vence y se derrumba otra vez. Como si dijéramos ahorita. Sientan cemo nos esta cayendo encima. Es lo que nombramos niebla. (pp. 116-117.) En este ejemplo se observa come funciona 1a mentalidad indigena a1 explicarse un fenomeno natural, en este caso 1a niebla. Todos los fenemenos de la naturaleza tienen su origen y explicacien en el mite. El primer caso clinico que recibe Alicia es el de una parturienta indigena. Le comun es que en estos cases ocurran a1 brujo o a la comadrona. El medico lo sabe y es per ese que exclama con asombro a1 ver llegar a la parturienta: "iQué extraho! Ese es menester del brujo, de la comadrona. El médico no le sirve m3s que para accidentes." (p. 129.) Y en efecto, les cases leves o no muy graves les indies se los llevan a la ciencia (doctor) y los graves, aquellos de mayor incdgnita, que no se manifiestan en un simple resfriado, les pone ante e1 discernimiente imprevisible de la magia. Porque para el indio lo mAs grave es que el espiritu se espante, o que se lo coma e1 Pukuj. También, para la mentalidad chamula, pecado y enfermedad son sinOnimos en muchos cases: "Era indudable que esta mujer habia sido Victima de un maleficio. Tedas paren con facilidad. Todas pueden amamantar a sus crias. zPor que ella no? LAcaso era culpable y su desgracia 1e venia come castigo?" (p. 131.) Alicia trata de salvar a1 nine chamula que habia nacido en la clinica. Se estaba muriendo de hambre. Pero ni la madre ni e1 padre intentan salvarlo. Era infitil. Se 10 estaba comiendo e1 Pukuj. Esta explicaciOn, tan sencilla, hacia superflua toda accion. 117 E1 penfiltimo cuento de esta eoleccien es "El don rechazado". La protagonista, Manuela, es una indigena que ha sido explotada per deha Prdjeda, quien, segfin Manuela, se habia apoderado de su alma. Un miembro del Centro Indigenista en San CristObal trata de ayudarla, separéndela de la Prdjeda. Pere Manuela insiste en volver con su verduge: "Doha Préjeda es mi patrona --respondi6 Manuela con seriedad-- No hemos deshecho e1 trato. Yo no he salido todavia de su poder." (p. 147.) Doha Prajeda 1a habia echado a la calle cuando iba a tener a su hija, 1a haria reventar a fuerza de trabajo, venderia a su hija Marta a1 primero que la solicitara. Pero Manuela no podia abandonarla. Era dueha de su chulel. El relato, "Arthur Smith salva su alma" narra cemo un norte- americano se convence de la autenticidad de las creencias y del vivir de los indigenas en oposicien a la mentalidad mecanizada y material- ista del hombre "racional", en este caso simbolizado por el pastor Williams. Arthur habia venido a Ah-tdn a propagar 1e fe en Dies y a transmitir e1 mensaje de luz y redencien a los indigenas. La primera caracteristica que nota es ceme les indios mezclan 1a religidn cristiana que se les estaba ensehando con las creencias prehispanicas. Veamos un ejemplo: A Mariano santiz Nich se le bahaba la cara y el cuello de sudor, y cuando Arthur 1e pedia 1a correspondencia precisa de un vocablo respondia con el primero que se la venia a la mente. Y 81 e1 texto decia Espiritu Sante, Mariano interpretaba Sol y principio viril que feeunda y azada que remueve la tierra y dedos que modelan el barre. Y 81 decia demonio, no pensaba en el mal, no temia ni rechazaba, sino que se inclinaba con sumisien, porque después de todo el demonio 118 era 5610 la espalda de la otra potencia y habia que rendirle actos propiciatorios y concertar alianzas convenientes. Lo que echaba de menos, porque no se mencionaba jamAs, era 1a gran vagina paridora que opera en las tinieblas y que no descansa nunca. (p. 168.) Aqui se puede observar que la finica forma en que el indigena puede entender los conceptos de la nueva religion es a través de su prepia cosmologia, de su religidn pre-hispénica, de los preceptos aprendidos de generacidn en generacion. La segunda leccidn de Arthur es que la OrganizaciOn a la que sirve es manejada por un hombre que explota a los indios, corrupto y egoista. Per tal razen, abandona su puesto y se queda solo, en medio de un mundo extraho, pero que por lo menos hablaba su mismo idioma: incomprension, despojo, esperanza. Se da cuenta de que no se trataba de imponer una doctrina extraha, de una raza superior, de un dios blance, ni de manipular los sentimientos de los indios para controlarlos. Se trataba de entender y respetar, nada mas. Arthur Smith tiene que escoger entre una actitud de explotaeiOn y complacencia personal y entre la situaciOn indigena. Deja la organizacien cristiana y asi salva su alma. Rosario Castellanos presenta en Ciudad Real una visiOn penetrante y multifacética de San Cristobal las Casas. La realidad se presenta a través de las ideas y conceptos que los indigenas han conservado en su tradiciOn. E1 mundo del indio es una realidad mitica. En los cuatro cuentos cuyos personajes centrales son indigenas ("La muerte del tigre", "La tregua", "Aceite guapo" y "La suerte de Teodoro Mendez Acubal") se presentan cuadros de una amarga 119 existencia en contra de fuerzas enemigas. Los cuentos restantes ("Modesta Gomez", "El advenimiento del Aguila", "Cuarta vigilia", "La rueda del hambriento, "E1 don rechazado", y "Arthur Smith salva su alma") integran eon efieacia en sus mundos novelescos e1 concepte indigena de la realidad. Los indios padecen un suplicio continue, exacerbado per dos instituciones que fomentan los ladinos:9 la supersticidn y el consume del alcohol. Aparece tambien, muy marcadamente, cemo e1 indio entrelaza todos los hechos cetidianes con la concepciOn mégica, mitica del universo. E1 indio lucha, dia a dia, para conservar sus tradiciones, su cultura sin requebrajamientos. Pero siempre pierde ante la potencia invencible del 1adino. Los cuentos de Ciudad Real son e1 reflejo de una miseria degra- dante, de la supersticien que deja a la muerte actuar libremente. Son e1 reflejo de creencias caducas en nombre de las cuales se di- lapida lo indispensable; odios que los diezman, transmitidos por los brujes; un miedo infantil hacia las fuerzas, que, desde hace siglos, han dejado de ser misteriosas; un alcoholisme sagrado, mortal como una epidemia. Los indios son rechazados siempre més alla de las tierras fértiles. Viven en medio de las altas montahas, sobre un suelo devastado por la erosien, que erige inmensos esfuerzos para ofrecer 1a precaria subsistencia cotidiana. Dejados en el mes total abandono se trata, no obstante, per todos los medios de roer sus mezquinos ingresos: arrebaténdole per la fuerza sus productos a precios irrisorios; sometiéndole a la codicia brutal de los funcionarios 120 mestizos; erigiendo legalmente en crimen duramente castigado 1a elaboracion doméstica del alcohol, para obligarle a consumir 1a mezcla nociva que el blance les vende come alcohol. Si per una causa de urgencia vital se alquilan para obtener algun dinero, son victimas, ademas, de una escandalosa explotaciOn de condiciones que hace peligrar su existencia. Hasta hace peco, alcanzaban los cafetales de zonas calientes, que constituyen su principal fuente de trabajo, a través de marchas de seis o siete dias. Regresan después de unas semanas, agotados por un tratamiento de presidio y por las enfermedades tropicales. Muchos de ellos mueren en las carreteras, lejos de los suyos. Frente a este cuadro, su caracter irreductible se revela como una fuerza salvadora. Porque si hubieran renunciado a la tradicien, su raza estaria ya extinguida y los supervivientes se encontrarian esparcidos en alguna hacienda lejana sujetos a leyes de hierro; perdidos en el medio amorfo de los alrededores de las capitales, y en los mejores cases, demesticados por amos benevolos. Es decir, que para poder juzgar 1a negativa de asimilacion que los indios chamulas, tzotziles y tzeltales sostienen desde hace siglos a1 precio de su vida, habria primero que tratar de comprender los fundamentos de la cultura a que se aferran. Y estos fundamentos son los que presenta Rosario Castellanos en Ciudad Real. Los convidados figagosto10 (1964) segundo libro de relatos de Rosario Castellanos, incluye tres cuentos y una novela corta. En esta coleccidn, 1a autora agota su interés por la vida y las costumbres de 121 105 indigenas y presenta una nueva dimensidn de la realidad: la vida de la pequefia elase media en la provincia. Los personajes en los cuales se centra 1a acciOn son personajes femeninos: Gertrudis, en "Las amistades efimeras", Reinerie, en "Vals capricho", Emelina en "Los convidados de agosto", y Romelia en §l_viudo Roman. Estas mujeres aparecen agobiadas per una sociedad que se basa en tradiciones y costumbres inalterables. Solas, tienen que sobrellevar los convencionalismos y prejuicios pueblerinos que las somete a una soledad sin remedio. Aqui aparece la vida de la mujer como un circulo de frustraciones, fracasos y desengahos. Los finicos atributos a los que las protago- nistas pueden aspirar son: 1a abnegacidn, e1 renunciamiento y el sacrificio. Y es que la mujer esta destinada finicamente a los labores del hogar. Ella tiene que llenar los requisites de bondad, laboriosidad y de virginidad. Toda intencidn de rebeli6n es aplastada irrevocablemente. Los personajes se debaten entre un dilema desquiciante: 1a oposicidn entre el mundo eircundante (el pueblo) y el mundo del espiritu (e1 querer ser). Viven de alguna manera estas dos realidades que no logran conciliar: 1a una que les fue dada a1 nacer; y la otra en la cual viven a través de sus suehos, de su imaginacidn. La realidad primera es insuficiente para la realizaciOn personal. Esta se vuelve cada vez mes asfixiante e insoportable. Aumenta e1 desequilibrio y con ello 1a frustracion. Tal es el caso de Emelina en el cuento que da su nombre a1 libro: "Los convidados de agosto". 122 Emelina desea su libertad. Anhela tener relaciones con un hombre. Quiere sentirse mujer: ' '...sentia 1a respiracidn de alguien alli. Alguien cuyo rostro no alcanzaba a distinguir y cuye cuerpo no cuajaba en una forma definida. Era mes bien una especie de exaltaciOn, de plenitud, de sangre caliente y répida cantando en las venas. Era un hombre." (p. 60.) El dia de la fiesta de su pueblo, Emelina logra atraer la atencidn de un forastero. Esta era su eportunidad. Pero su hermano Mateo la priva, con su intervenciOn, de su conquista, de su liberacion. "Cuando adquirio plena conciencia de que la eportunidad habia pasado, Emelina se puso a aullar, como una loca, como un animal." (p. 95.) Emelina pierde 1a conquista de su felicidad, la realizacion de su sueho. De ahi que su desesperaeiOn 1a haga aullar como un animal herido. Reinerie es otra Victima de ese ambiente petrificado que se llama Comitén. En ”Vals capricho" se representa un cuadro tipico de la vida pueblerina, de las costumbres y desenvolvimiento de tres mujeres que viven a1 pie de la letra de los estatutos que rigen a su comunidad. Reinerie es hija ilegitima. AdemAs es bella e inteligente. Por estas mismas razones es rechazada por todo el pueblo. Se 1e niega la amistad, e1 apoyo y la aceptaciOn necesarias para poder vivir. Despues de varies intentos fallidos para ingresar a la comunidad, Reinerie huye a la selva, desesperada y ya completamente loca. Reinerie habia nacido en la selva y conocia secretes que la 123 hacian diferente a las demAs muchachas de su edad. Este era e1 misterio de Reinerie: Reinerie poseia unos secretes que colocaban a las comitecas en un nivel de subordinaciOn. Estos secretes se referian a la vida sexual de los animales y tambien, Lpor que no? de las personas. Reinerie describia con vivacidad y abundancia de detalles e1 cortejo de les pejaros, e1 apareamiento de les cuadrfipedos, e1 cruzmmiento de las razas, e1 parte de las bestias de labor, las violaciones de las nubiles, la iniciacien de los adolescentes y las tentativas de seducci6n de los viejos. (p. 43.) Reinerie esta a1 mérgen, fuera de todo alcance del pueblo. Como cualquier cosa o cualquier persona que sale fuera de lo comun en un pueblo 0 en una ciudad, Reinerie lleva en 31 la semilla del mito. La gente, que inconscientemente esta avida de saber cosas en torno a las costumbres personales de la muchacha y particularmente de sus extravagancias mas caracteristicas y caprichosas, estén asumiendo y satisfaciendo una rudimentaria apetencia de mitificar. Romelia es otra Victima de la sociedad de Comitan. §1_viudo RomAn es la novela corta que aparece en Los convidados gs agosto y cuyo tema es la venganza. E1 doctor Carlos Roman escoge come esposa a Romelia Orantes, después de varies ahos de viudez y aislamiento. Su noviazgo es corto. La suntuosa boda culmina en un matrimonio catastrdfico. A1 dia siguiente del enlace, Romén entrega a la recién casada a su familia explicando a secas que no la encontre virgen. La razen, sin embargo, es que en casamiento con Romelia fue una represalia para vengar 1a afrenta que le hizo, hacia diez ahos, el hermano de ella, quien fue entonces amante de su primera esposa Estela. 124 La sociedad, tal como la presenta en esta obra Rosario Castellanos, es una sociedad regida per reglas masculinas que oprimen los instintos mAs basicos de los personajes femeninos y cuyas normas les impiden actuar con naturalidad. Estas normas y convencionalismos provocan la indiferencia de Emelina a su rapto voluntario; la satisfaccidn que sentia 1a semi-salvaje Reinerie a1 escandalizar a las jOvenes con sus cuentos de la vida sexual de los animales; y la torpeza de las caricias de Romelia en su lecho nupcial para fingir virginidad. Las protagonistas del libro son tragicas. Tragicas en el sentido de no poder enfrentarse a las fuerzas sociales que las aniquilan. Estén condenadas a vivir un mundo de fantasia que no tiene ninguna relaciOn con el mundo circundante. Estan condenadas a vivir en una sociedad con prejuicios que las obliga a eumplir eon preceptos abstraidos de las conveniencias masculinas, sacrificando sus nece- sidades, sus autenticas aspiraciones, la verdadera realizacidn como ser humano. La mujer aparece aqui como un mito. En su excelente libro de ensayos, Mujer que sabe latin,11 Rosario Castellanos hace notar que la mujer ha sido: "...mAs que un fendmeno de la naturaleza, mes que un componente de la sociedad, mAs que una criatura humana, un mito."12 Castellanos continfia afirmando: Simone de Beauvoir afirma que el mito implica siempre un sujeto que proyecta sus esperanzas y sus temores hacia el cielo de lo trascendente. En el caso que nos ocupa el hombre convierte a lo femenino en un receptaculo de estados de Animo contradictorios y lo coloca en un mAs alla en el que se nos 125 muestra una figura, si bien variable en sus formas, monetona en su significado. Y e1 proceso mitificador, que es acumulativo, aleanza a cubrir sus invenciones de una densidad tan opaca; las aloja en niveles tan prefundos de la conciencia y en estratos tan remotes del pasado que impide la contemplacidn libre y directa del objeto, e1 conocimiento claro del ser a1 que ha sustituido y usurpado. E1 culto a la virginidad', por ejemplo, aparece en §1_yiugg BEEEE como un recurso utilizado para controlar a la mujer, y en este caso, su conducta sexual. Porque la mujer es un ente a1 servicio del hombre. Es un instrumento en el cual se apoya el hombre para consolidar su machismo. Todavia hay muchos hombres a quienes les importa de manera extremada 1a virginidad de las mujeres; y a éstas les interesa ser virgenes puesto que una mujer que la ha perdido "ya no vale nada". La ambientacion es el rasgo mes distintivo de los cuentos y la novela corta de Los convidados 92 agosto. El ambiente, e1 aura que rodea y da forma a cada faceta de la existencia de les personajes de Comitan, es mes evidente en el epaeo telon frente a1 cual los principales personajes buscan, contra abrumadoras desventajas, darle expresiOn y sentido a sus vidas. E1 alcance de estas desventajas lo acrecienta 1a opacidad y hostilidad con que guian 1a mayor parte de ellos sus acciones. La visiOn empequehecida del mundo provinciano se refleja en este libro con gran acertamiento y talento literario. Rosario Castellanos ha sabido combinar de una manera dramAtica y convincente la realidad social y el mito mexicane de la mujer. CITAS 1 Rosario Castellanos, Ciudad Real (Mexico, 1974) Todas las citas de Ciudad Real serén tomadas de esta ediciOn. 2 E. Meletinski, Estudio estructural y gipoldgieo del cuento (Buenos Aires, 1972) p. 28. 3 Joseph Sommers, "E1 ciclo de Chiapas: Nueva corriente literaria", Cuadernos Americanos (Mexico, 1964) No. I, p. 256. 4 Maria del Carmen Millan, "Ciudad Real", Revista gs Bellas Artes, No. 18 (nov.-dic., 1974), p. 26. S Guiteras Holmes, Los peligros del alma: visien del mundo d3 .23 tzotzil (Mexico, 1965), p. 237. 6 Ibid., p. 90. 7 Millan, p. 26. 8 Sommers, p. 256. 9Richard Adams, Encuesta sobre 1§_cultura $3.103 ladinos 93 Guatemala (Guatemala, 1956), pp. 17-18. En su estudio de lo 1adino en Guatemala, Richard Adams llege a las siguientes conclusiones: a) Lo ladino no se debe confundir con 10 blance o lo mestizo. b) No es un fen6meno racial sino socio-cultural, un proceso hacia la adopcidn de los ideales espafioles. e) E1 empleo del término cambia de departamento y de una persona a otra. d) Un 1adino es una persona que no pertenece a un grupo indigena. 126 127 10 Rosario Castellanos, Los convidados g3 agosto (Mexico, 1968) Las citas pertinentes a este libro son de esta edicion. 11 , Mujer que sabe latin OMéxico, 1973) 12 Castellanos, p. 7. 13 Ibid., p. 7 CAPITULO V LOS MITOS CONTEMPORANEOS EN ALBUM_Q§_FAMILIA Y §L_ETERNO FEMENINO Album 2E familia (1971), esta compuesto por cuatro relatos: "Leccidn de cocina", "Domingo", "Cabecita blanca" y "Album de familia". La problemética constante que aparece en estos relatos es la situaciOn de la mujer en.Mexico. Como dice 1a autora: "El tema fue descubierto gracias a la sagacidad de Luis Dominguez que supo hallar la verdadera problemAtica: la de la situacidn de la mujer y la de las situaciones en las que tienen que realizar los actos que se le proponen come validos y alcanzar, a través de ellos, su plenitud de persona. 0 lo contrario."2 E1 estrato social que sirve de teldn de fondo en este libro es la sociedad burguesa de la Ciudad de Mexico. Es una sociedad en la que la mujer no tiene acceso a la realizacidn personal ni a la autenticidad. Los personajes que aparecen en Albgm_§g_familia son arquetipos: 1a casada defraudada en "Leccidn de cocina", la pequeha burguesa, la mujer frivola en "Domingo", 1a madre chantajosa y mani- puladora en "Cabecita blanca" y la mujer moderna, 1a fracasada y la mediocre en "Album de familia". Estas mujeres escogen e1 comportamiento de pose. Actfian y viven como per inercia, no per lo que su naturaleza les dicta, sino por los preceptos que les dicta e1 sistema social a1 que pertenecen. La protagonista de "Leccidn de cocina" acepta, aunque de mala gana, e1 'rito' matrimonial que 1e impone su condicien de casada. 128 129 E1 problema central alrededor del cual gira e1 cuento es el dilema de escoger entre una vida auténtica, o asumir e1 papel de la "perfecta casada" asignado por la sociedad. La protagonista escoge 1a segunda opci6n. Por un acto de conveniencia, la mujer pierde 1a eportunidad de realizaciOn. Yo rumiaré, en silencio, mi rencor. Se me atribuyen las responsabilidades y las tareas de una criada para todo. He de mantener la casa impecable, 1a repa lista, e1 ritmo de la alimentaciOn infalible. Pero no se me paga ningfin sueldo, no se me concede un dia libre a la semana, no puedo cambiar de amo. Debo, por otra parte, eontribuir a1 sostenimiento del hogar y he de desempenar con efieacia un trabajo en el que el jefe exige y los compafieros conspiran y los subordinades odian. En mis rates de ocio me transforme en una dama de sociedad que ofrece comidas y cenas a los amigos de su marido, que asiste a reuniones, que se abona a la opera, que controla su peso, que renueva su guardarropa, que cuida 1a lozania de su cutis, que se conserva atractiva, que esta a1 tanto de los chismes, que se desvela y que madruga. (p. 15.) Tales son los deberes y las funciones de la mujer que representa bien su papel de la perfecta casada. La protagonista esta insatisfecha de su situacidn, pero escoger e1 camino de la libertad es todavia mucho mas dificil. Habria que aceptar responsabilidades. Y ella, come las demés mujeres que aqui aparecen, no estén todavia preparadas para dar eso que la autora llama e1 salte mortal. El salte que la protagonista da es el de llegar a ser 'la cabecita blanea' que aparece en el tercer relato, "Cabecita blanca".3 Justina es aqui 1a madre abnegada. La mujer que es virtuosa, pasiva y comprensiva. La madre que sufre y aguanta la infidelidad de su marido. La mujer que sacrifice su vida por los hijos y que no vacila en recurrir a1 chantaje sentimental para retenerlos. Faustina es la personificacion de la mujer que "habita esa especie de limbo que 130 constituye e1 ideal que persigue la educacidn femenina en nuestro "4 El fin de su matrimonio es el de procrear, cumpliéndose pais. asi e1 mito de la maternidad.5 Los hijos son su seguridad, su futuro, sus aliados. Faustina finge vivir en un estado de limbo en el cual se refugia para no darse cuenta de que su marido la engaha. Simula no enterarse de que su hijo Luisito es un homosexual, eosa que ella misma propicio. Pretende no enterarse de que en hija Carmela, a quien empujo a un matrimonio premature, se convierte en una prostituta, y que su hija Lupe se ha convertido en una solterona amargada. En "Cabecita blanca" Justina actfia come esclava y como verdugo. El sufrimiento y la abnegacion son sus armas para manipular y dominar a su familia. Su inconsciencia y ceguedad hacia las mes elementales necesidades de sus hijos hacen que su hogar se convierta en un lugar en el que no se puede vivir, envileeiendo la atmOSfera hasta volverla irrespirable. Es e1 simbolo de la Coatlicue, quien, come sehala Octavio Paz: "Es la encarnacidn del bien y del mal. La diosa amante, protectora pero tambien diosa asesina que persigue y que inclusive mata a sus hijos."6 Justina encarna e1 mito de la Coatlicue. En el siguiente relato de Album 92 familia, "Domingo", Edith personifica a la mujer frivola, vacia. Es e1 prototipe de la mujer mexicana que ha alcanzado un cierto grado de libertad porque tiene amantes y puede discutir sobre el aborto. Edith sabe detectar a los solteros crOnieos que asisten a sus reuniones los domingos, y 131 a que tipos de hombre 1e interesa una mujer come ella. En sus rates de ocio acude a la pintura. Su vida se desplaza en la monotonia, 1a hipocresia y la falsedad. Como sehala Rosario Castellanos, su vida consiste en: ...una apariencia de matrimonio, un recuerdo 0 un proyecto de adulterio, una concurrencia de muchas personas en un mismo lugar donde juegan a1 juego de la gallina ciega en el que nadie encuentra a nadie. aY la maternidad? Ha sido un interesante hecho biolOgico, que, eomo todos los hechos bioldgicos, no tienen vigencia mas que mientras se encuentran en proceso de desarrollo... Y un vago afan de arte... 5N0 sera por alli e1 camino? Pero Edith es perezosa, es frivola, 1e gusta vivir a gusto. Mientras 1a pintura 1e proporcione satisfacciones seguira recurriendo a ella. Pero en cuanto empiece a plantearle exigencias va a abandonarla. Y 1a figura amorfa de su cuadro inconcluso sera ella misma. E1 matrimonio de Edith estaba consolidado por conveniencias sociales y vinculos tan selidos come las propiedades en comun y ”hasta 1a manera especial de tomar e1 chocolate antes de dormir."8 Carlos y Edith son el prototipe de la pareja de la clase media que le gusta vivir a gusto. La pareja que recibe lo que les brinda satisfacciones y que abandona lo que les plantea exigencias. Son arribistas, es decir, pertenecen a la clase de los nuevos ricos: "Cuando Edith se case con Carlos, ambos eran pobres come ratas y disfrutaron enormemente de sus abstenciones porque se sentian hereicos, y de sus despilfarros porque se imaginaban libres". (p. 39.) Carlos y Edith pertenecen a la sociedad mexicana que vive bajo e1 auspicio del mito del éxito, del mito de la propiedad_privada y del confort.9 Pertenecen a1 tipo de clase social que demanda un apartamento lujoso, hijos saludables, un gran carro, suficientes aherros que les permita hacer sus anuales vacaciones, reuniones y 132 tarjetas de credito en las mejores tiendas. "Album de familia", narracion que da su nombre a1 libro, presenta 1a visi6n aguda de Rosario Castellanos de la mujer inte- lectual que ha ido a la universidad y adquirido e1 titulo de autosuficiencia e independencia. La presentacidn, sin embargo, no es nada halagadora. Porque lejos de haber adquirido autenticidad a traves de la educaeidn, las mujeres que aqui aparecen son come las denominara Santo Tomes, "varones mutilados".10 Son mujeres vulgares, mediocres que han buscado refugio en el mundo de las letras. Se trata de tres escritoras que acuden a felicitar a una celebre poetisa, Matilde Casanova, quien acababa de recibir e1 Premio Nobel. Matilde Casanova es una mujer enajenada. Ha perdido todo contacto con la realidad circundante. Vive 3610 en el mundo de la imaginaciOn. Matilde ha adquirido una dimensidn mitica en la mentalidad de las personas que la rodean: --De acuerdo. Este alejamiento aparte de romper sus vinculos con capillas, con grupos, contribuyo a idealizar su figura hasta hacer de ella un mito que ha devorado a su persona tanto como a la obra. Un mito es una especie de pararrayos: atrae las fuerzas que vienen de lo alto. (p. 72.) Victoria, 1a secretaria de Matilde, propone aprovechar e1 hecho de que Matilde se haya convertido en un mito como un recurso de liberacidn: "-- Ya que hemos hecho un mito que por lo menos nos sea fitil; que abra perspectivas nuevas a las mujeres mexicanas, que derribe los obstaeulos que les impide avanzar, ser libres." (p. 76.) Pero su proposicidn no tiene eco. Las escritoras que se refinen 133 alrededor de Matilde: Josefa, Aminta y Elvira no son libres. Una vez reunidas sacan a relucir sus envidias, celos y frustraciones. Pretenden aparecer come escritoras creativas, auténticas. Pero no son sino una vulgar representacidn de la mujer farsante, fracasada. Sobre este tipo de mujer habla Castellanos en su interesante articulo "Satisfaccidn no pedida": La mujer que abandona ese limbo es para entrar en el infierno de la lucidez. Una lueidez que hay que graduar, que hay que disminuir, que hay que, definitivamente, aplastar. Pero que, a veces, insiste en renacer. Y de pronto, hace e1 balance de una existencia entera en una sola palabra: farsante, fracasada, mediocre. La fauna que compone Album g3 familia en la que acaso, e1 personaje mAs lamentable no es ninguna de las que, de una manera e de otra han dado gate per liebre a su vocaciOn, sipo 1a finica que se inmole enteramente para cumplirla. La mujer, come puntualiza Octavio Paz, "vive presa en la imagen que la sociedad masculina 1e impone; por lo tanto, selo puede elegir rompiendo consigo misma."12 La mujer que presenta Castellanos en Album §g_familia no logra romper consigo misma ni con el sistema social que la cosifica. La autora hace resaltar el hecho de que la mujer podria tener acceso a la autenticidad si selo aceptara su condicidn de ser humano y rompiera e1 circulo de mitos sobre los cuales esta continuamente girando. Es decir, romper con el mito de la maternidad, de la fidelidad conyugal, de la abnegaciOn, del apoyo.13 Continua Octavio Paz afirmando que el amor es una fuerza emotiva que puede transformar a la mujer: "Y es verdad: el amor hace otra a la mujer, pues si se atreve a amar, a elegir, si se atreve a ser ella misma, debe romper esa imagen con que el mundo encarcela su ser."14 Es interesante observar que el amor no aparece nunca en las 134 relaciones humanas que se dan en Album d3 familia. En el primer relato, "Leccidn de cocina", el amor se presenta como una lucha, como una conquista: "Boca arriba seportaba no 5610 mi prepio peso sino el de el encima del mio. La postura clasica para hacer el amor. Y gemia, de desgarramiento, de placer. E1 gemido clasico. Mitos, mitos." (p. 9.) Tampoco hay amor entre Carlos y Edith, la pareja protagonista de "Domingo". Su relaciOn matrimonial se basa en la costumbre. No lo hay tampoeo en "Cabecita blanca" ni en "Album de familia".15 E1 amor cuando se da resulta terriblemente efimero. Y es que en las condiciones que rigen las relaciones humanas en estos relatos, las situaciones amorosas son insostenibles, sobre todo dentro del matrimonio, pese a que es la instituciOn que pretende eternizar el amor. Rosario Castellanos ahade: "aQué juega, por ejemplo en un matrimonio? Juega la conveniencia, juega e1 futuro, por ejemplo, una muchacha, aqué busca en el hombre? Busca seguridad econdmica, busca apoyo, busca una situaciOn en la sociedad, busca la maternidad."16 Es importante ahadir que esta actitud de la autora no es una actitud "feminista", sino una de legiea y razonamiento. La mujer es Victima y complice de su situacidn. Castellanos muestra que la mujer ha elegido e1 camino facil de depender del esposo e de los hijos y de realizarse a través de ellos y no por si misma. La liberaciOn de la mujer mexicana todavia existe en el embito del mito, como algo inalcansable, algo que reside en '1as alturas'. La mujer huye de sus responsabilidades tras 1a mescara de 135 la femineidad, del matrimonio, de la fidelidad, de la represiOn sexual y moral que ella misma se impone. Y esa fidelidad no es el fruto del amor sexual individual, sino del célculo y la propiedad privada, es decir, e1 resultado de un hecho social y no la expresiOn de un acto natural y libre. 136 EL ETERNO FEMENINO La situacidn de la mujer mexicana viene a ser tambien el tema central del filtflmo libro de Rosario Castellanos, §1_eterno femenino. 17 [1975] Como sehala 1a autora en su ingeniosa y concienzuda autocritica incluida en la filtima parte de esta obra de teatro: "El ataque es especifico y va dirigido contra 1a abnegaciOn de las madres, contra la virtud de las esposas; contra 1a castidad de las novias; es decir, contra nuestros atributos proverbiales, atributos en los que se fincan nuestras instituciones mes selidas: la familia, 1a religidn, la patria." (p. 182.) Rosario Castellanos escoge un género peco comun en la literatura mexicana, 1a farsa, para plantear en un nivel jocoso, irenico y exagerado la tragicomedia que dia con dia vive la mujer mexicana. La autora presenta con vivacidad humoristica a una amplia variedad de imAgenes femeninas: la 'cabecita blanca' una vez mAs; la empleada, 1a hija, 1a querida, la esposa; ideales culturales o arquetipos (Eva, Sor Juana Ines de la Cruz, Carlota, 1a Malinche). En una excelente exposicidn sobre la obra de Rosario Castellanos, Maria del Carmen Millan destaca que, "Rosario Castellanos se propone, igual que otros escritores de este tiempo, arrojar a los mitos fuera de sus niches, y exhibir los pies de barre de los idolos."18 Raul Ortiz anade muy acertadamente en la introducciOn del libro: En El eterno femenino Rosario Castellanos arranca las mAscaras, combate mitos y ante un conflicto que no por dramAtico resultaba menos ambiguo e imprecise en el planteamiento, apunto con idioma Agil contra 1a hipocrita 137 complicidad de hombres y mujeres que se arellanan en un status quo del que ambos sexos pretenden obtener ventajas y provechos. En §l_eterno femenino, Castellanos presenta una sociedad roida por convencionalismos falsos e hip6critas que no se cuida mes que de las apariencias. Abre los libros de la historia, para hacer ver que la realidad social e histOrica de Mexico esta enraizada en leyendas falsas y en mitos hasta ahora eternos. Asi, continfia Ortiz afirmando: "En ciertas escenas 1a inspiracien se funde con un virtuosismo del que selo podia hacer gala quien ya habia deminado todas las gamas de la lirica; en otras, brota el acento capitalino proyectando no 5610 el habla que constantemente renueva el pueblo con feroz imaginaciOn, sino tambien las costumbres, tradiciones, ritos, creencias y supersticienes que, come atavismo, incorpora e1 mexicane en su vida cotidiana para soslayar un enfrentamiento con la verdad."20 Es un ambiente tan absurdo, pero tan real el que presenta la autora, que es imposible no reir, aunque amargamente. Los personajes reencarnan 1) la esposa inamovible, leal 2) la 'novia casta' 3) 1a prostituta que no se averguenza de su posicidn y dispuesta a todo con tal de no echar a perder su profesiOn 4) la "otra", 1a querida, que alternativamente se entrega a1 orgullo y al remordimiento de haber cedido a los meros impulses del amor sin respetar las exigencias de la sociedad 5) la soldadera, bragada 6) 1a suegra, entrometida; 7) 1a solterona, amarga 8) la criada, chismosa. A la atencidn de la autora, no se le escapa nada: ni la falsedad de los sentimientos, ni 1a falta de autenticidad, decoro 138 y honestidad, ni les juegos infantiles que las esposas juegan con los esposos y viceversa. Y ante esta absurda realidad, Castellanos no hace sino reirse de les personajes y de ella misma. Desde ese angulo, 1a autora analiza, escrutina, desmenuza y despedaza a todo y a todos. Como dice Raul Ortiz: "Ante nosotros marchan hombres y mujeres euyo aspecto grotesco no los vuelve menos amables. Y la carpa donde se desarrolla la fina comedia del segundo acto da una pincelada de circo que, sin duda, evocara e1 recuerdo de muchos de los fastuosos desfiles fellinianes."20 Rosario Castellanos escoge e1 teatro como medio de expresiOn, come manera de llegar a un pfiblico mAs amplio y diverse para asi poder transmitir lo que para ella fuera tan fundamental: 1a bfisqueda de 'otro modo de ser'. Por tal razen hace comentar a uno de sus personajes: "No basta adaptarnos a una sociedad que cambia en la superficie y permanece idéntica en la raiz. No basta imitar los modelos que se nos proponen y que son 1a respuesta a otras circunstancias que las nuestras. No basta siquiera descubrir lo que somos. Hay que inventarnos." (p. 194.) Hay que romper con las falsas ideas, que aqui se determinan como mitos. Hay que acabar con el mito de la maternidad y del matrimonio y enfrentarse a la "cruda realidad". Si a la mujer se le esta vedado e1 placer sexual, entonces hay que empezar a buscarlo, pero no cemo un juego y un deber, sino una necesidad hwmana. Este, come punto de partida, acarrearia un verdadero amor y consecuentemente un verdadero matrimonio y patrimonio. Y asi hasta alcanzar ese modo de ser humano y libre. 139 La mujer, desde el principio, ha sido destinada a una forma de vida esencialmente inerte, pasiva, infitil, a la de un parasite. Su aburrimiento 1a ha hecho tomar decisiones que accidentalmente la han colocado en la historia, pero a una historia que ha sido escrita exclusivamente por los hombres. Aqui Castellanos presenta su versiOn. Castellanos hace exclamar a uno de sus personajes: "Hay algo mas que tampoeo tomaremos en cuenta en este memento, y es el modo con que trata (1a autora) nuestra historia. La autora, obviamente no la conoce. Al desconocerla es incapaz de interpretarla y, como si eso fuera valido, 1a inventa. Y 1a invencidn tiende siempre a degradarnos y a ponernos en ridicule. Quien tal hizo ha escupido contra el cielo." (p. 183.) Mujeres de la historia de Mexico (La Malinche, Sor Juana, doha Josefa Ortiz de Dominguez, la Emperatriz Carlota, Rosario de la Pena y la Adelita), y mujeres de la actualidad, se suceden en la escena partiendo de un lugar, e1 salen de belleza, que en toda la obra sirve come disparadero y centro a1 que regresa la acciOn para de nuevo salir de el. A la dueha de un salen de belleza vienen a ofrecerle un dispositivo que evitara, el tiempo que sus clientas pasen bajo e1 secador, que éstas piensen, induciendolas a sohar. Este pequeho truce posibilitara e1 desfile de mujeres y situaciones grotescas y jocosas, ejemplares o cotidianas. Valiéndose de ese truce teatral, Castellanos presenta situaciones fragmentadas, un mundo acritico e irreflexivo donde se confunden 1a moral, e1 éxito, e1 fracaso, las victimas, les verdugos, y en donde no 140 hay posibilidad ni de libertad ni de elecciOn. La autora envuelve a1 lector en una atmdsfera en donde se ha perdido 1a posibilidad de crear historicamente un.mundo donde el hombre (y las mujeres) sean actores y autores de sus propios dramas para en vez pasar a ser comparsa de una historia hecha por otros, pensada por otros, realizada por otros. Se recrea un mundo de consume. Una sociedad que cree implicita- mente en la publicidad.21 Una sociedad que vive a través de la fetichizacidn y el objeto. Sirva de ejemplo el caso de Lupita, 'la madreeita ejemplar': "Mientras Pedrito se desgahita y el animador explica y Lupita insiste, se descargan encima de ella licuadoras, lavadoras, estufas, pasteles que forman una pirémide que la sepulta. Encima de la cfispide hay un pastel con una velita. Lupita, sintiendo que se asfixia, clama desde lo profundo del abismo.. iMe ahogo! iAuxilio...!" (p. 68.) La maternidad se convierte en un rito en el cual hay que seguir sacramentalmente las formalidades rituales: neuseas, desorden fisico, mal humor, antojes y otros males psicoldgicos que han sido transmi- tidos por las madres, generaciOn tras generacidn. Una vez madres, se vuelven tan egoistas como las suyas y se convierten en el simbolo de "ancestrales mentiras": 1a madreeita dedicada y sumisa. En el segundo acto 1a autora presenta una interpretaciOn definitivamente heterodoxa de seis mujeres que han pasado a la historia mexicana, incluyendo a una "Eva" que se come 1a manzana en el paraiso per simple rechazo a una vida ociosa, sin perspectivas 141 de progreso ni de cambio, ni de nada. Aparece una Malinche quien, sabiendo del incendio involuntario provoeado en las naves por un marinero descuidado que se quede dormido fumando, insta a Cortes para que haga correr e1 rumor de que fue él, en un rasgo hereico y lucido, quien las mando quemar. Aparecen tambien: Rosario de la Pena, musa del poeta mexicane, Manuel Acufia; Sor Juana y una nueva versi6n irrespetuosa de su reclusien en el convento; Josefa, la corregidora y su aburrimiento; Carlota de Maximiliano, y su aburri- miento; 1a Adelita y sus coroneles. La imagen de estos personajes histOricos que ha prevalecido hasta la fecha ha sido mAS que todo simbOlica. Estas mujeres, antes que nada, son un conjunto de abstracciones que se conjugan para formar un mito. 'La Malinche es la figura histOrica mAs legendaria de la conquista de Mexico. Es e1 simbolo del entreguismo y la admiraciOn desmedida por lo extranjero. Ella implica 1a negacidn de la autenticidad y del valor de los mexicanos. Es un ejemplo tipico del proceso de demonizaciOn.22 La Malinche es un mito a1 cual se atribuyen muchas actitudes o hechos, a1 margen de que pudiera haber side 0 no ciertos. A ella se 1e atribuye ser 1a iniciadora del mestizaje, la madre del "primer mexicane". Se 1e acusa de haber vendido a su patria, de ser traidora, come que sin su ayuda, Cortes no hubiera consumado 1a conquista de Mexico. Segfin Octavio Paz, la Malinche es el simbolo de la entrega. Continua Paz afirmando que: "Es verdad que la Malinche se da 142 voluntariamente a1 Conquistador, pero este, apenas deja de serle fitil, 1a olvida. Doha Marina se ha convertido en una figura que representa a las indias, fascinadas, violadas o seducidas por los espaholes. Y del mismo modo que el nifio no perdona a su madre que lo abandone por ir en busca de su padre, el pueblo mexicane no per- dona su traiciOn a la Malinche. Ella encarna lo abierto, lo chingado, frente a nuestros indios, impasibles y cerrados."23 Es decir, 1a Malinche encarna 1a.sexua1idad en lo que tiene de mAs irracional, de mas irreductible a las leyes morales. Traidora 1a llaman unos, fundadora de la nacionalidad, otros, segfin 1a perspectiva desde la cual se coloquen para juzgarla. Para Rosario Castellanos, la Malinche es un personaje inteligente, emprendedor, autosuficiente y de cuya raiz bien podia uno sentirse orgulloso. La autora rompe con la imagen del simbolo negative para presentarnos uno nuevo que ya merece empezar a ser considerado. Es un proceso en el cual se pasa de la demonizacidn a la divinizacidn. No es sorprendente encontrarse a Sor Juana en esta galeria. Sor Juana fue una mujer muy admirada y estudiada per Rosario Castellanos.24 Sor Juana Ines de la Cruz es el simbolo de la mujer intelectual, del genio femenino, del sacrificio humano por las letras y por la ciencia. Pero 1a autora quiso sacarla de la aureola de santidad y de perfeccion para mostrarnosla como una mujer con series conflictos internos y con posibles tendencias homosexuales. Al bajarla del niche en el cual se encuentra situada, 1a autora la presenta como un ser humano, ante todo, como una persona simplemente y no un mito. 143 Doha Josefa Ortiz de Dominguez tambien pasa de ser mito a mujer. Doha Josefa fue una figura predomiente en el movimiento libertario para independizar a Mexico. La Josefa que Castellanos presenta, no es la que en 1810 mandara, contra todo peligro, e1 mensaje a Hidalgo y Allende, que los llevaria a1 levantamiento y a la lucha para reclamar la libertad de la nacidn mexicana. No. Es una mujer impulsada por el aburrimiento, pero tambien por el impulse rebelde de quien se ve cosificada, encerrada y destinada a1 tedio y al hastio. La dignidad y arrogancia de la Emperatriz Carlota se ve redueida a una mediocre ambicien burguesa en El eterno femenino. La idealizada Rosario de la Pena se ve convertida en una vulgar buscona, y la Adelita como una frustrada soldadera que no pudo hacer nada contra 1a ignorancia de los coroneles y la ilimitada fuerza de la revolucion. Estos personajes histOricos, en tanto que han expresado destinos, aspiraciones y actitudes tipicas de sus respectivas epocas, han quedado investidas de un caracter mitico. A medida que han penetrado en la memoria popular, han adquirido una apariencia mitica. No han‘muerto, sobreviven en poesias, cuentos, leyendas populares, fotografias famosas, canciones, monumentos, museos. Porque, no se olvide que cualquier figura histdrica singular, cualquier cosa o cualquier persona que sale fuera de lo comfin lleva dentro de si la semilla del mito. Erik Kahler afirma que: Todo culto a1 héroe se mitifica involuntariamente. Incluye e1 curioso entrejuego de crear y, al mismo tiempo, 144 acortar una distancia: el pueblo aparta de si a1 héroe exagerando sus capacidades excepcionales, y sin embargo, parece urgido de familiarizarse con él elaborando detalles en torno a su personalidad. La existencia de lo extraordinario afecta a los seres humanos prepiciando en ellos una profunda inquietud. Lo magnifican y al mismo tiempo lo temen; ansian un seguro vinculo con ellos. Este explica el proceso de mitificaeidn que la mentalidad del mexicane ha asumido a través de la historia. Pero Rosario Castellanos no mitifica. Desmitifica a estos personajes (Sor Juana, 1a Malinche, Carlota, Josefa Ortiz, 1a Adelita) rompiendo sus idolos para convertirlos en personas comunes y corrientes cuye finico punto en comfin es su femineidad. En el tercer acto se presentan cinco tipos diferentes de la mujer femenina: la solterona, 1a prostituta, 1a querida, 1a periodista, y la mujer intelectual. En "La jornada de soltera", (nombre de la peluca que a1 ser puesta tiene e1 poder mAgico de transportar a la que la lleva a ese mundo solitario de la solterona) aparecen patéticas imégenes de un mundo solitario: la profesora que escribe en la pizarra e1 verbo amar y al volverse hacia el salen de clase, ve que esta completamente vaeio; la enfermera que cuida a una estatua yacente; la mujer sola, en labores sin mérito y sin fruto. En "Flor de fango" aparece la mujer que no puede ni debe escoger libremente e1 camino de la prostitueiOn. En "La usurpadora" se ve e1 sufrimiento de la querida, la de la casa 'chica', que ha perdido su atractivo y ha sido reemplazada. Esta mujer sufre las consecuencias de su pecado (la soledad y el abandono) y la inevitable caida a1 vicio. La periodista de "La mujer de Accidn", 145 entrevista a mujeres sin individualidad, sin ideologies, a celebridades huecas. Y finalmente aparece la mujer intelectual, quien enseha e interpreta toda una cultura en diez lecciones féciles. §1_eterno femenino presenta a la mujer como una marioneta a la que se manipula para que 'nunca se salga de su lugar' y para que represente bien su papel. Madre o virgen, hija o esposa, e1 principio femenino ha sido reducido a la domesticidad gracias a las creencias, a las duras practices de subyugaeidn de la familia. Como en filtima instancia la mujer no es mes que cuerpo, se reduce ese cuerpo a una cosa empantanada en su inmanencia. La autora busca un cambio. Mas para lograrlo es precise que cembien las situaciones concretas, les hechos reales, asi como tambien 1a conciencia colectiva que se apega a mitos cuya falsedad hay que combatir. Lo tremendamente tragico es que la mujer de esta obra prefiere obedecer los convencionalismos de una sociedad que no se cuida mes que de las apariencias. La mujer escoge 1a mescara. E1 proceso de desmitificacidn no tiene come fin borrar tantos insultos acumulados sobre la mujer durante siglos, tantas atribuciones en cuya falsedad parece radicar su solidez. E1 proposito es mostrar las posibilidades a través de las cuales la mujer puede afirmarse come ser humano ante un mundo que le niega la humanidad y como una conciencia autenoma‘ante otra que tradicionalmente se ha considerado 1a dominadora. A través de todo el libro se refleja 146 1a necesidad de que la mujer encuentre "ese otro modo de ser", una forma de ser auténticas. CITAS 1 Rosario Castellanos, Album.dg familia (Mexico, 1971). 2 , E 29.9 51.9 .19 29.19329. (Mexico. 1974). p. 229. 3 Samuel Gordon, "Cuando e1 pasado maneja 1a pluma con ira", Cuadernos 92 Jerusalen, (Israel, 1975), Vol. 2-3, p. 34. En este entrevista Gordon pregunta a la autora si la protagonista (que no tiene nombre) de "LecciOn de cocina" y Justina, la de la "Cabecita blanca" representan a la mujer mexicana en dos fases distintas, o si son dos aspectos del mismo fendmeno. Castellanos le responde: "Mas que dos clases sociales, o dos actitudes, son dos mementos. Es decir, la primera mujer esta prefigurando a la segunda. La mujer del primer relato no escoge 1a autenticidad porque no tiene ningun asidero para ello. Inmediatamente seria arrojada del sitio en el que tan dificilmente se ha ido incrustando, entonces, va a acabar en Cabecita blanca. Es decir, quiza 1a sehora de "Cabecita blanca" no fue nunca tan lficida, como la protagonista de "Leccidn de cocina”, pero se puede perder la lucidez con mucha facilidad, si uno insiste, y se puede llegar a ese vacio total, a esa blancura interna y externa a la que llega 1a protagonista del cuento. (pp. 34-35) 4 Castellanos, p. 231. 5 Gordon, p. 36. 6 Octavio Paz, E1 laberinto de la soledad (Mexico, 1973), p. 178. 7 Castellanos, p. 231. 8 Rosario Castellanos, Album d3 familia, p. 27. 147 148 9 Judith y Carlos son los tipicos burgueses que presenta Gabriel Careaga en su interesante libro: Mitos y_fantasias g3 la clase media d2 Mexico (Mexico, 1975), pp. 65-79. 10 R. Castellanos, Mujer que sabe latin, p. 19. 11 , fl use d_e 13 palabra, p. 231. 13 Samuel Gordon, p. 36. la Paz, p. 60. 15 En su entrevista con Samuel Gordon, Rosario Castellanos comenta sobre el aspecto del amor: "..No hay amor... En primer lugar hay una cosa esquizofrénica total. Es decir, por un lado esta e1 cuerpo, e1 sexo; per otro lado esta 1a relacidn amorosa "roméntica". No se trata de amor. Yo he buscado en las novelas mexicanas que he leido --y son bastantes--, alguna historia de amor. No he encontrado ninguna. No hay. (p. 37.) 16 Gordon, p. 37. 17 Rosario Castellanos, §1_eterno femenino (Mexico, 1975). 18 Maria del Carmen Millan, "Tres escritoras mexicanas del siglo XX", Cuadernos Americanos (Mexico, 1975), Vol. I, p. 179. 19 Castellanos, p. 183. 20 Raul Ortiz, en la introduceidn del libro El eterno femenino, p. 12. 21 Cf. Raphael Patai, Myth and Modern Man (Englewood Cliffs, New Jersey, 1972). 149 22 Véase el primer capitulo de este trabajo, pp. 37-38. 23 Octavio Paz, p. 78. 24 Veanse sus articulos: "Asedio a Sor Juana", y "Otra vez Sor Juana", en Juicios Sumarios (Mexico, 1966) pp. 19-30. 25 Erik Kahler, "La persistencia del mito", Dialogos (Mexico, 1971), No. 41, p. 13. CONCLUSION Se ha viste a través de este trabajo cemo e1 mito se manifiesta como elemento imprescindible en la narrativa de Rosario Castellanos. Para nuestro proposito e1 mito se ha viste como una manera de concebir 1a realidad, la vida; y a la vez, como una forma de descubrirla e interpretarla. E1 chamula vive en el mito, todos los acontecimientos --naci- miento, muerte, guerra, hembre y trabajo-- tienen para él un carecter reversible, y se repiten con un cierto signo de fatalidad. E1 hombre moderno, tal come aparece en las dos filtimas obras de Castellanos, necesita crear y recrear mitos, pues son los que le dan un sentido a su existencia. De aqui que transforme en mito los acontecimientos, los objetos materiales y culturales, sus suehos y fantasies. Los mitos que presenta Rosario Castellanos pertenecen a su mundo y cultura, y los utiliza conscientemente para trascender y elevar sus motives. Es decir, Castellanos utiliza e1 mito come medio de elevar y universalizar sus temas y personajes. En el primer capitulo se definio e1 mito para establecer los principios en que se base este estudio, para luego relacionarlos con la obra de Rosario Castellanos. En el capitulo segundo se enfocan IOS‘mitOS y leyendas que estructuran la consciencia mitica de los personajes en Bglgg‘gapgg. Se vie cemo 1a autora interpreta y recrea e1 concepte del mundo de los indios chamulas. Para conocer e1 ambiente y la forma de vivir de estos indigenas, se hizo una presentacidn geogréfica del Valle Chamula, tambien 1a técnica agricola de los mismos. 151 En Bglgn;§aggn el mundo mitico esta reconstruido a través de simbolos, de una formalizaciOn intuitiva de una cosmologia, de la interpretaciOn subjetiva de loS‘mitos y leyendas de les chamulas y de la capacidad de la autora de revelar la realidad en todos sus sentidos. En el tercer capitulo se enfoco 1a funciOn del mito en Oficio g3 tinieblas. Aqui aparecen personajes arquetipicos que revelan su propia manera de interpretar la vida, la naturaleza y la muerte. Basandose en las circunstancias histOricas de Chiapas, la autora se aprovecha de ellas para penetrar en los aspectos intrahistOricos de la misma. Los elementos antropolOgicos, sociales y psicolOgicos que maneja, nos colocan frente a una situaciOn real enfocada con objetividad y percepciOn artistica. Partiendo de una existente realidad, Rosario Castellanos recrea su propia visi6n del mundo indigena, para reivindicar social y humanamente a1 hombre chamula. Oficio d§_tinieblas esta basada en un hecho histdrico, e1 levanta- miento de los indios chamulas, en San Cristebal, e1 afio de 1867. Este hecho culmina con la crucifixidn de un joven indigena a1 que procla- maron les chamulas como en Cristo, y con la tragica derrota de estos. Pero, a pesar de esto, e1 chamula emerge en esta novela como el verdadero heroe, quien a pesar de su miseria y sufrimiento no pierde 1a esperanza de mejorar su situacidn social. Duefio de una consciencia mitica, para él no hay un proceso hist6rico, sino mes bien un simple presente perpetuo y la repeticién de una serie de actos rituales. El expediente mes acertado que emplea la autora para subrayar e1 152 contraste de cultura y la dicotomia fatal que da lugar a la tragedia, es contraponer dos concepciones del tiempo: e1 proceso histOrico de la reforma agraria tal como se conoce en la historia mexicana, y el concepte del tiempo del tzotzil, para quien el tiempo y la historia se miden segfin otro fenOmeno: la transformacien, dentro de la consciencia colectiva indigena, de realidad en mito. Este proceso mental capacita a1 chamula para vivir de acuerdo con creencias sobrenaturales heredadas y elaboradas a través de siglos, interpretande presente y future a la luz turbia de un pasado de misterio y tragedia. En el capitulo cuarto, se enfoco e1 mito etioldgico de los tzoltziles, sus leyendas, sus ceremonias, sus creencias, su forma de vivir y su decadencia. En Ciudad Real Rosario Castellanos presenta dramAticamente e1 contacto entre indios y ladinos. A1 enfrentarse con las presiones abrumadoras de esta sociedad, e1 chamula convoca en su defensa las creencias y la sabiduria heredadas de generaciones pretéritas. Aunque, como se vio, resultan inadecuades estos recursos en una lucha desigual. Los diez cuentos de Ciudad 3231 son e1 reflejo de una miseria degradante en que vive e1 indio, de la supersticiOn que deja a la muerte actuar libremente. Son tambien el reflejo de creencias caducas en nombre de las cuales se dilapida lo indispensable; odios que los diezman, transmitidos por los brujes; un miedo infantil hacia las fuerzas que, desde hace siglos, han dejado de ser misteriosas; un alcoholisme sagrado, mortal como una epidemia. Frente a este cuadro, e1 caracter irreductible de los tzotziles se revela como una fuerza salvadora. Porque si hubieran renunciade a la 153 tradiciOn, su raza estaria ya extinguida y los supervivientes se encontrarian esparcidos en alguna hacienda come sirvientes, perdidos en el medio amorfo de los alrededores de las capitales, 0 en los mejores de los cases, demesticados por amos benevolos. En Ciudad Real se integra con efieacia e1 concepte indigena de la realidad. En su totalidad, ofrece una vista penetrante de las mfiltiples caras de una corrupciOn ligada fatalmente a la poblacion indigena. Sin embargo, e1 indigena mantiene su lucha eoleetiva para sobrevivir los golpes del destino que él no puede controlar. Esta coleccion de cuentos se distingue en su aprehensien de la vitalidad de las leyendas mayatzolzil, atestiguado draméticamente hasta que grado tradiciones y formas prehispénicas permaneeen vivas hey. E1 hilo comun de las obras hasta aqui mencionadas es el interés por parte de la autora per formas y conceptos indigenos: leyendas, simbolismo del mito, papel de lo sobrenatural en la vida actual, predominio del pasado en el presente. Esta estilizaciOn de formas indies, desde el ggpgl_yuh‘hasta leyendas orales contemporaneas, constituyen un valor intrinsico en la obra narrativa denominada "e1 cilo de Chiapas" de Rosario Castellanos. La autora ha superado e1 nivel de propaganda en su proceso creative. En Los convidados g2 agosto, Castellanos presenta cemo 1a ignorancia y las supersticienes de los habitantes de Comitan traen con ellas la tragedia de les personajes. Aunque e1 protagonista es ahora la mujer, el tema central es el mismo del de los libros anteriores: 1a actitud de les sometidos frente a los sometedores. 154 Los personajes, femeninos todos ellos, son tregicas porque viven en un mundo que no las comprende. Estan condenadas a vivir un mundo de fantasia que no tiene ninguna relacidn con el mundo circundante. Su destino es vivir en una sociedad eon prejuicios que las obliga a eumplir con preceptos abstraidos de las conveniencias masculinas, sacrificando sus necesidades, sus auténticas aspiraciones, 1a verdadera realizaciOn come ser humano. El ambiente es el rasgo mes distintivo de los cuentos y de la novela corta de Los convidados g5 Agosto. La ambientaciOn, e1 aura que rodea y da forma a cada faceta de la existencia de les personajes de Comitan, es mes evidente en el opaco telen frente a1 cual les principales personajes buscan, contra abrumadoras desventajas, darle expresion y sentido a sus vidas. E1 alcance de estas desventajas lo acrecienta la opacidad y hostilidad con que guian 1a mayor parte de ellos sus acciones. La visidn empequehecida del mundo provinciano se refleja en este libro con gran acierto y talento literario. Rosario Castellanos ha sabido combinar de una manera dramética y convincente 1a realidad social y el mito mexicane de la mujer. En Album d2 familia y El eterno femenino, analizados en el quinto capitulo se contempla 1a actitud de mas honda preocupaci6n por la realidad histdrica y social. Lejos de llevar a mundos quiméricos e imposibles, los recursos miticos nos enfrentan a las mes hondas dimensiones de la realidad en que vivimos. En Album d3 familia la mujer aparece subyugada y cosificada. La autora hace resaltar e1 hecho de que la mujer podria tener acceso a 155 la autenticidad si selo aceptara su condicidn de ser humano y rompiera e1 circulo de mitos sobre los cuales esta continuamente girando. Es decir, romper con el mito de la maternidad, de la fidelidad conyugal, de la virginidad y el de la abnegaciOn. Cabe hacer menciOn que la actitud de la autora no es una actitud feminists, sino una de ldgica y razonamiento. La mujer es victima y cemplice de su situacidn. Castellanos muestra que la mujer ha elegido e1 camino de la dependencia y la sumisiOn. La liberaciOn de la mujer mexicana todavia existe en el ambito del mito, como algo inalcanzable, algo que reside en "las alturas". En El eterno femenino, Rosario Castellanos presenta 1a situacien de la mujer mexicana. La autora escoge un genero poco comun en la literatura mexicana, 1a farsa, para plantear en un nivel jocoso, irOnico y exagerado 1a tragicomedia que dia con dia vive la mujer. Presenta tambien una amplia variedad de imAgenes femeninas para arrojar los mitos fuera de sus niches y atacar directamente a la fingida abnegaciOn de las madres, 1a engahosa virtud de las esposas y la supuesta castidad de las novias. En esta obra teatral, Castellanos presenta tambien a una sociedad roida por convencionalismos falsos e hipOcritas que no se cuida mes que de las apariencias. Abre les libros de la historia para hacer ver que la realidad social e histdrica de Mexico esta enraizada en leyendas falsas y en mitos hasta ahora eternos. El prepOSito de esta farsa es, obviamente, mostrar las posibilidades a traves de las cuales la mujer puede afirmarse como ser humano ante un mundo que le 156 niega 1a humanidad y una conciencia autenoma ante otra que tradicional- mente se ha considerado como la dominadora. A través de toda la obra se refleja 1a necesidad de que la mujer encuentre "ese etro modo de ser", una forma de ser autenticas. El hecho de que Rosario Castellanos presente e1 mito en diferentes aspectos a través de su narrativa, confiere a su obra un valor y una universalidad no percibida afin por la critica. Aunque 1a mayor parte de los criticos hayan encasillado a la autora dentro de la corriente literaria denominada come indigenista, las ideas sostenidas a través de este estudio comprueban lo contrario. La propia autora afirmo, en una entrevista que sostuvo con Emmanuel Carballo, que si se atenia a lo que ella habia leido dentro de la corriente indigenista, que por otra parte no le interesaba, sus novelas y cuentos no encajaban en ella. Castellanos ahade: Uno de los defectos principales del indigenismo reside en considerar el mundo indigena como un mundo exdtico en el que los personajes, por ser las victimas, son raros, poéticos y buenos. Esta simplicidad me cause risa. Los indios son seres humanos absolutamente iguales a los blancos, solo que colocados en una circunstancia especial y desfavorable. Como son mas débiles, pueden ser mes males --violentos, traidores e hip6critas-- que los blancos. Los indios no me parecen misteriosos ni poéticos. Lo que ocurre es que viven en una miseria atroz. Es neeesario describir c6mo esa miseria ha atrofiado sus mejores cualidades. Otro detalle que los autores indigenistas descuidan es la forma. ...Por pretender mis libros objetivos muy distintos, no se me puede incluir en esta corriente. Esto no niega, sin embargo, que sea la de Castellanos una obra comprometida. Lo es, pero comprometida en el sentido que ella misma lo define: 157 E1 compromise es transcribir con los medios estéticos mes adecuados, mes ricos, mes llenos de matices, esa realidad que nosotros aleanzamos a contemplar, a descubrir, y que queremos transmitir a los demes; entonces e1 compromise esencial del artiste no debe ser hacia una consigna dictada desde fuera por nadie, ni por ningun partido politico, ni per una doctrina religiosa, ni per una escuela estética, sino por sus propias experiencias. Los objetivos que persigue Castellanos en su obra son: penetrar en las circunstancias, entender los maviles y captar la psicologia de sus personajes. Persigue tambien ahondar en las cosas y en los seres para desentrahar lo mes profundo y universal en ellos. La autora explore, describe y trabaja contra les patrones culturales de dominaciOn-sumisiOn entre hombres y mujeres, blancos e indios, padres e hijos. Lo cual 1a hace enfrentarse con el mito, en el que, segfin Carlos Fuentes, "se puede reconocer tanto 1a mitad oculta, pero no per ello menos verdadera de la vida".3 CITAS 1 Emmanuel Carballo, "Rosario Castellanos: 1a vocacien come destino," E1 centavo, Vol. V., No. 58, (Mexico, febrero de 1964), p. 20. 2 Maria Luisa Cresta de Leguizamen, "En recuerdo de Rosario Castellanos," Lg_pa1abra y_gl hombre, No. 19 (Mexico, 1976), p. 4. 3 Carlos Fuentes, La nueve novela hispanoamericana (Mexico, 1969) p. 19. 158 BIBLIOGRAPHY BIBLIOGRAFIA DE OBRAS CONSULTADAS Obas Generales: Adams, Richard. Encuesta sobre la culture fig 105 ladinos dg Guatemala. Guatemala: Editorial del Ministerio de Educacien Pfibliea, 1955. Alegria, Fernando. 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